Con apenas 13 años, Marco Bermúdez Naveiras es uno de los emprendedores más brillantes de Asturias y España. A esta edad ya factura con el que es su tercer proyecto de negocio y participa en charlas, talleres y cursos junto a gente que le saca muchos años (y décadas)
24 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Con apenas 13 años, Marco Bermúdez Naveiras es uno de los emprendedores más precoces y con un futuro más brillante, no solo de Asturias, sino de toda España. Este alumno del colegio Santo Domingo de Oviedo ya ha creado tres proyectos de negocio, el último de los cuales, ThreeDimensional, ya está dando beneficios. Además, participa regularmente como ponente en charlas, cursos y talleres junto a gente que, en la mayoría de las ocasiones, le duplica, triplica o cuadriplica la edad.
Desde hace unos años, Marco acude a la Genyus School de Gijón, una escuela cuyo objetivo es que jóvenes emprendedores canalicen su talento y aprendan a llevar a la realidad las ideas que rondan por su materia gris. «El emprendimiento lleva en mi vida desde que nací», explica este joven. Rememora que empezó «con nueve años en Genyus School, donde enseñan a crear un negocio, hablar en público... y entonces ahí fue cuando ya creé mi primera empresa, Marcbots».
Este proyecto inicial era «una empresa de robots humanoides y con inteligencia artificial, en la que la idea era que ayudaran a personas mayores». «Luego, un día, fui al supermercado con mi padre, estábamos buscando algo y no lo encontrábamos, por lo que entonces se me ocurrió que si existiera una app para encontrar productos en el supermercado, sería mucho más fácil y se ahorraría muchísimo tiempo y dinero, así que junto con mi padre estuve dos años recorriendo España en busca de financiación», recuerda Marco. En este caso no lograron aportes económicos para desarrollar esta idea. «Había que estar un poco loco para hacerlo», reconoce divertido este joven emprendedor.
«Hace un año empecé a montar una empresa de impresión 3D, en la que imprimimos todo tipo de llaveros representativos de Asturias y Oviedo, letreros LED, trofeos..., para que se puedan vender en tiendas», apunta. Reconoce que, de momento, está «muy contento» con ThreeDimensional, ya que empezó «solo con una impresora» y ahora ya tiene dos. «Vamos avanzando», apunta. «Tengo también muchísimo material, se me empieza a conocer un poco entre la gente y me llegan clientes sin que yo tenga que ir a buscarlos», indica orgulloso. Asimismo, ThreeDimensional «también está facturando, que es algo que, hombre, pues siempre mola».
Pese a todo, este joven ovetense (nieto, por cierto, de Pepe «el Ferreiro») tiene la idea de «cambiar un poco el modelo» de su último proyecto. No duda en afirmar que lo más complejo de emprender es «compaginarlo con los estudios y con tener 13 años, porque, al fin y al cabo, creo que dejar de salir con mis amigos, ir al cine, jugar al baloncesto y cosas de esas sería un gran error».
Otra dificultad, en su caso, «la soledad y verte incomprendido», porque esto del emprendimiento «no mucha gente lo conoce ni se mete de verdad en ello, entonces cuando tú quieres hablar con alguien de emprendimiento, si no es en un evento se complica muchísimo y a no ser que vengas de una familia de emprendedores, que casi nunca suele ser el caso, pues es difícil que te entiendan y que la gente vea lo que haces».
Carlos Bermúdez es el padre de Marco. Explica que, en su fervor emprendedor, siempre se lo puso a sus padres «bastante fácil, dentro de lo intenso que es». Y es que, en este sentido, «cuando llegas a casa siempre es: '¡Meca, mira lo que vi!, ¡meca, necesito esto!, ¿meca dónde tenemos esto?'».
Admite que su hijo «las cosas las tiene súper claras». Además, Marcos no está renunciando a ninguna de las cosas de las que debe disfrutar un niño de su edad. «Él sale con sus amigos, juega al baloncesto y cumple muy bien en el cole, que le va de maravilla. Tiene esta cosa aquí, innata, y nos lo pone fácil», comenta Carlos Bermúdez. El padre de Marco agradece, además, que en Genyus School, les «ayudaron muchísimo a canalizar bien todo esto».