María Jesús Álvarez, directora general de Igualdad: «Negar la violencia machista es una forma de apoyarla y convierte a quienes la niegan en cómplices de los agresores»
ASTURIAS
![María Jesús Álvarez, directora general de Igualdad del Principado de Asturias](https://img.lavdg.com/sc/J6EhdSeTEfgSvOiTAWGm-e-4oFQ=/480x/2024/11/22/00121732294924419714100/Foto/xccfdfssfsdsd.jpg)
El mensaje que la representante del Gobierno regional traslada en este 25-N a las mujeres víctimas de sus parejas o ex parejas es que «no están solas» y apoyándose en el sistema y en las instituciones pueden «volver a tener una vida libre de violencia»
25 nov 2024 . Actualizado a las 09:54 h.La lucha contra la violencia machista es una lucha que el Principado mantiene activa todos y cada uno de los días del año, si bien hoy, 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, es un día para alzar la voz más si cabe contra los agresores y contra quienes niegan la violencia de género y para que las mujeres que la padecen sepan que «no están solas». Así lo traslada María Jesús Álvarez, directora general de Igualdad, quien en la entrevista concedida a La Voz de Asturias reitera a las víctimas que apoyándose en el sistema y en las instituciones pueden «volver a tener una vida libre de violencia» porque «de la violencia se sale». Otros dos mensajes que deja la representante del Gobierno regional es que «para ser capaces de construir una sociedad de mujeres y hombres libres e iguales, hay que trabajar desde la infancia»; y también que entre los desafíos que enfrenta el Principado para la erradicación de la violencia contra la mujer está reforzar la red de recursos «para seguir dando respuesta a las mujeres que sufren violencia y a sus hijos e hijas».
—¿Cuál es el mensaje principal que desea transmitir hoy 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer?
—Un mensaje de confianza en el sistema y en las instituciones porque de la violencia se sale y las mujeres que la sufren tienen que saber que no están solas. Y también de compromiso para continuar trabajando en la erradicación de la violencia, para no rendirnos nunca frente a esta grave vulneración de los derechos humanos que sufrimos las mujeres por el hecho de ser mujeres y que es incompatible con los valores y principios democráticos.
—¿Debe haber un mensaje expreso para quienes niegan la violencia machista?
—Me temo que quienes niegan la violencia no tienen una actitud de escucha y prefieren difundir los bulos que abonan su discurso. Pero lo cierto es que deberían saber que negar la violencia es una forma de apoyarla, lo que les convierte en cómplices de los agresores.
—¿Cómo se está trabajando y qué más se debe hacer en el ámbito de la educación y la sensibilización de la sociedad para prevenir la violencia contra las mujeres?
—La educación en igualdad y la sensibilización social son la clave de bóveda en materia de prevención. Para ser capaces de construir una sociedad de mujeres y hombres libres e iguales hay que trabajar desde la infancia, educando en igualdad, en el respeto, en los valores democráticos, y superar los prejuicios y estereotipos que aún perviven. Todo ello sin dejar trabajar cada día para que, frente a la violencia, la tolerancia social sea cero.
—Las redes sociales, que pueden ser un arma de doble filo, ¿están abriendo un nuevo canal para denunciar agresiones y violencia machista? ¿Qué opina al respecto?
—En las redes sociales hay violencia y, sobre todo, mucha violencia contra las mujeres. Pero son también, como estamos viendo, una herramienta que muchas mujeres están utilizando para compartir públicamente las agresiones que han sufrido y que estaban silenciadas. Creo que es necesario que toda esa violencia salga a la luz. Que se conozca. En todo caso, quienes en Asturias hayan sufrido una agresión pueden acudir al Centro de Crisis para víctimas de agresiones sexuales. Es un recurso gratuito de apoyo jurídico y psicológico que funciona los 365 días el año, las 24 horas del día.
—¿Qué papel juegan las instituciones y organizaciones locales en la lucha contra la violencia de género en Asturias?
—Esta es una tarea que nos compete a todas las administraciones públicas. Es muy importante que sumemos recursos, que trabajemos en red, que nos coordinemos bien. En Asturias, la Red de Casas de Acogida para víctimas de violencia de género es un proyecto de colaboración de algunos ayuntamientos y la Consejería de Presidencia. También colaboramos con ellos para el mantenimiento de los 18 Centros Asesores de la Mujer que atienden a las asturianas en materia de asesoramiento legal y en violencia de género, en todo el territorio.
—¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta el Principado de Asturias en la erradicación de la violencia contra la mujer?
—Reforzar nuestra red de recursos para seguir dando respuesta a las mujeres que sufren violencia y a sus hijos e hijas. Hacer frente a las nuevas formas de violencia y a la violencia sexual. En este sentido, el nuevo Centro de Crisis tendrá un papel fundamental.
—¿Cómo considera que se está abordando el apoyo a las víctimas de violencia de género en términos de recursos y servicios disponibles?
—Siempre hacen falta más recursos, pero Asturias es ejemplo a nivel nacional: tenemos la Casa Malva, el primer equipamiento de estas características abierto en España tras la aprobación de la ley de 2004, la red de Casas de Acogida, el Centro de Crisis para víctimas de agresiones sexuales que se puso en funcionamiento hace cuatro años. Es muy importante renovar el Pacto de Estado. Y más importante aún que disponga de suficientes recursos económicos.
—¿Qué medidas se pueden tomar para involucrar, más si cabe, a los hombres en la lucha contra la violencia de género y promover la igualdad?
—Son muchos los hombres que están involucrados, aunque se percibe un cierto retroceso en los últimos años de la mano de los mensajes de las ideologías ultraconservadoras. La lucha por la igualdad y frente a la violencia de género no es una cuestión solo de las mujeres, ni de las mujeres contra los hombres. Es una batalla por la justicia. Por una sociedad mejor. Es de todos y todas.
—¿Qué mensaje le gustaría dar a las mujeres que están sufriendo violencia y que pueden estar dudando en buscar ayuda?
—El mensaje es de confianza en el sistema. Insisto: tienen que saber que, a pesar de lo duro de su situación, no están solas. Contamos con recursos y medios para protegerlas, para ayudarlas a salir de la violencia que sufren. Para que puedan recuperar la autoestima y, lo que es más importante, volver a tener una vida libre de violencia.