María Concepción Saavedra, plantea nuevas medidas para proteger a los profesionales frente a la creciente violencia en los centros de salud
21 nov 2024 . Actualizado a las 12:16 h.La Consejería de Salud, María Concepción Saavedra Rielo, está estudiando nuevas medidas para hacer frente a las agresiones a los sanitarios, entre las que se encuentran la implantación de un «botón del pánico» o la introducción de cambios en las tarjetas identificativas de los profesionales. Así lo ha avanzado este jueves la consejera en la Junta General en respuesta a una pregunta de la diputada de Vox, Sara Álvarez Rouco, sobre las acciones puestas en marcha para evitar las agresiones al personal sanitario.
Saavedra, quien ha remarcado que «nunca puede haber una justificación para una agresión», ha admitido que este problema es «una lacra» y por ello está en la agenda política del Gobierno desde hace años, y ya en 2007 se puso en marcha un plan de prevención y actuación frente a potenciales situaciones conflictivas en los centros sanitarios. Dicho plan se complementó en 2018 con una estrategia para la mejora de la confianza y seguridad de las personas que trabajan en el Sespa con el que se ofrece a los profesionales atención tanto física como psíquica y asistencia letrada.
La consejera ha explicado que en los últimos meses se han mantenido distintas reuniones con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado a través de la figura del interlocutor policial sanitario de la Policía Nacional y se han celebrado distintos talleres y jornadas formativas destinadas a los profesionales sanitarios para enseñarles técnicas de prevención y todas las herramientas disponibles ante casos de agresión.
Saavedra ha subrayado que se trata de un problema que afecta a todo el país y por ello también es objeto de atención y trabajo por parte del Ministerio de Sanidad junto con el conjunto del las comunidades autónomas. «Es algo que nos preocupa y nos ocupa y seguiremos actuando en ese sentido», ha asegurado la consejera. La diputada de Vox ha advertido de que los profesionales están «sometidos a una gran presión a cuenta de las carencias que presenta el sistema sanitario» y «la precariedad del servicio sanitario» les ha convertido en «blanco de la agresividad de los usuarios». Rouco ha subrayado que las agresiones a los sanitarios representan «un problema que necesita acciones efectivas e inmediatas» porque «las amenazas y las agresiones verbales y físicas se han convertido desgraciadamente en algo normal».
Hospital Quirón de Gijón
En la misma sesión, la diputada del Grupo Mixto Covadonga Tomé ha preguntado a Saavedra si desde la consejería se han mantenido contactos con los responsables del grupo Quirón para explorar un acuerdo con el fin de realizar derivaciones o algún concierto económico con el nuevo hospital privado que se va a instalar en Gijón, a lo que la consejera ha respondido «con rotundidad» con una negativa. Tomé, quien ha agradecido la respuesta de Saavedra porque «era justamente lo que esperaba oír eso y ninguna otra cosa», ha pedido garantías de que «ni un solo euro de la sanidad pública» va a acabar en manos de ese grupo empresarial, como ya ocurre en otras comunidades autónomas como Madrid.
La consejera ha remarcado que «el único planteamiento» del Gobierno del Principado y del PSOE es «defender y proteger el sistema sanitario público asturiano» porque «la sanidad privada tiene solamente un papel complementario subsidiario». Según ha expuesto, el único interés del Principado con ese proyecto empresarial es «indirecto» y relacionado con una permuta de parcelas para favorecer el proyecto de ampliación del Hospital Universitario de Cabueñes, informa Efe.