Un millón de imágenes y una palabra: Magnum

G. Guiter

ASTURIAS

España vista desde fuera de sus fronteras en los momentos en los que se ha situado en el punto de mira internacional a lo largo de más de ocho décadas es lo que reflejan las 112 instantáneas seleccionadas por Magnum Photos, Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2024
España vista desde fuera de sus fronteras en los momentos en los que se ha situado en el punto de mira internacional a lo largo de más de ocho décadas es lo que reflejan las 112 instantáneas seleccionadas por Magnum Photos, Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2024 J.L.Cereijido | EFE

La agencia más famosa del mundo surgió como respuesta a la necesidad de una fotografía profesional independiente y comprometida en un mundo que ya anticipaba las fake news

24 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay una analogía curiosa entre la agencia de fotografía y su homónima marca de potentes revólveres. Ambas son instituciones legendarias, pero por motivos diametralmente opuestos. Ambos disparan, pero una quita vida y la otra…, bueno, la otra la describe, la cuenta, puede que incluso la salve. Al menos, salva a la humanidad. Y esto no es exagerar.

Magnum Photos al mismo tiempo famosa y misteriosa, según mis colegas del gremio de la fotografía periodística. De lo que no hay duda es de que constituye una de las agencias de fotografía más influyentes y respetadas en la historia de la imagen.

Fundada en 1947 por algunos de los fotógrafos más icónicos del siglo XX, Magnum no solo redefinió los estándares de la fotografía documental, sino que también contribuyó de manera crucial a la evolución del llamado fotoperiodismo, fusionando arte y documentación de una manera que hasta entonces no se había visto.

La creación de Magnum Photos surgió en un contexto histórico particularmente turbulento. Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, Europa estaba en ruinas y dos gigantes antagónicos surgieron en la nueva era, a ambos lados del telón de acero. En medio de esta agitación, un grupo de fotógrafos visionarios decidió unirse para crear algo único: una cooperativa donde los fotógrafos no solo serían los creadores de las imágenes, sino que también mantendrían los derechos sobre su trabajo, algo inusual para la época. Había que luchar contra la falsedad, las fake news que habían inundado los periódicos durante la guerra y la posguerra.

Los cuatro fundadores originales de Magnum fueron Robert Capa, Henri Cartier-Bresson, George Rodger y David Chim Seymour, todos ellos reconocidos por su capacidad para capturar la esencia humana en momentos de gran agitación.

Cuando se piensa en el Día D, por ejemplo, inevitablemente vienen a la mente esas fotos borrosas, llenas de peligro, miedo y dolor, de Capa

Capa, conocido por sus impactantes fotografías de guerra, había estado en los frentes de la Guerra Civil Española y la Segunda Guerra Mundial. Cuando se piensa en el Día D, por ejemplo, inevitablemente vienen a la mente esas fotos borrosas, llenas de peligro, miedo y dolor, de Capa.

Cartier-Bresson, por su parte, era maestro del momento decisivo, capturando imágenes que contaban una historia completa en una sola toma. Seymour y Rodger eran igualmente sobresalientes en su habilidad para narrar a través de la lente.

El concepto central de Magnum era simple pero revolucionario: los fotógrafos debían tener independencia editorial y control sobre el uso de sus imágenes. En una época en la que los medios solían tener el control absoluto sobre el trabajo de los fotoperiodistas —y en las guerras, ya se sabe, la primera víctima es la verdad—, Magnum marcó un giro en la dinámica entre el creador y el distribuidor. Esta independencia no solo permitió que los fotógrafos de la agencia se concentraran en sus visiones artísticas, sino que también les permitió abordar temas que a menudo eran evitados por la prensa tradicional.

España vista desde fuera de sus fronteras en los momentos en los que se ha situado en el punto de mira internacional a lo largo de más de ocho décadas es lo que reflejan las 112 instantáneas seleccionadas por Magnum Photos, Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2024
España vista desde fuera de sus fronteras en los momentos en los que se ha situado en el punto de mira internacional a lo largo de más de ocho décadas es lo que reflejan las 112 instantáneas seleccionadas por Magnum Photos, Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2024 J.L.Cereijido | EFE

El nombre fue elegido por Capa, y se dice que se inspiró en su pasión por el vino, en particular por las botellas magnum, esos botellones enormes que sólo se descorchan en celebraciones y momentos especiales. También evocaba una sensación de grandeza, una visión apropiada para una agencia que aspiraba a cambiar el panorama de la fotografía. Desconocemos si también estaba en su mente el tenebroso revólver; consciente o inconscientemente.

Desde sus inicios, fue más que una agencia fotográfica: era una declaración de principios y un refugio para quienes buscaban documentar el mundo de una manera personal y significativa.

Uno de los aspectos más destacados de Magnum Photos es su capacidad para equilibrar la fotografía como arte y como testimonio histórico. Sus miembros no sólo se dedicaban a cubrir eventos de importancia mundial, como conflictos bélicos, crisis políticas o desastres naturales, sino que también buscaban capturar la esencia de lo cotidiano, la condición humana en su forma más pura.

La idea del «momento decisivo», tan emblemática en la obra de Henri Cartier-Bresson, es un ejemplo perfecto de este enfoque dual. El momento decisivo es esa fracción de segundo en la que todos los elementos de una escena se alinean de manera perfecta para crear una imagen que trasciende lo ordinario. Cartier-Bresson lo describía como el «instante en el que una imagen cobra vida».

La agencia también fue pionera en la fotografía de ensayo visual, donde una serie de imágenes narraba una historia más allá de lo que una sola fotografía podía lograr. Este estilo narrativo se convirtió en una herramienta poderosa para explorar y documentar temas complejos como la pobreza, la guerra, el racismo, la migración y la vida cotidiana en diversos contextos culturales. Magnum ha jugado un papel esencial en definir este tipo de fotoperiodismo, contribuyendo a la creación de un lenguaje que fusiona lo documental con lo artístico.

El momento decisivo es esa fracción de segundo en la que todos los elementos de una escena se alinean de manera perfecta para crear una imagen que trasciende lo ordinario

Nunca demasiado cerca

De hecho, desde sus comienzos, Magnum ha estado profundamente involucrado en la cobertura de conflictos bélicos. La guerra y sus devastadoras consecuencias se convirtieron en temas recurrentes para muchos de sus fotógrafos. Robert Capa, con su famosa máxima de que «si tus fotos no son lo suficientemente buenas, es porque no estás lo suficientemente cerca», marcó el enfoque que caracterizó a Magnum en los escenarios bélicos.

Capa, probablemente el fotógrafo de guerra más famoso de la historia, cubrió la Guerra Civil Española, la Segunda Guerra Mundial, la Guerra de Indochina y muchas otras. Su imagen más icónica, la de un soldado republicano siendo abatido durante la Guerra Civil Española, capturó el horror de la guerra en una sola imagen. Capa murió en 1954 al pisar una mina mientras cubría el conflicto de Indochina y dejó un legado imborrable en el mundo del fotoperiodismo.

Una imagen muy poco corriente de una mujer en la resistencia francesa de la segunda guerra mundial: Simone Ségouin, que retrató el célebre Robert Capa
Una imagen muy poco corriente de una mujer en la resistencia francesa de la segunda guerra mundial: Simone Ségouin, que retrató el célebre Robert Capa

Otro miembro destacado de Magnum en la cobertura de guerras fue James Nachtwey, considerado uno de los grandes fotógrafos de guerra contemporáneos. Nachtwey, cuya obra abarca conflictos en África, Oriente Medio y los Balcanes, sigue la tradición de Capa al documentar la guerra no sólo como un enfrentamiento armado, sino como una tragedia humana. Sus imágenes de los conflictos en Ruanda, Sarajevo y Sudán muestran no solo la violencia del enfrentamiento, sino también las profundas cicatrices que deja en las poblaciones civiles.

La vida en un «click»

Sin embargo, Magnum no se limitó a la fotografía de conflicto. Los fotógrafos de la agencia también documentaron los periodos de reconstrucción y las historias de supervivencia. Estas imágenes post-conflicto proporcionaron una visión más completa de las secuelas de la guerra, mostrando tanto el sufrimiento como la resiliencia humana.

Magnum siempre ha sido una agencia capaz de capturar tanto los grandes eventos como los momentos más íntimos de la vida cotidiana. La obra de fotógrafos como Elliott Erwitt o Martin Parr refleja una sensibilidad particular por los aspectos más banales de la vida, pero presentados con un toque de ironía o aguda observación social.

Elliott Erwitt, uno de los miembros más longevos de la agencia, es famoso por su sentido del humor y su habilidad para encontrar momentos cómicos en lo mundano. Sus fotos de perros, por ejemplo, revelan la capacidad de la fotografía para hacer visible lo invisible, para mostrar la poesía oculta en lo cotidiano. Utiliza la fotografía como una forma de comentario social, a menudo utilizando imágenes que parecen ligeras o humorísticas, pero que contienen una crítica sutil de las costumbres y actitudes humanas.

El azar intervino en la famosa fotografía de la Guerra Civil.
El azar intervino en la famosa fotografía de la Guerra Civil. robert capa< / span>

Por otro lado, Martin Parr ha llevado esta idea aún más lejos, enfocándose en las particularidades de la cultura popular contemporánea. Sus imágenes, a menudo saturadas de color, presentan un retrato crudo pero incisivo del consumo masivo, el turismo y la cultura de masas. Aunque Parr ha sido criticado por algunos por su enfoque, que algunos consideran cínico, su obra sigue siendo una de las más influyentes de la fotografía moderna, y ha desafiado las nociones tradicionales del documentalismo.

La estructura organizativa de Magnum ha sido clave para mantener su independencia y su enfoque artístico. En lugar de trabajar como empleados para una empresa, los fotógrafos de Magnum tienen una participación directa en las decisiones de la agencia, lo que les otorga una autonomía única en comparación con otros fotógrafos de prensa.

Entrar ese selecto club no es algo que se otorgue fácilmente. Convertirse en miembro de pleno derecho es un proceso largo y exigente que puede llevar varios años. Los fotógrafos deben pasar por varias etapas, desde ser candidatos, hasta asociados, y finalmente miembros plenos, si es que son aceptados por sus colegas. Esto ha creado un sentido de comunidad y compromiso entre los fotógrafos de la agencia, ya que cada uno de ellos ha pasado por un riguroso proceso de evaluación antes de ser admitido.

Magnum también se destaca por su diversidad. A lo largo de los años, la agencia ha atraído a fotógrafos de todo el mundo, con una variedad de estilos y enfoques. Esto le ha permitido adaptarse a los cambios en la fotografía y en la sociedad global, y mantenerse relevante a lo largo de las décadas.

En el siglo XXI, la fotografía ha experimentado una transformación radical debido a la revolución digital. La proliferación de cámaras digitales y smartphones ha democratizado la fotografía, y las plataformas de redes sociales han permitido que millones de imágenes sean compartidas instantáneamente en todo el mundo. En este nuevo contexto, la agencia ha enfrentado tanto retos como oportunidades.

Por un lado, la competencia ha aumentado considerablemente. En una época en la que prácticamente cualquier persona con un smartphone puede tomar y compartir fotografías, los fotógrafos de Magnum han tenido que esforzarse para mantener su relevancia en un entorno visual cada vez más saturado. Sin embargo, esta democratización también ha generado nuevas oportunidades, ya que los fotógrafos han encontrado en las plataformas digitales una manera de llegar a un público más amplio y de contar historias visuales de formas innovadoras.

Además, el auge de las plataformas digitales ha abierto nuevas fuentes de ingresos para la agencia, como la venta de impresiones, libros de fotografía y colaboraciones con marcas comerciales. Magnum ha sabido adaptarse a este nuevo panorama, manteniendo su enfoque artístico mientras explora nuevas formas de generar ingresos para sus fotógrafos.

Tras más de siete décadas de historia, Magnum Photos sigue siendo una de las agencias más influyentes del mundo de la fotografía. Su capacidad para combinar la independencia artística con la documentación de los momentos más cruciales de la historia moderna la han convertido en un faro de excelencia para fotógrafos de todo el mundo.

A medida que el mundo de la fotografía sigue cambiando, el desafío para Magnum será mantenerse fiel a su ética fundacional, mientras sigue siendo relevante en un entorno visual cada vez más competitivo. Sin embargo, con su rica historia, su compromiso con la excelencia y su capacidad para adaptarse, parece claro que Magnum continuará siendo una fuerza dominante en la fotografía global durante muchos años más.

Magnum Photos no solo cambió la fotografía documental, sino que también demostró que la imagen puede ser tanto arte como testimonio, una forma de ver el mundo que sigue resonando en la actualidad. Con o sin permiso de la inteligencia artificial.