Un funcionario de prisiones se enfrenta a pena de cárcel por torturar a un preso

J.C. REDACCIÓN

ASTURIAS

Cárcel de Asturias
Cárcel de Asturias

La Fiscalía sostiene que el acusado le golpeó en los testículos con la defensa de goma reglamentaria que llevaba

15 oct 2024 . Actualizado a las 14:04 h.

La Fiscalía del Principado de Asturias solicita un año de prisión e inhabilitación absoluta durante ocho para un funcionario de prisiones acusado de torturas a un preso de la cárcel asturiana. La vista oral está señalada para este miércoles, 16 de octubre, en el Juzgado de lo Penal nº 3 de Oviedo, a las 11,00 horas.

El acusado (1972) es funcionario de Instituciones Penitenciarias y en el momento de los hechos desempeñaba su labor en el Centro Penitenciario de Asturias. El Ministerio Fiscal sostiene que, el 17 de noviembre de 2018, un preso que cumplía condena en el centro se presentó en la cabina de vigilancia de los funcionarios y trató de agredirlos con una cuchilla que llevaba en la boca. El interno tuvo que ser reducido y, en cumplimiento del régimen penitenciario, fue sancionado y recluido en una celda de aislamiento, donde se le encontró otra cuchilla oculta en su ropa interior.

Al día siguiente sobre las 09,10 horas, cuando el presoaún se hallaba en aislamiento cumpliendo la sanción disciplinaria, comenzó a mostrarse muy violento, gritando y golpeando la puerta de la celda en la que estaba. Al acudir los funcionarios de vigilancia, el acusado les amenazó de muerte reiteradamente y trató de agredirles, por lo que los trabajadores penitenciarios tuvieron que emplear la fuerza necesaria para su contención.

El interno fue incrementando su actitud violenta a lo largo de la mañana, lo que provocó que, a las 13,05 horas, fuera necesario aplicarle sujeción mecánica para evitar nuevos ataques. Cuando el interno ya estaba reducido y sujeto por el resto de funcionarios presentes y con las sujeciones mecánicas en los brazos, tobillos, cintura y piernas, el acusado, que no había intervenido en las maniobras de sujeción, golpeó a al preso —sin necesidad ni justificación, según la Fiscalía—, en los testículos con la defensa de goma reglamentaria que llevaba. El recluso no sufrió lesiones ni precisó asistencia médica. 

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de torturas de los artículos 174.1 y 2 y 41 del Código Penal; y de un delito de maltrato de obra sin causar lesión del 147.3. 

Y solicita que se condene al acusado, por el delito de torturas, a 1 año de prisión con inhabilitación absoluta durante 8 años en toda la extensión señalada en el artículo 41 del Código Penal. Por el delito leve de lesiones, pena de multa de 1 mes, con una cuota diaria de 6 euros, con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago. Además, solicita que, en concepto de responsabilidad civil, el acusado indemnice a al preso con 100 euros por daños morales, con los intereses legales correspondientes.