Lesionados medulares colaboran con Tráfico para concienciar sobre las distracciones al volante
ASTURIAS
Voluntarios cuentan sus historias para relatar lo que puede suponer un despiste en la carretera
07 oct 2024 . Actualizado a las 14:54 h.La Jefatura Superior de Tráfico de Asturias ha puesto en marcha una nueva campaña de vigilancia para evitar distracciones, como mirar mensajes en el teléfono móvil, en la que participan voluntarios con lesión medular que relatarán las secuelas irreversibles que puede suponer un despiste al volante.
La conducción distraída o desatenta estuvo presente en el 30% de todos los accidentes con víctimas mortales registrados en el año 2023, un porcentaje que ha aumento en dos puntos respecto a 2019, por lo que este tipo de campañas siguen siendo imprescindibles, informa Tráfico en un comunicado.
Por eso, desde este lunes, 7 de octubre, y hasta el 13 de octubre los agentes de la Agrupación de Tráfico vigilarán las vías interurbanas mientras la policías municipales supervisarán el ámbito urbano con el apoyo de las 253 cámaras instaldas en las carreteras, a través de las cuales se puede constatar, entre otras cosas, si el conductor hace uso del móvil, una actitud que conlleva la retirada de seis puntos del carné de conducir.
La Federación Nacional ASPAYM colabora un año más con la DGT en esta campaña implicando a voluntarios con lesión medular que acompañarán a los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en sus controles en carretera en diferentes puntos de Asturias, con el objetivo de concienciar con su presencia de las consecuencias y secuelas irreversibles que puede tener una pequeña distracción al volante.
El móvil, principal distracción
La campaña especial de vigilancia realizada hace ahora un año en las carreteras asturianas con el objetivo de concienciar a los conductores del peligro que suponen las distracciones al volante constató que conducir sujetando con la mano el teléfono móvil sigue siendo la más frecuente y acapara el 40,5% de las denuncias formuladas.
En dicha campaña se controlaron 7.200 vehículos y se interpusieron 121 denuncias —el porcentaje más bajo (1,67%) de las campañas realizadas desde 2019— de las que 49 se debieron al uso del teléfono móvil mientras que se sancionó a 30 conductores con tasas de alcohol superiores a la permitida y a 17 que dieron positivo en otras drogas. Tras la conducción distraída por el teléfono móvil, las infracciones más frecuentes siguen siendo abrocharse el cinturón mientras se conduce, generalmente cuando han sido vistos por los agentes o el uso de cascos o auriculares conectados a aparatos reproductores de sonido, una conducta que está prohibida porque también supone una distracción en la conducción.
La campaña, a la que se sumaron numerosos ayuntamientos que, por medio de sus policías locales, establecieron también controles en las vías de sus municipios, informa Efe.