Hunosa pide apoyo para mantener su vocación industrial y que «no se le pongan trabas»

El presidente del grupo Hunosa, Enrique Fernández, ha reclamado la colaboración de las diferentes administraciones —local, regional y estatal— para mantener su vocación industrial, al tiempo que ha solicitado que «no se le pongan trabas», ni se vea su actividad como «una amenaza», lo cual «daña gratuitamente» su imagen.

Fernández ha hecho estas declaraciones en el marco del día de Hunosa en la Feria Internacional de Muestras de Asturias. Precisamente, el presidente de Hunosa afirmaba, durante la firma de un acuerdo con el Sabadell Herrero, que la empresa mantenía un diálogo fluido con los vecinos para minimizar el impacto de proyectos como el del depósito de residuos en La Escombrera del Reguerón, una planta a la que no se puede «renunciar» y que «tiene todos los permisos».

Hunosa prevé poner en marcha la planta de biomasa de La Pereda en 2026

La Voz

Hoy, en el marco del día de Hunosa, Fernández ha afirmado que el grupo mantiene su «vocación industrial» desde el respeto al medioambiente «y la salud de las personas», así como su objetivo de reactivación de las comarcas mineras. Fernández ha insistido en que, por «imperativo del guión socioeconómico», Hunosa ha pasado de ser una firma carbonizadora a «una empresa plenamente comprometida con la descarbonización».

En este sentido, el presidente del grupo ha recordado proyectos como la transformación de la central térmica de La Pereda a la biomasa forestal autóctona, cuyas obras comenzarán en 2025. También se ha referido a que el Pozo Fondón albergará la primera planta de hidrógeno de la compañía, que se desarrollará en el marco del proyecto Mine-to-H2, con una inversión de 18 millones de euros, de los cuales «el 50% serán financiados por la Unión Europea». El proyecto se completa con una planta fotovoltaica en una antigua mina a cielo abierto en el Cantil, informa Efe.

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