Pillan a un joven con cámara y pinganillo en un examen del carné de conducir en Oviedo

La Voz OVIEDO

ASTURIAS

Imagen de archivo de un guardia civil del GIAT vigilando un examen del carné de conducir.
Imagen de archivo de un guardia civil del GIAT vigilando un examen del carné de conducir. GUARDIA CIVIL

Se trata de una infracción muy grave que conlleva sanciones de 500 euros y la prohibición de poder examinarse hasta que no transcurran seis meses

10 jul 2024 . Actualizado a las 14:35 h.

Un joven marroquí y vecino de Bilbao con problemas para la comprensión y lectura del español ha sido sorprendido con un dispositivo de intercomunicación mientras realizaba un examen para la obtención del permiso de conducir de clase B en la Jefatura Provincial de Tráfico de Oviedo, informa la Guardia Civil.

La actitud del joven despertó las sospechas de los examinadores que, una vez finalizada la prueba, procedieron a un cacheo en el que descubrieron entre sus ropas un sistema de comunicación integrado por un teléfono móvil que incluye tarjeta SIM activada, pinganillo, cable interlocutor y un repetidor, cuya finalidad era conectar todos los dispositivos. Un colaborador experto en este tipo de prueba de normativa de tráfico y seguridad vial, situado en el exterior, visionaba a través de la cámara del móvil y en tiempo real el test de preguntas y comunicaba por voz las respuestas correctas, que el aspirante al carné escuchaba a través del pinganillo.

Agentes de la Guardia Civil procedieron a la intervención de los medios ilícitos empleados y formularon denuncia por utilizar dispositivos de intercomunicación no autorizados reglamentariamente en las pruebas para la obtención y recuperación de permisos y otras autorizaciones administrativas para conducir, o colaborar o asistir con la utilización de dichos dispositivos. Se trata de una infracción «muy grave», recogida en el artículo 77 de la Ley de Seguridad Vial que conlleva sanciones de 500 euros y la prohibición de volverse a examinar hasta transcurridos seis meses.

Según la Guardia Civil, la necesidad de obtener el carné por parte de extranjeros que no conocen bien el idioma ha propiciado una delincuencia organizada que llegan a cobrar entre mil y tres mil euros por seleccionar la Jefatura Provincial de Tráfico y el día a realizar el examen, así como por la cesión del equipo de intercomunicación y las respuestas correctas en la prueba teórica, informa Efe.