Los planes de Asturias para convertir sus antiguas minas en centros de datos

L.O.

ASTURIAS

F. Sotomonte

El aprovechamiento de las galerías en desuso se basa en el espacio, el suministro eléctrico y agua suficiente para la refrigeración

15 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

En la economía contemporánea no pocas cosas girar alrededor de la capacidad para almacenar y gestionar datos; los Data Center, los centros de datos, se han convertido un caramelo de inversión goloso para muchos territorios que desean atraer este tipo de proyectos: por ejemplo Meta que planea abrir uno gigantesco (de 180 hectáreas) en Talavera de la Reina, en Toledo. Algo que ha despertado preocupación por el enorme uso de agua para refrigeración que requieren estas instalaciones.

Y es así, los centros de datos tiene tres grandes problemas: el suministro de energía, el espacio y la refrigeración. Asturias quiere resolver los tres a la vez con una propuesta revolucionaria, hacerlo bajo tierra usando las antiguas minas. «Con la irrupción de la Inteligencia Artificial vimos que esto ya tomaba un cariz todavía más importante pero sí es algo que valoramos hace tiempo y nos dimos cuenta de que Asturias puede ofrecer soluciones a los principales problemas de estas instalaciones», explicó el director de Innovación, Investigación y Transformación Digital del Principado, Iván Aitor Lucas. Porque lo que quiere hacer la comunidad asturiana es usar las antigua minas y lo va a hacer con la puesta en marcha de su propio Data Center (en la actualidad tiene dos, uno en propiedad y otro alquilado de respaldo) y lo va a hacer en el pozo Santiago, en Aller.

Con un doble propósito, ampliar la capacidad de almacenamiento de datos de la propia administración asturiana pero también para que sirva de ejemplo y carta de presentación a iniciativas privadas que quisieran aprovechar del mismo modo las viejas explotaciones mineras. En Asturias hay muchas y las galerías se extienden por miles de metros cuadrados bajo tierra. No se trata de un asunto menor. «Hay que pensar que donde se pone un centro de datos no se ponen empresas, si usas los polígonos industriales, es lo que está haciendo Madrid, para acoger grandes centros de datos, ese es un espacio que no pueden usar empresas en el polígono», recalcó Iván Aitor Lucas.

Otra cuestión clave es el suministro eléctrico y la escala de Data Center. Porque Asturias no aspira a acoger un mega centro como el de Talavera de la Reina, sino iniciativas de tamaño medio conectadas, eso sí, y que puedan participar en proyectos más amplios en conjunto, incluso con otras comunidades. En este sentido, el director de Innovación señaló que « tenemos emplazamientos que tienen acometidas de luz y cuando hablo de acometida, hablo de media y alta tensión en funcionamiento o en suspensión; es decir que están ahora mismo pausadas. Estamos hablando de centros que son de de 100 megavatios, de 150 megavatios, de 60 megavatios, es decir, potencias considerables. Hay inversiones que se están centrando en grandes núcleos de Madrid o Barcelona, y allí ya se están dando problemas con la luz, con la electricidad, porque ni tiene acometida».

Pero es que además la propia refrigeración que requieren estas instalaciones --porque los ordenadores generan una inmensa cantidad de calor que puede afectar a su funcionamiento-- precisan también consumir energía, más electricidad y también agua. La propuesta asturiana cuenta con tener la solución a los dos problemas en las balsas subterráneas que ahora mismo ocupan el fondo de muchas antiguas minas que está inundadas en sus zonas más profundas.

«Actualmente tenemos unos 80 hectómetros de agua embalsada en las minas [un hectómetro equivale a mil millones de litros]; no es agua potable pero sí es agua limpia, es decir que es apta para usos industriales, tiene en suspensión muy pocas sales, que se pueden decantar y no habría problema», apuntó Iván Aitor Lucas que añadió que además está la forma en la que usar ese agua para refrigeración con un ahorro energético «imagina que tomamos ese agua de la caña del pozo a 15 metros, absorbo ese agua y lo paso por un sistema de refrigeración, ese agua sube de temperatura al condensar la que tiene el interior de la máquina, que se enfría. Luego cogemos ese mismo agua y la volvemos a inyectar al pozo, pero no a 10 ó 15 metros, sino a 50 ó 100. Entre millones de litros de agua fría. No tengo que gastarme nada en refrigeración».

¿En qué estado se encuentra esta iniciativa? El director de Innovación apuntó que la administración autonómica está a punto de sacar diferentes fases de licitación y en el trabajo de un informe, un anteproyecto para la ingeniería. «Esto es viable económica y técnicamente y lo que hemos hecho desde que se presentó es enseñarlo y tenemos grupos de inversores mirándolo, estudiándolo, interesándose, es decir, se ha generado el movimiento que queríamos». A esto añadió que «hay mercados que ya se están saturando y Asturias tiene una posibilidad muy importante porque estamos conectados con los cables que llevan los grandes centros. Estamos conectados con Bilbao y estamos conectados con Madrid de forma directa y por lo tanto somos un centro atractivo».

Estas iniciativas generan empleo pero no de forma masiva, es decir, puede precisar de un amplio número de trabajadores para la construcción pero una vez puestos en marcha la plantilla para su funcionamiento no es muy amplia. Eso sí, además del elemento de 'marca Asturias' de pasar de la minería de carbón a la minería de datos, la instalación de este tipo de Data Center pretende ser un atractivo, al menos así pretende promocionarlo el Principado, para empresas y trabajadores altamente cualificados del sector de la tecnología y la IA.