
El parque AguaXosa, que estará abierto a partir de mediados de junio, dispone de 4 circuitos a diferentes alturas con puentes colgantes, tirolinas o redes aptos para niños a partir de 5 años y adultos
03 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Quien más y quien menos tiene en mente la imagen del mítico Tarzán pasando de un árbol a otro ayudándose de lianas. El personaje de ficción recorría así largas distancias sin tocar el suelo, algo que en otros tiempos podía parecer increible. Pues bien, una aventura similar se podrá experimentar a partir de mediados de junio en la novedosa propuesta de ocio que ofrecerá el occidente de Asturias, el parque AguaXosa, un parque pensado para vivir una experiencia inolvidable entre los árboles en tanto que ofrece cuatro circuitos a diferentes alturas cuyos recorridos suman más de un kilómetro. Es decir, más de 1.000 metros pasando de árbol en árbol a través de puentes tibetanos, redes o tirolinas, siempre sin tocar tierra firme.
Como se decía anteriormente, el parque de aventura AguaXosa es un parque novedoso para la zona más occidental de la región, ya que se ubica en Tapia de Casariego. La idea de crear esta propuesta de ocio en ese territorio parte de tres amigos que gracias a este proyecto se han convertido en socios: Eugenio Acevedo, David García y Jaime Pola. En concreto, precisa este último, «la idea surge de Eugenio que conoce este tipo de parques por sus viajes a Polonia, donde ha visitado varios al ser una alternativa de ocio que puede hacer el familia». Así, hace algo más de dos años estos tres amigos se embarcan en un proyecto para el que partían con la ventaja de que el padre de David, uno de los socios, tenía un bosque de 50.000 metros cuadrados en el que podían ejecutar la idea. «Eso ya suponía una tranquilidad», comenta Jaime Pola, que no obvia que, de todas maneras, ha sido todo un reto sacar adelante el proyecto cuando cada uno de los socios tiene su profesión y teniendo en cuenta que «Eugenio trabaja y vive en Madrid y David es remolcador en Tarragona, lo que hace que pase casi un mes fuera, aunque otro esté en Tapia», relata. No obstante, agrega que «conectamos muy bien y nos supimos repartir las tareas para que el proyecto saliera adelante».
Pese a las distancias, que han suplido durante estos más de dos años a base de «estar colgados del teléfono», estos tres socios ven el final del camino y estiman que será a mediados de este mes de junio cuando puedan echar a andar AguaXosa Aventura y dar a conocer este proyecto que ocupa unos 17.000 metros cuadrados de los 50.000 que tiene el bosque. Jaime Pola explica que en el parque se han diseñado cuatro circuitos, cada uno con un nivel de dificultad y a diferentes alturas, que van de menos a más. En total, reitera que se recorren más de 1.000 metros en altura sorteando obstáculos y pasando de árbol en árbol a través de elementos como puentes colgantes o tirolinas, disponiendo de una de 120 metros.

Pero, aunque pueda parecer que los circuitos suponen una gran dificultad, Jaime pone de relieve que la aventura que proponen está pensada para que la puedan disfrutar familias con niños a partir de 5 o 6 años, en función de la altura de estos, ya que se requerirá que midan entre 1,10 y 1,20 metros. «Y edad máxima no hay», apostilla el mismo, que añade que también están pensando en alternativas para que las familias que acudan con niños más pequeños tengan una opción para ellos.
La estimación de los promotores es que quienes se animen a realizar esta actividad de ocio pasarán entre una hora y media y dos horas sin pisar el suelo, ya que es el tiempo que estiman que se tarda en realizar los cuatro circuitos, aunque matiza que también dependerá «de la habilidad del usuario».
Al parque AguaXosa se podrá acudir de forma individual, en grupos, en familia, se podrán celebrar cumpleaños, despedidas de soltero/a y también podrá acoger excursiones escolares por esa versatilidad de estar diseñado para niños de corta edad.
Personal especializado y medidas de seguridad
Jaime Pola explica que el diseño del parque lo realizó un profesional que se dedica a crear parques de aventura y que después fue una empresa especializada la que se encargó de su construcción. Así, en esto días están realizando las últimas pruebas y obteniendo las últimas certificaciones para que el parque cumpla con todas las normativas vigentes, como no podía ser de otra manera. Además, asegura que ya tienen implementadas todas las medidas de seguridad que llevará el usuario, a quien le dotarán del correspondiente arnés en función del tamaño de la persona, de casco y de una línea de vida continua para que siempre vaya enganchado y no se produzcan percances si el usuario se cayera de alguno de los elementos. No obstante, el parque AguaXosa también cuenta con el pertinente seguro de responsabilidad civil y el seguro específico para empresas de turismo activo.

El proyecto AguaXosa servirá también para crear cuatro puestos de trabajo en la zona occidental asturiana, ya que contará con tres monitores con titulación para trabajar en el turismo activo y una recepcionista. «Vamos a delegar la atención del parque en estas personas que son profesionales porque tienen estudios específicos y titulación», destaca Jaime Pola, que confía en que resulte una opción de ocio atractiva para la zona que se pueda combinar con otros recursos turísticos del entorno.
De hecho, señala que quienes acudan a disfrutar de esta aventura en los árboles tendrán como valor añadido el poder disfrutar de un día en plena naturaleza puesto que en AguaXosa, parque que se llama así porque ese era el nombre originario del bosque, tendrán disponibles unas mesas de picnic para poder comer o celebrar cumpleaños, por ejemplo. Es más, Jaime espera que pronto puedan ofrecer también un servicio de bar o de dispensación de bebidas no alcohólicas y snacks.
Un proyecto ampliable
Pero el proyecto de Jaime, David y Eugenio no se queda ahí. «Tenemos intención de devolver al monte lo que le quitamos», manifiesta Jaime Pola, que precisa que lo que pretenden es llevar a cabo con grupo de colegios la reforestación con árboles autóctonos para sustituir aquellos árboles que por diferentes motivos tuvieron que ser retirados en la ejecución del proyecto. «Y después podríamos hacer una ruta de árboles, en la que estén identificados con un letrero para que cuando acudan niños aprendan a diferenciar los árboles autóctonos», añade el promotor, que no descarta que si el parque de aventura funciona bien se pueda ampliar teniendo en cuenta que bosque aún tienen de sobra.
Por lo pronto, todos los esfuerzos de los tres socios están puestos en poner en marcha el parque a mediados de junio, aunque la fecha precisa aún la tienen por concretar. No obstante, asegura Jaime Pola que son muchas las consultas que reciben cada día interesándose por cuándo será la apertura, horarios y precios. A este respecto, el mismo comenta que la previsión es que la temporada del parque en años sucesivos sea desde Semana Santa hasta octubre y fuera de ese periodo, bajo reserva porque no estará abierto de continuo. El horario, en principio, será de 11 de la mañana a 8 o 9 de la tarde, aunque son detalles que están ultimando en estos días para que cuando los interesados realicen la reserva a través de la central de reservas que tienen en la web puedan coger el horario que mejor les convenga. En cuanto al precio, la entrada de adulto costará 20 euros y la de niño 16 euros. Para colegios o campamentos tendrán tarifas con descuento.