La granja de gallinas camperas de Taramundi de 9.500 huevos al día: «Viven como reinas»

José Francisco Alonso Quelle
JOSÉ ALONSO TARAMUNDI / LA VOZ

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La producción de Granja Taramundi abastece cada día desde un concello de 600 habitantes los supermercados de Alimerka en Asturias, Galicia, León, Valladolid, Burgos y Zamora

20 may 2024 . Actualizado a las 22:43 h.

El nombre de Taramundi se ha ganado el prestigio de ligarse a calidad. Por ello, si el sello figura en una caja de cartón con seis huevos camperos el resultado es hipnótico. Lo saben bien los clientes de Alimerka, la firma asturiana de supermercados que comercializa en toda Asturias, Galicia (con los súper en Foz y Ribadeo), León, Valladolid, Burgos y Zamora, los huevos camperos Granja Taramundi. En este concello asturiano que linda con Galicia, con sus 600 habitantes censados, se producen cada día del orden de 9.500 huevos que van directamente a las estanterías de Alimerka. Es un cálculo prudente, toda vez que la granja cuenta con entre 10.000 y 12.000 gallinas camperas que viven «a cuerpo de rey».

Granja Taramundi nació en 2013 como una empresa familiar integrada por cuatro socios, dos de Taramundi y otros dos de Santa Eulalia de Oscos: «Teníamos una granja de la que vendíamos pollos de corral para Alimerka, y también nos quedaba algo de ganadería de carne. Desde Alimerka nos animaron a ampliar el negocio con un granja de huevos camperos». Así cuenta Eva Rodríguez, una de los fundadores, el origen de Granja Taramundi, de cuya evolución se declara muy satisfecha: «Creamos una marca que no existía, que hoy tenemos patentada». Fundaron la primera granja de gallinas camperas de Asturias, con un nombre que se liga a una irrenunciable calidad, acreditada con exigentes controles y certificaciones, incluyendo la adscripción voluntaria al sello Alimentos del Paraíso Natural, del Principado de Asturias.

Poco a poco la explotación se fue ampliando. Ahora la forman cuatro pequeñas granjas, en tres núcleos distintos de Taramundi, alejados entre si unos cientos de metros. Las gallinas viven en libertad, asegurando la máxima calidad y frescura del producto, para conseguir el sabor de los huevos caseros, «los de toda la vida».

Se logra manteniendo a las gallinas en continuo contacto con la naturaleza, con la luz del sol y con una vida saludable, de bienestar animal que va mucho más allá de cumplir la premisa legal de que cada ejemplar cuente con espacio mínimo de cuatro metros cuadrados donde campar a sus anchas. Se alimentan con cereales, principalmente trigo y soja, además de la hierba que pican en los pastizales en medio de montañas. «Creo que son felices. Viven como reinas. Hay zonas de manzanos y tienen zonas de sombra que aprovechan en verano», comenta Eva Rodríguez.

«Todo el proceso es manual, cogemos uno a uno cada huevo, los pesamos y ponemos en cajas»

Para garantizar al consumidor unos huevos caseros, «como los de toda la vida», es fundamental el cuidado y control que se pone en cada uno de ellos. «Nosotros nos encargamos de todo. Disponemos de envasadora y no tenemos intermediarios, de la granja llega al cliente. Todo el proceso es manual. La recogida se hace a diario y envasamos cinco personas, huevo a huevo, pesándolos individualmente. Otras tres personas se encargan específicamente del cuidado de las gallinas, de que todo discurra correctamente y de que las condiciones de puesta y ambiente sean las idóneas. De momento, en todo el tiempo que llevamos no hemos tenido ningún problema, ni de enfermedades ni nada parecido», explica Eva Rodríguez.

Y añade: «Normalmente tenemos toda la producción vendida. El cliente principal es Alimerka, y aunque nosotros no tenemos despacho de venta al público, se venden nuestros huevos camperos en tiendas de Taramundi. También los consumen todos los restaurantes de aquí y la panadería Pantaramundi, para elaborar productos artesanos».

Las gallinas tienen ciclos de puesta de 14 y 15 meses. A Taramundi llegan con 16 semanas, procedentes de la Granja dos Rosales, en Salvaterra do Miño. Llegan para iniciar una nueva vida, ¿y dónde mejor que en plena naturaleza en Taramundi?