La otra batalla por la mina de oro de Tapia que se libra para influir en la opinión pública

José Francisco Alonso Quelle
J. Alonso TAPIA / LA VOZ

ASTURIAS

La mina de oro de Tapia, la mayor de Europa, divide a la comunidad: de forma paralela al trámite administrativo para tratar de lograr la licencia se maniobra para crear climas a favor y en contra

18 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde hace más de medio siglo se han promovido sucesivos proyectos para tratar de extraer el oro que se oculta en Salave, en Tapia, en Occidente astur, a unos quince kilómetros de Ribadeo. Allí se encuentra el mayor yacimiento de oro de Europa sin explotar (algunos estudios apuntan que hay 300.000 kilos del preciado metal). Una tras otra, todas las propuestas fueron desestimadas. En todo este tiempo, la batalla por ganar la opinión pública ha discurrido paralela a la tramitación administrativa. Los argumentos se repiten: los promotores juegan las bazas del empleo y los críticos del impacto en el paisaje, el medio ambiente y el modo de vida tradicional (la ganadería y más recientemente el turismo). En este contexto, Tapia vivió momentos de fuerte polarización social, por ejemplo hace una década, cuando AsturGold acarició la idea de explotar la mina. Fue, sin duda, quien más cerca estuvo y en Tapia hubo manifestaciones vecinales a favor y en contra. De aquellos días aún quedan pintadas que salpican el paisaje.

Ahora, Exploraciones Mineras del Cantábrico, filial de Black Dragon, a su vez heredera de AsturGold, afronta otro momento clave, el enésimo, en las tramitaciones. Para que su proyecto salga adelante precisa que el Ayuntamiento de Tapia modifique el plan general de ordenación municipal (PGOM), cambiando el suelo agrario-forestal a minero en la zona de Salave donde se proyecta la mina.

Las noticias a favor o en contra, con uno u otro sesgo, amplifican su impacto. Hay que tener en cuenta que hace poco más de un mes, EMC anunció que ha captado 726.000 euros en una ampliación de capital.

La opinión pública tiene a menudo un peso determinante y más cuando el futuro inmediato del proyecto de la mina depende del ambito local, la corporación municipal de Tapia. Es el otro tablero de juego. Así se entienden movimientos como los ocurridos recientemente, cuando con motivo de la máxima afluencia de gente a Tapia en Semana Santa apareció una valla publicitaria en la entrada al casco urbano desde Galicia con un cartel contra de la mina, en el que se puede leer «El agua vale más que el oro». Nadie se ha reivindicado públicamente como promotor de la iniciativa. La respuesta llegó poco después. Otra valla (también sin ninguna señal que indique quién está detrás de ella) situada en la entrada al casco urbano de Tapia desde Navia aparecía con un cartel a favor de la explotación: «Agua+oro=Futuro. Nosoutros sí somos de Tapia y nosoutros sí queremos vivir aquí».

De una parte, Exploraciones Mineras del Cantábrico ha intensificado sus comunicados informando de lo pasos que da, enfocados a que el Concejo de Tapia modifique el PGOM, reiterando su liturgia de argumentos legales. Del otro lado, el colectivo que ha venido aglutinando la oposición a la mina, Oro No, se muestra mucho más discreto, limitando al máximo sus pronunciamientos a la espera de la decisión que tome el Ayuntamiento. El pastel del oro que se oculta en Salave es suculento. El último dato que apuntaba EMC era que se podrían extraer 1,56 millones de onzas de oro, cuya valor actual sería de 3.870 millones de euros. La inversión en la mina se estima en 100 millones.