Duro Felguera se adjudica la conversión a gas natural de la central térmica de Aboño

La Voz GIJÓN

ASTURIAS

Central de Aboño EDP
Central de Aboño EDP EDP

Esta transformación será una realidad en julio de 2025 y dotará a la planta de Gijón de una potencia de 494 megavatios

23 feb 2024 . Actualizado a las 14:21 h.

La empresa EDP y la Corporación Masaveu han adjudicado a Duro Felguera el proyecto de conversión a gas natural e hidrógeno del grupo 2 de la central térmica de Aboño, que dotará a esta planta situada junto al puerto de Gijón de una potencia de 494 megavatios (MW).

En un comunicado, ambas empresas han resaltado que con esta conversión la transformación del grupo térmico será una realidad en julio de 2025, lo que permitirá anticipar el objetivo de la multinacional eléctrica de abandonar la producción con carbón a finales de ese mismo año.

La conversión a gas de Aboño, anunciada en octubre con la cotitularidad (50%) de la instalación de Corporación Masaveu, asegura el futuro de la instalación de generación más importante de Asturias, clave para el suministro eléctrico a la gran industria asturiana.

Según han destacado, la apuesta por ambas compañías por Duro Felguera atiende, no solo a la solvencia técnica y a la experiencia acreditada de esta compañía en el desarrollo de proyectos energéticos, sino también a su fuerte vinculación con Asturias, lo que ha sido especialmente considerado por ambos socios que han querido destacar su «fuerte compromiso con el Principado».

El proyecto, que actualmente se encuentra en plena tramitación, concentrará los trabajos sobre el terreno en 2025, cuando el grupo 2 realice una parada para someterse a una revisión general en el mes de marzo. Durante varios meses, realizarán todos los trabajos para que cuando vuelva a arrancar el grupo, en julio, lo haga utilizando gas natural, y más adelante hidrógeno, además de gases siderúrgicos, característica que convierte a la central desde su origen en un ejemplo único de economía circular.

Esta revalorización de los gases siderúrgicos evita cada año la emisión de un millón de toneladas de CO2 a la atmósfera. En el terreno ambiental, la conversión contribuirá de forma muy significativa a la mejora de la calidad del aire, ya que se reducirá prácticamente el 100% de las emisiones de partículas y óxidos de azufre, y el 80% de los óxidos de nitrógeno. En cuanto a las emisiones de CO2, la reducción media será del 30%, variando en función del volumen de gases siderúrgicos que se revaloricen en la central.

Los trabajos consistirán en la instalación de nuevos equipos y adaptaciones en la caldera, así como en los sistemas e infraestructuras, siempre desde una estrategia de economía circular que permita aprovechar el equipamiento existente. También será necesario construir un nuevo gasoducto para el suministro de gas natural a la instalación.

El resultado del proyecto será un grupo con una potencia de 494 MW, similar a la actual, ya que no requerirá alimentar equipos y sistemas asociados al carbón, como los molinos, las cintas transportadoras o la desulfuradora y también será más flexible, pues los arranques podrán hacerse de una forma más rápida para atender la demanda.

El valle asturiano del hidrógeno verde

Por su parte, EDP continúa trabajando en el desarrollo del valle asturiano del hidrógeno verde en los terrenos de Aboño y, con la tramitación ambiental superada, la compañía avanza cerrando aspectos técnicos del proyecto, así como en acuerdos con proveedores y clientes. En este proyecto y en los que está desarrollando EDP en sus centrales térmicas, la Corporación Masaveu tiene la opción de sumarse con una participación del 10%, informa Efe.