REGIOlab define dos escenarios señalando las áreas del oriente, alrededor de Llanes, y los núcleos urbanos del área central
28 feb 2024 . Actualizado a las 18:39 h.Un estudio elaborado por el observatorio 'REGIOlab' de la Universidad de Oviedo ha establecido que, al menos, 13 de los 78 concejos asturianos pueden ser zonas tensionadas por el elevado precio de la vivienda, la mayoría de ellos en el oriente de Asturias. Con todo, el informe señala específicamente que hay dos fenómenos paralelos en Asturias, hacia las alas y en la zona central donde tres grandes núcleos urbanos funcionan como un área metropolitana y en función de la evaluación, los distritos tensionados se concentran en uno u otro lugar.
El informe señala que esta parte del Principado es un área caracterizada por una «fuerte presión turística» en la que la utilización de los inmuebles con fines de alquiler vacacional puede explicar el elevado precio de los alquiles.
El observatorio explica que si la nueva Ley de Vivienda se aplica por municipios resulta «llamativo» que, a excepción de Gijón, no habría ninguna otra zona tensionada dentro del área metropolitana del centro de Asturias. La villa de Jovellanos es de hecho la que ha aprobado de forma más reciente una moratoria con efectos inmediatos para detener los trámites de pisos turísticos. En la última semana de enero en que fue posible presentar solicitudes se registraron 250. Tanto Oviedo como Gijón son las dos ciudades del país que han experimentado un mayor incremento de viviendas turísticas según el último informe de Exceltur.
En todo caso, el informe destaca que yendo al detalle las valoraciones cambian: con la aplicación de la ley a un nivel más desagregado por secciones censales, se determinaría que 215 de las 878 secciones censales asturianas pueden ser zonas tensionadas.
En contraposición con el análisis anterior, es destacable que, de esas 215 secciones censales tensionadas, el 84 por ciento se encuentran dentro del área metropolitana del Principado.
De este modo, en Oviedo, las zonas tensionadas se concentrarían en el sector noreste de la ciudad, en los barrios de La Corredoria, Teatinos, la Tenderina y Ventanielles, además de en Lugones, una parte de la ciudad que se sitúa fuera de los límites municipales.
Estos barrios han sufrido una «fuerte expansión» en los últimos años, pasando de estar en la periferia a integrarse progresivamente en la ciudad.
También aparecen algunas zonas tensionadas en barrios como Otero, Pumarín, La Argañosa y Las Campas.
En el caso de Gijón, las zonas tensionadas se encuentran principalmente en el sur, que está experimentando un gran crecimiento, y en el este.
Concretamente, al este, en los barrios de Jove, La Calzada, El Natahoyo y Tremañes y, al sur, en los barrios de Santa Bárbara, Nuevo Gijón, Montevil, Roces y Contrueces.
También existirían varias zonas en barrios como Pumarín, El Llano, Ceares y El Coto.
Gijón, además de ser la ciudad que presenta más zonas tensionadas, es la única de las tres ciudades en la que aparecen varias zonas en el centro.
En Avilés, estarían repartidas entre el sureste (La Luz, Llaranes y Villalegre) en el suroeste (La Carriona y La Magdalena) y en el norte (El Nodo y La Maruca).
El observatorio explica que las secciones censales que pueden ser zonas tensionadas se sitúan mayoritariamente alejadas de los centros urbanos y en los barrios con rentas bajas; citó Efe.
Los criterios
Según este informe para que un área pueda ser considerado una zona tensionada se requiere que sea declarado como tal por la comunidad autónoma, siempre que cumpla con al menos uno de los siguientes requisitos:
- 1. Que el coste de la vivienda en el presupuesto de las familias, más los gastos y suministros básicos, supere el 30% de la renta media de los hogares.
- 2. Que el precio de las viviendas haya experimentado, en los últimos cinco años, un porcentaje de crecimiento acumulado de al menos tres puntos porcentuales por encima del porcentaje de crecimiento acumulado del índice de precios de consumo de la comunidad autónoma.
Dentro del área metropolitana (los mapas de Oviedo, Gijón y Avilés marcados en azul) los autores del informe han tomado la renta a un nivel más agregado que el coste del alquiler, en otro ejercicio empírico tomand como base «la indefinición de la redacción de la Ley» que abre diversas interpretaciones. Y así, señalan «esto nos lleva a identificar como zonas tensionadas las secciones censales situadas en los barrios de rentas más altas. Principalmente, en el centro de las ciudades, en algunos barrios residenciales (Montercerrao y Viesques), y en la línea de la costa».
Y añaden «la consideración del coste del alquiler a un nivel más agregado que la renta, permitiría que las secciones censales tensionadas del área metropolitana aumentaran en gran número (262) con respecto a los modelos anteriores (181 y 104, respectivamente). Este aumento se produciría, principalmente, en los municipios y barrios de rentas bajas que se encuentran en la periferia del área metropolitana y en Avilés, donde prácticamente toda la ciudad, a excepción del centro y el oeste, quedaría configurada como zona tensionada».
Los riesgos de la ley
Respecto a los posibles efectos negativos de no aplicar la ley de forma adecuada, el informe señala que también hay riesgos y cita «por un lado, la introducción de especiales incentivos fiscales y usos del suelo en las zonas tensionadas puede contribuir a generar aún más diferencias entre los barrios y municipios del área metropolitana, favoreciendo la dispersión urbana y todos los problemas que esta lleva asociada. Por otro lado, las limitaciones de los precios de alquiler, además de generar una posible contracción de la oferta de viviendas de alquiler, pueden desincentivar las mejoras y reformas de las viviendas por parte de los propietarios, ya que estas, no se verán reflejadas en un incremento de sus ingresos. Esto, unido a una incorrecta planificación de la vivienda social, podría contribuir a convertir las áreas tensionadas en 'guetos' y zonas marginales».