Una cena de homenaje a Juan José Laborda reúne a dirigentes de la Transición críticos con el presente
15 sep 2023 . Actualizado a las 13:23 h.Un homenaje celebrado la noche del jueves al expresidente socialista del Senado Juan José Laborda tras cesar como consejero de Estado se convirtió en una reivindicación de la Transición, el pacto constitucional y el «régimen del 78». En esa cita participaron exdirigentes de todo tipo incluyendo el anterior presidente asturiano, Javier Fernández, quien además cobró protagonismo por vía epistolar interpuesta. Fue el encargado de leer en el atril una carta de Alfonso Guerra, que no pudo acudir presencialmente.
En la misiva el exvicepresidente del Gobierno y ex vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, afirma que cuando oye a un político decir en la actualidad que actuará sin complejos, piensa que lo que está diciendo es que actuará «sin escrúpulos». La carta fue leída por Fernández que fue además el presidente de la gestora del PSOE tras la dimisión de Pedro Sánchez como secretario general socialista.
«Vivimos en un mundo, el de la política, en el que se relega a los capitanes con destreza y experiencia a permanecer en la orilla, mientras se entrega el gobernalle a los grumetes», decía Guerra que ha elogiado también la «sabiduría» de Laborda.
Una sabiduría que considera el «estado superior de la inteligencia» y que ha lamentado que «casa mal con esta época en la que la inmadurez es considerada como un mérito».
A su juicio, no podría ser más oportuno reconocer en Laborda los valores de la convivencia y la armonía social.
Guerra ha señalado que representa una generación que tuvo el sueño de «liquidar la ominosa Dictadura y la construcción de la siempre luminosa libertad».
Y sobre el actual momento político ha incidido: «Cuando oigo a un político, hombre o mujer, decir que actuará sin complejos, pienso que en verdad está diciendo que actuará sin escrúpulos».
La cena
La cena homenaje a Laborda se ha celebrado en un hotel madrileño en el que se han citado no sólo personalidades del mundo político, sino también del ámbito universitario, la cultura y el periodismo.
Todos los intervinientes han destacado el ejemplo de consenso que ha representado Laborda a lo largo de su trayectoria. El exdirigente de CiU y padre de la Constitución, Miquel Roca, ha calificado a Laborda de un referente del «denostado régimen del 78», por el que ha mostrado su orgullo siendo secundado con un prolongado aplauso de todos los presentes.
A los críticos con la Transición les ha instado a ofrecer al menos «un poquito» de lo que se consiguió en ese momento.
En defensa de esa política se ha expresado también la exministra socialista Matilde Fernández y la primera presidenta autonómica en España, la murciana María Antonia Martínez.
El homenajeado ha resaltado el valor de la Constitución y de la Corona y ha hecho también una llamada al consenso para superar «el drama» que cree que vive en este momento España en su situación política.
Entre los asistentes, el jefe de la Casa del rey, Jaime Alfonsín, y exministros socialistas como el también expresidente del Parlamento Europeo Enrique Barón, Juan Manuel Eguiagaray, Virgilio Zapatero o Gustavo Suárez Pertierra.
También exdirigentes de su partido como Juan Carlos Rodríguez Ibarra, Javier Fernández (expresidente de Asturias y que encabezó la gestora del PSOE tras la dimisión de Pedro Sánchez como secretario general por su rechazo en 2016 a facilitar la investidura de Mariano Rajoy), Elena Flores y Francisca Sauquillo,.
A ellos se ha sumado el actual presidente del Senado, Pedro Rollán; y los expresidentes Esperanza Aguirre, Javier Rojo y Juan José Lucas.
La exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría ha estado junto a ellos, así como los exministros de la etapa de UCD Rodolfo Martín Villa y Juan Antonio Ortega y Díaz Ambrona.
Juan José Laborda, nacido en Bilbao en 1947, se afilió al PSOE en 1975, un año más tarde se integró en el Comité Provincial socialista de Burgos, provincia de la que fue secretario general del partido, y en 1977 fue elegido senador en la legislatura constituyente, en la que fue el miembro más joven de la Cámara Alta.
Llegó al puesto de portavoz del grupo, fue procurador en las Cortes de Castilla y León y más tarde, en 1989, alcanzó la presidencia del Senado, cargo del que fue relevado en 1996 al perder el PSOE la mayoría en la cámara y volvió a ser portavoz socialista.
En 2004 sufrió un ictus que le mantuvo ausente varios meses de la vida política, y en noviembre de 2007, tras anunciar su intención de abandonar la política activa, fue nombrado consejero de Estado, cargo que ha desempeñado hasta ahora.
Fiel defensor de la Corona en todo momento, impulsó la creación en 2015 de la cátedra de Monarquía Parlamentaria en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
Fue uno de los promotores del manifiesto en apoyo del reinado de Juan Carlos I suscrito en 2020 por ministros y ex altos cargos de los gobiernos de UCD, PSOE y PP como Alfonso Guerra, Marcelino Oreja, Landelino Lavilla y Soledad Becerril.
Junto a algunos de ellos y muchos otros exdirigentes de diversos partidos ha secundado otros manifiestos críticos con algunos aspectos de la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez.
Entre ellos, el que en 2019 pedía a los partidos un acuerdo por la unidad de España y un Gobierno que no dependiera del independentismo al ser grupos que no aceptan la Constitución y «quieren abolirla por procedimientos ilegales e ilegítimos»; informó Efe.