Una «food truck» de altos vuelos en Somiedo: hamburguesas a 1.700 metros de altitud

Marcos Gutiérrez ASTURIAS

ASTURIAS

Clientes de la food truck disfrutan de las vistas en el Alto de la Farrapona
Clientes de la food truck disfrutan de las vistas en el Alto de la Farrapona

Claudia Fernández y Aarón González son dos empresarios de turismo activo que han logrado llevar su negocio al Alto de la Farrapona

13 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La allandesa Claudia Fernández y el gijonés Aarón González son dos empresarios de turismo activo que han logrado llevar su food truck a lo más alto, literalmente. Los responsables de la empresa Wild Somiedo tienen su camioneta en el Alto de la Farrapona, en Somiedo, a 1.708 metros de altitud.

Es el más alto de la cordillera Cantábrica y ofrece unas inmejorables vistas al valle de Saliencia, en el corazón del parque natural de Somiedo.

Aaron es ingeniero y Claudia tiene una agencia de comunicación, empleos que compaginan con su proyecto personal. «Este invierno hará tres años que comenzamos con el alquiler de raquetas de nieve», comenta Claudia. Destaca que su madre es somedana de nacimiento, por lo que lleva «viniendo aquí toda la vida», al igual que Aaron «que siempre ha sido muy montañero».

Se decidieron a que el punto de partida de su proyecto fuera el del alquiler de raquetas de nieve al darse cuenta de que «había mucha gente joven que buscaba otra oferta deportiva y de ocio que no se estaba dando», ya que la existente en la zona seguía muy apegada a la fórmula tradicional «de rutas a caballo, senderismo, hoteles y ya».

Claudia Fernández en su food truck al anochecer
Claudia Fernández en su food truck al anochecer

Cree que mientras que «el público ha cambiado mucho en los últimos años», en Somiedo «no había infraestructura» para satisfacer dichos intereses. Pese a que la puesta en marcha de Wild Somiedo fue «una locura» en sus inicios, la rápida aceptación que tuvieron les hizo perseverar.

La idea de montar la food truck «empezó en invierno para hacer actividades durante todo el año» y lograr «desestacionalizar el turismo» en la zona. Claudia, que también es guía de senderismo e instructora de yoga, fue la que plantó esa semilla.

Obviamente las infraestructuras en el alto de La Farrapona no son las mismas con las que se puede contar cerca de un núcleo urbano. Aarón y Claudia compraron «la carcasa» de su proyecto, en forma de una furgoneta de tres metros de largo por uno de ancho, y la adaptaron «a medida» para su nuevo cometido gastronómico, equipándola de placas solares, baterías, plancha, freidora, cañero de cerveza…

El entorno de la food truck de Wild Somiedo
El entorno de la food truck de Wild Somiedo

Allí sirven hamburguesas de ternera, jabalí y una opción vegana, patatas, limonada casera, agua, cerveza y café de olla. Una oferta sencilla pero satisfactoria, especialmente si se combina con las vistas con las que se cuenta en el emplazamiento. En este sentido Claudia Fernández está «casi segura» que la suya es la food truck ubicada a más altitud del norte de España.

Esta emprendedora considera que la gestión de la oferta para el visitante en Somiedo está siendo «muy buena», especialmente desde que existe el Parque Natural, un acontecimiento que «cambió muchísimo, y además de manera sostenible», el turismo en la zona, si bien no duda en afirmar que «hay cosas que se podrían haber hecho mejor».

Food truck de Wild Somiedo en La Farrapona
Food truck de Wild Somiedo en La Farrapona

Considera que «a partir de la pandemia» los turistas descubrieron que «hay otras cosas» y destinos diferentes a los más clásicos de playa y sol. Una de sus tareas es «educar a los que vienen» en el respeto con la zona en la que se encuentran. Explica que «a final de temporada siempre realizamos una recogida de residuos en el entorno de los lagos y a diario nos encargamos de la limpieza de los que hayan podido dejar nuestros clientes».

Hace un año estos dos emprendedores sufrieron un «episodio puntual de vandalismo» que, por suerte, ya se solucionó y ha quedado atrás. Aparte de esto admiten no haber tenido «ningún problema» con sus vecinos.