El Principado aprueba ayudas directas para los afectados por los incendios

La Voz

ASTURIAS

Bomberos de Asturias trabajan para extinguir las llamas en un incendio forestal
Bomberos de Asturias trabajan para extinguir las llamas en un incendio forestal Xuan Cueto | EUROPAPRESS

La estimación del área afectada por el fuego en la comunidad se eleva hasta las 32.000 hectáreas

14 abr 2023 . Actualizado a las 12:39 h.

El Gobierno asturiano ha aprobado hoy un plan de choque ante la oleada de incendios forestales que ha calcinado unas 32.000 hectáreas -12.000 de ellas de arbolado- que permitirá subvencionar al cien por ciento la reforestación de las zonas afectadas y que incluirá ayudas directas a los propietarios y ayuntamientos perjudicados.

El Ejecutivo, reunido este viernes en Tineo, uno de los concejos más afectados por los fuegos, ha dado luz verde a un plan que prevé, entre otras medidas, compensaciones de entre 500 y 1.200 euros por hectárea para los dueños de montes afectados.

Según ha informado el Gobierno, el plan de choque recoge ayudas directas a particulares, ayuntamientos y propietarios de montes afectados por daños o pérdidas patrimoniales, cuya cuantía está pendiente de la evaluación de los perjuicios y que serán directas y se tramitarán por la vía de urgencia, mediante acuerdo del Consejo de Gobierno.

El apoyo se orientará para paliar los efectos causados en edificaciones, casetas de aperos, naves agrícolas de los particulares y para compensar daños en infraestructuras municipales.

Por otro lado, se habilitarán ayudas para afrontar las pérdidas forestales que han sufrido los propietarios de montes.

Los primeros cálculos apuntan a que esas compensaciones oscilarán entre los 500 y los 1.200 euros por hectárea, si bien no es una cantidad cerrada, porque la valoración depende del tipo de especie, la densidad forestal o la edad del arbolado, entre otros parámetros.

El Gobierno de Asturias también dispondrá en las próximas semanas ayudas para ordenación y desarrollo de los bosques, destinadas tanto a particulares como a entidades locales, que permitirán la reforestación de todas las zonas afectadas con una subvención del cien por cien.

La línea para particulares 2023 estará dotada con 4 millones que podrán ampliarse hasta los 5,5, y para las entidades locales está prevista una convocatoria de 700.000 euros, ampliable a su vez hasta 850.000.

Adicionalmente, se contará con financiación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que permitirá completar todas las necesidades de reforestación precisas.

Por otro lado, el Principado ya ha puesto a disposición de los ayuntamientos y entidades locales 2,4 millones a través de las ayudas para prevención de incendios.

Además, activará en mayo el nuevo fondo de prevención recogido en los presupuestos de este año, que suma 4,5 millones y permitirá duplicar los recursos facilitados a los ayuntamientos para este fin.

Este nuevo fondo, que incluye un sistema de gestión más ágil que el actual, tiene carácter plurianual (2023-2025) y alcanza una dotación de 13,5 millones, cofinanciada por el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader).

32.000 hectáreas quemadas

Tras la oleada de fuegos, el Gobierno regional solicitará la declaración de Asturias como zona afectada gravemente emergencia de protección civil, la denominación actual de zona catastrófica, para lo que se ha iniciado un procedimiento de recogida de información sobre todos los bienes afectados que estará abierto hasta el 30 de abril.

De forma paralela, el Ejecutivo ha iniciado los trabajos para la medición de las áreas devastadas, que, según las primeras estimaciones, ascienden a 32.000 hectáreas, 12.000 de ellas de superficie arbolada.

También han comenzado los procedimientos administrativos de cara a facilitar los permisos de corta en los montes privados, de tal manera que se pueda recuperar la mayor cantidad posible de madera.

Además, el Principado ha anunciado que pondrá en marcha reformas organizativas, normativas y de planificación que permitan hacer frente en el futuro a posibles situaciones tan excepcionales como la vivida en las últimas semanas con las mayores garantías de seguridad para población.

De este modo, se incluirán cambios en la regulación actual, que incidirán tanto sobre la vigilancia como en la prevención y extinción de incendios.

Así, se abordará la reforma de la Ley de Montes, que pasará a llamarse Ley de Montes y Prevención de Incendios Forestales, para lo que se constituirá próximamente un comité técnico a partir del Consejo Forestal.

Además, se elaborará, con carácter inmediato una nueva resolución de prevención de incendios para conceder especial atención al terreno cercano a las poblaciones (el interfaz urbano-forestal), donde existen más riesgos para las vidas, las casas y las propiedades.

También se adecuará el Plan Forestal, cuya tramitación se ha paralizado para incluir los cambios que se introduzcan en la Ley de Montes y se promoverán políticas de autoprotección de los pueblos para lo que se mejorará la gestión de los recursos forestales, se reforzarán las infraestructuras de extinción, la formación de los vecinos y la coordinación de dispositivos de protección civil; informó EFE.