Iván Velasco, presidente Federación Asturiana Sindical del Taxi, explica que llevan viviendo «un periodo de tiempo largo» encadenando una crisis con otra. Ahora mismo hay «entre 1.300 y 1.400» licencias en el Principado
17 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.El sector del taxi en Asturias mantiene más o menos el mismo número de licencias que antes de la pandemia, si bien desde este ámbito de actividad advierten del castigo que llevan sufriendo desde hace años. En efecto, a los efectos de la pandemia y postpandemia se ha unido el impacto de la guerra de Ucrania y el alza de precios.
Los profesionales en Asturias alertan, además, de las dificultades que encuentran a la hora de acceder a vehículos para renovar el parque regional, si bien se congratulan de que, al contrario de lo que puede suceder en otras regiones, la convivencia con los VTC es, de momento, armoniosa.
Iván Velasco, presidente Federación Asturiana Sindical del Taxi, explica que en el sector llevan viviendo «un periodo de tiempo largo en el que se encadena la pandemia con la postpandemia, luego con guerra de Ucrania, la inflación y los altos precios, que son en definitiva un cúmulo de experiencias que en nada benefician al sector».
Destaca que, a causa de la inflación, se han visto obligados «a realizar un incremento de tarifas mayor que años anteriores». Y es que resalta que, con respecto a los años inmediatamente anteriores a la llegada del coronavirus, los costes del taxi en la región son de «entre un 30 y un 40% más».
Iván Velasco comenta que, en lo que respecta al número de licencias, el Principado continúa «en las mismas cifras, lo que sí es cierto es que desde la pandemia el tema de transferencia de licencias se ha visto algo más ralentizado».
Ahora mismo hay «entre 1.300 y 1.400» en la región. Indica que «las licencias, con el paso de estos años, han bajado bastante de precio, aunque depende mucho del concejo y del vehículo, así como de la urgencia del vendedor». Sea como fuere, hacerse con una licencia de taxi hoy es «más asequible que antes».
Pese a todo, el presidente de la Federación Asturiana Sindical del Taxi explica que «el relevo generacional no es fácil» en su segmento de actividad. En este sentido se trata de un «trabajo que te da cierta libertad para desempeñarlo como tú quieras, pero también es verdad que se echan muchas horas», por lo que la «gente joven a veces prefiere otro tipo de actividad».
En esta línea las licencias «muchas veces pasan de padres a hijos». En lo tocante a la renovación del parque de taxis en el principado y España en general, Velasco cree que «está complicado». Esto es debido, sobre todo, «a las dificultades existentes a la hora de comprar coches nuevos. Antes el taxista cambiaba de manera inmediata y ahora te dan ocho meses de espera, por eso la gente apuesta mucho por vehículos de kilómetro cero o con pocos kilómetros o resignarte a comprar a lo mejor un modelo que no te gusta tanto».
Comenta que «cada vez se tiende más al coche híbrido, sobre todo en Oviedo, Gijón y Avilés. La mayoría de vehículos en los grandes núcleos urbanos de Asturias son híbridos». Desde su punto de vista, «los eléctricos tienen precios muy elevados y la infraestructura en la región no es la ideal».
Uno de los grandes caballos de batalla del sector, al menos en regiones como Madrid o Cataluña, es la competencia con las VTC (vehículos turismos sin conductor). A principios de este año España contaba con 18.109 licencias de vehículos turismos con conductor (VTC) lo que representa un incremento del 1% con respecto al año anterior. En este mismo periodo las licencias de taxi se redujeron en 5.650, un 8,7% menos, hasta 59.009 licencias.
La proporción es ahora de un VTC por cada 3,3 taxis. En Asturias esta tasa es de un vehículo turismo con conductor por cada taxi. El Tribunal Supremo avaló en junio de 2018 la proporción de 30 licencias de taxi por cada una de VTC, vigente desde 2015.
Iván Velasco apunta que «aquí en Asturias, de momento y por la ley de movilidad de 2018, el taxi y la VTC coexisten sin problemas». Eso sí, desde el sector están «vigilantes con VTC de otras comunidades que se puedan encontrar trabajando aquí para que las autoridades tomen las medidas oportunas».
Desde su ámbito solamente pide «que siga habiendo trabajo y que la administración nos tenga más en cuenta a la hora de tomar decisiones, por ejemplo en el tema de los vehículos». «Somos muchos taxistas y muchas familias, con un porcentaje de trabajadores alto», concluye.