El regidor hace balance de los tres mandatos que lleva al frente del concejo mierense sin haber decidido si volverá a encabezar la lista de IU en las próximas elecciones municipales: «ahora estoy centrado todavía en el trabajo que tengo en el Ayuntamiento y en las familias que lo están pasando mal»
21 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Para Aníbal Vázquez ser el alcalde de Mieres es «de las cosas buenas que te pueden pasar en la vida» y, por eso, su dedicación e implicación por tratar de mejorar el municipio le ha quitado noches de sueño cuando no consiguió hacerlo el cáncer que padeció hace un tiempo. «Soy un alcalde permanentemente insatisfecho», confiesa en la entrevista concedida a La Voz de Asturias para hacer balance de las casi tres legislaturas que lleva al frente del municipio mierense. Lo dice porque quiere que el suyo sea un concejo agradable para los vecinos, que viviendo en él encuentren bienestar y, por ejemplo, la oferta cultural que pueden ofrecer las grandes ciudades asturianas, y, sobre todo, que sus convecinos tengan las mejores condiciones de vida. Eso absorbe su pensamiento de tal manera que asegura que a seis meses vista de las próximas elecciones municipales aún no tiene decidido si volverá a presentarse como candidato por IU para volver a optar a la alcaldía: «hay muchas familias que lo están pasando mal, así que como para pararse a pensar en presentarme o no», señala. Otra cosa por la que tiene claro que peleará mientras sea alcalde es por el desarrollo del campus de Barredo, un campus que concibe como «eje vertebrador de Mieres» pese a que considera que «hay gente que son casi enemigos del campus», aunque extrapola a que es la dinámica que ocurre con asiduidad en las comarcas mineras porque, apostilla, «cualquier proyecto de calado que se haga en las cuencas cuesta muchísimo trabajo que se materialice».
-Estamos a seis meses de las elecciones municipales ¿volverá a presentarse como candidato de IU a la alcaldía de Mieres?
-Todavía no se ha abierto el proceso de primarias en el partido y, por tanto, de eso ya tocará hablar en su momento. Ahora estoy centrado todavía en el montón de trabajo que tengo en el Ayuntamiento y en la situación actual porque, por desgracia, hay muchas familias que lo están pasando mal, así que como para pararse a pensar en presentarme o no. Y lo digo de verdad, no lo tengo decidido y no es por ninguna incertidumbre. Habrá tiempo para pensarlo y ver qué hacemos.
-La creencia popular es que si usted no se presenta, el vicealcalde, Manuel Ángel Álvarez, es un firme candidato ¿qué dice al respecto?
-Eso, en todo caso, habría que hablarlo en el partido y buscaríamos siempre un buen candidato. Lo que pasa es que Manu lleva conmigo desde que entró IU en el gobierno de Mieres en 2011, conoce la casa como nadie y es un gran concejal, un gran vicealcalde y un gran portavoz. Además, posiblemente sea el vicealcalde que más hizo de alcalde por todos los avatares que tuve de salud.
-Independientemente de la decisión que tome ¿qué balance hace de legislatura y de estos casi 12 años al frente del municipio de Mieres?
-Si hay que hacer un balance de estos 12 años, hay que decir que nos pasamos la mitad de ese tiempo, unos seis o siete años, equilibrando económicamente el Ayuntamiento. Había una deuda que hubo que satisfacer para ponernos en las condiciones en las que estamos en estos últimos dos o tres años ya con inversiones potentes. Por tanto, hay que hablar de dos ciclos: de un ciclo de sanear el Ayuntamiento económicamente, en el que no había ni para pintar una raya, y de otro ciclo en el que la economía ya nos permite hacer cosas. Hay que destacar que fuimos uno de los dos ayuntamientos que en primera convocatoria conseguimos los fondos EDUSI, que fueron cinco millones con una aportación de millón y medio por parte del Ayuntamiento, y eso nos permitió ejecutar muchas actuaciones. A esto hay que sumar que se nos haya permitido usar los remanentes de tesorería, con lo cual, desde el año pasado ahora van a ir comprometidos 20 millones de euros.
-¿En qué porcentaje da alegrías y sinsabores ser alcalde de un concejo como este?
-Para mí, ser alcalde es de las cosas buenas que te pueden pasar en la vida. Que los tus vecinos y vecinas te elijan para administrarlos durante una legislatura, o dos o tres, como en este caso, es una gran satisfacción. Lo otro, pues es la pelea diaria para tratar de mejorar todo lo que podamos el municipio y la vida de los vecinos, la pelea constante con otras administraciones para que cumplan los compromisos que tengan con Mieres… Pero el balance siempre es positivo… Yo siempre digo que con todo lo mal que lo pasé, nadie te pone una pistola para que te presentes, por lo tanto, hago un balance positivo porque, además, la gente me fue dando cada vez más respaldo y eso es una satisfacción.
-¿Ve posible un respaldo mayor al que tuviste en las elecciones de 2019?
-Yo no soy de los que, si me va bien, bien, y, si no, echo la culpa a los vecinos y digo que no saben votar los ciudadanos… El ciudadano no es tonto y lo que hace es valorar lo que estás haciendo… pues en las próximas elecciones lo que hará será valorar lo que hicimos en esta legislatura y todo lo que tenemos encima de la mesa como proyecto para Mieres y, en función de eso, vota. Después, tener un mayor o menor resultado, es aleatorio.
-Si no se presenta ¿cuál es ese proyecto que no ha conseguido sacar adelante y le deja una espinita clavada?
-Hay varios proyectos en los que se está aún, no es que no salgan, pero yo soy un alcalde permanentemente insatisfecho. Vamos haciendo cosas, pero después ves que hay muchos vecinos y vecinas que no viven bien, incluso vecinos que trabajan a los que les cuesta salir del mes. Y después está el paro, que es una rémora que hace que aunque estés satisfecho en algunas cosas pero en otras no. A veces son ámbitos que se escapan a nuestra competencia, pero decir a la gente que no es mi competencia, no me vale. A mí me preocupa que haya gente que lo esté pasando mal.
-Por el contrario, ¿cuál ha conseguido poner en marcha que le ha significado una gran satisfacción?
-Es un conjunto de cosas: la reorganización del Ayuntamiento, que siempre hemos trabajado para ello, que desde 2018 pudiéramos entrar en la tasa de reposición, que entren técnicos a trabajar, que podamos negociar la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), que es un instrumento fundamental para el funcionamiento del municipio… En fin, considero que hay una transformación importante desde aquellos espacios de tierra que teníamos en medio de la capital del municipio, que son un parque o son aparcamientos. La flota de la empresa municipal de transportes está renovada en un 65 o 70 por ciento… Por tanto, hay muchas actuaciones que nos indican que vamos por el buen camino aunque para mí todo sea insuficiente y quiera que hagamos mucho más. De todas maneras, lo que uno desea es que la Universidad sea el eje del futuro desarrollo de Mieres.
-¿Ha tenido que pelear mucho con otras administraciones o instituciones para defender los intereses de Mieres?
-Sí, porque en ocasiones los compromisos tardan mucho en llegar y puedo decir que los cinco o seis años primeros que fui alcalde, no hubo ninguna inversión del Principado en este municipio. Ahora, por acuerdos como apoyar los presupuestos por parte de nuestro grupo parlamentario, que está haciendo un gran trabajo, hay proyectos que se sacaron adelante. Otras se consiguieron convenciendo al consejero de turno de que no pueden dejar a Mieres fuera del mapa. Y otras están pendientes, como el polígono de Reicastro. Yo ya hice llegar en más de una ocasión que tenemos ahí 80.000 metros cuadrados y que sería deseable tener ahí un proyecto dinamizador y de creación de empleo. Otra cosa que llevo pidiendo desde hace más de siete u ocho años es que haya vivienda pública en alquiler para jóvenes…
-¿Es una solución a la despoblación que sufre el concejo?
-Hay que tener en cuenta que las cuencas perdieron un montón de empleo pero también que no hay vivienda para que los jóvenes se queden a vivir porque, aunque no haya empleo aquí, pueden trabajar en otro punto de Asturias y residir aquí porque comunicados estamos mejor que nadie: somos entrada de la meseta y vas al centro de Asturias en un cuarto de hora. Pero hay que acompañarlo con medidas como la disponibilidad de vivienda pública en alquiler para los jóvenes. Para las últimas 117 viviendas en alquiler que tuvimos aquí, hubo más de mil solicitudes, y hay gente que vendría a vivir a Mieres encantada porque estamos mejorando el municipio en muchos ámbitos pese a los hándicaps.
-¿A qué hándicaps se refiere?
-A la financiación municipal, que es un auténtico desastre porque es a todas luces insuficiente porque, a parte de que los ayuntamientos estamos recibiendo sólo el doce y algo por ciento de los ingresos cuando debería ser del 25%, después en todos los convenios que firmamos con otras administraciones, tenemos que poner dinero de los pocos recursos que tenemos y no suelen ser cantidades pequeñas. A eso hay que sumar que en ocasiones tenemos que hacernos cargo de actuaciones y mantenimientos que son de competencia autonómica, cuando tendría que ser que el que tenga las competencias que lo pague o, si no, que las ceda y nos den el dinero. Es la situación en la que estamos los ayuntamientos, por lo que yo siempre digo que el verdadero estado son los ayuntamientos, porque a los vecinos aunque les expliques que es competencia de otra administración, te piden soluciones, no van a picar al parlamento regional o al nacional. En esta deriva no podemos seguir, así que el tema municipal, o lo resuelven, o va a ser muy difícil realizar inversiones.
-Si le propongo hablar del Campus Universitario de Barredo, ¿qué es lo primero que se le viene a la cabeza?
-Aunque uno ya tiene la edad que tiene y vio muchas cosas, todavía sigo teniendo confianza en que se desarrolle. Ahora, el parón que sufrió durante un montón de años está ahí. En este momento, independientemente de cómo acaben las cosas, yo tengo el plan que presentó el rector cuando salió elegido en negro sobre blanco para el desarrollo del campus de Mieres. Confiemos en que eso vaya siendo una realidad. Hay algunos institutos que ya están funcionando y, vuelvo a repetir, tiene que acabar siendo un elemento vertebrador de nuestro municipio.
-¿Por qué cree que todo lo que atañe a este complejo universitario siempre está envuelto en polémica?
-Yo en todos estos años de reivindicación permanente del campus tuve curiosidad sobre todo lo que se había escrito el año de inauguración. Si alguien hubiese creído aquello… pero se dejó y los rectores continuantes no llenaron este campus de contenido ni se hizo el esfuerzo que se tenía que haber realizado. Hay una inversión de 130 millones de euros en el campus más moderno de este país y, yo me atrevería a decir, de Europa, porque la gente que viene de fuera no hace más que hablar de la excelencia que tiene este campus en cuanto a infraestructura y, sin embargo, está como está, con la poca actividad académica que tiene.
-¿Considera que se hacen campañas para marginar al campus de Mieres cada vez que hay una propuesta para potenciarlo?
-No lo creo, pero esto está abierto a la opinión de todo el mundo. Sí que es verdad, y me atrevo a decirlo porque hay varios ejemplos de ellos, que cualquier proyecto de calado que sea haga en las cuencas cuesta muchísimo trabajo que se materialice. Hay concejos que llevan 20 años esperando que se haga o finalice una actuación y, se acabarán resolviendo, pero llevan 20 años ahí.
-De lo último ha sido la petición de la dirección de la Escuela de Minas a la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca) de que extreme lo máximo posible la vigilancia sobre su traslado al campus de Barredo ¿qué dices a esto?
-Repito lo que dije en el 20 aniversario del campus: es un símil. Es como aquellos que te dicen que la sidra cuando sale de Asturias pierde. Es una gran mentira, la dejas reposar a una temperatura y bien escanciada sabe igual que si la tomas en Requejo. Pues con Minas pasa igual: ¿qué es que pierde calidad porque la institución cambie de ubicación 17 kilómetros? Dejo la pregunta ahí… ¿Va a haber peor calidad en el grado porque te desplaces de Oviedo a aquí? No dejan de ser disculpas de mal pagador, pero que es a lo que estamos acostumbrados en este país y por lo que no avanzamos más, porque estamos permanentemente en la discordia y en la discusión de cosas que no van a ningún lado.
-La postura de oposición al traslado del alcalde de Oviedo es tal que hace semanas manifestó su disposición a llevarlo a los tribunales ¿el ayuntamiento de Mieres está dispuesto a defender el traslado en el mismo ámbito, es decir, en los juzgados?
-Nosotros vamos a estar en la posición de defender los acuerdos que hay y que el campus cada vez tenga más actividad de todo tipo: investigadora, docente, etc... Tendrá que defenderlo en ese ámbito quien hizo el planteamiento.
-¿Por qué crees que el campus de Barredo no ha llegado a ser el proyecto dinamizador que se vendió cuando se concibió y cuando se inauguró hace 20 años?
-Lo tengo claro, porque la gente que lo tenía que haber puesto en práctica, no lo hizo. Hay gente que son casi enemigos del campus y la gente que tenía responsabilidad de desarrollar el proyecto no la cumplió. Aquí pasan estas cosas.
-Si tuviera que resumir en unas pocas líneas cómo encontró Mieres cuando accedió a la alcaldía y cómo está 12 años después ¿qué diría?
-Yo creo que está mucho mejor de cómo estaba, aunque puede negarse la mayor, porque en política es en el único sitio en el que puedes soplar y sorber a la vez y, por tanto, se puede decir lo que sea. Pero está claro que Mieres tenía un montón de solares de tierra que hoy ya no tiene, sino que hay espacios de uso público. Ha mejorado la limpieza y la jardinería notablemente. El transporte público, lo mismo. Creo que hay un montón de cuestiones que son innegables para cualquiera que viva en Mieres porque se mejoraron.