Un jurado declaró probado en junio del pasado año que los supuestos amantes estudiaron los hábitos y rutinas de la víctima, que apenas salía de casa debido a una enfermedad, antes de que el asesino confeso le asestase tres tiros en un garaje de La Felguera en 2017
31 oct 2022 . Actualizado a las 20:36 h.La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo (TS) ha desestimado los recursos de casación interpuestos contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) por la que se condenó a 15 años de prisión al asesino confeso de Iván Castro y a 22 años a su amante y novia de la víctima.
Un jurado declaró probado en junio del pasado año que los supuestos amantes estudiaron los hábitos y rutinas de la víctima, que apenas salía de casa debido a una enfermedad, antes de que el asesino confeso le asestase tres tiros en un garaje de La Felguera en 2017. Después de que hace ahora un año el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) elevase la pena inicial de Nelson D.A de 12 a 15 años y ratificase la de su amante, las defensas de ambos condenados interpusieron ante el Supremo varios recursos de casación que el alto tribunal ha desestimado en una sentencia hecha pública hoy.
A lo largo de cien folios, la sentencia confirma la motivación utilizada por el TSJA y descarta que durante la instrucción se hubiese vulnerado la tutela judicial efectiva, que se hubiese dado indefensión en los procesados o que se hubiese aplicado de forma incorrecta la eximente incompleta de trastorno mental transitorio y de la derivada de confesión o que hubiese habido errores en la apreciación de pruebas. La Sala de lo Civil y Penal del TSJA había desestimado tanto el recurso de Nelson D.A, cuya defensa pedía rebajar la pena a cinco años de cárcel por la atenuante de confesión y de colaboración con la justicia, como el de Marta R.N., cuya representación pedía que sólo fuera condenada como encubridora, y ha condenado a ambos al pago de las costas procesales.
Tras el juicio celebrado en la Audiencia provincial, a ésta última se le impuso una pena más elevada a Marta R.N. al considerar que ella planificó el crimen y convenció a su presunto amante para que matara a su pareja sentimental. El autor confeso, Nelson D.A., recibió una pena menor al estimar el jurado que sufrió un trastorno mental transitorio al padecer un trastorno obsesivo compulsivo y de adicción hacia Marta R. N., combinado con un perfil de rasgos de personalidad dependiente, lo que le mermó sus facultades volitivas y su percepción de la realidad, si bien el TSJA decidió finalmente elevar la pena en tres años de prisión.
Tras estimar el recurso de la acusación particular y el supeditado del Ministerio Fiscal, el TSJA admitió que sólo se le reconociese la atenuante de trastorno mental y no la de reparación del daño, al recordar que ésta debe ser «suficientemente significativa y relevante». En este caso, recuerda, el acusado puso a disposición de la familia de la víctima todos sus bienes, pero el asesinato de Iván Castro supuso un daño «irreparable y no tiene vuelta atrás», por lo que le condenó a 15 años.
Según los hechos probados, el 12 de noviembre de 2017, Marta R.N. se desplazó con Nelson D.A. a La Felguera para conocer el lugar y las posibilidades de llevar a cabo su plan de acabar con la vida de Iván Castro, de 31 años, y para ello le facilitó los datos de su vehículo, su garaje, el lugar donde aparcaba, así como los días y horas en los que salía a la calle. Tres semanas después, Nelson D.A. se desplazó desde Morcín a La Felguera, se apostó en las cercanías del garaje donde la víctima guardaba su vehículo y esperó su llegada, pero el plan falló porque el joven no apareció.
Tras ese primer intento fallido, los acusados lo intentaron al día siguiente y tras una llamada de Marta R.N. a su presunto amante éste se desplazó con su taxi a La Felguera, y cuando la víctima llegó al garaje entró detrás y le distrajo diciendo que le había dado un golpe a su coche unos días antes. En el momento en que la víctima se agachó a comprobar los posibles daños en el vehículo, el condenado sacó una pistola del calibre 9 milímetros y le disparó tres veces a corta distancia.
Castro falleció de forma inmediata en un ataque «sorpresivo e inesperado», sin que pudiera preverlo ni adoptar precaución ni defensa alguna, informa Efe.