Génova plantea un candidato de consenso capaz de seducir a votantes de Foro, Ciudadanos y Vox
ASTURIAS
La dirección nacional ha pedido que el nuevo candidato cierre heridas en la derecha asturiana
30 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.En su comparecencia de este jueves, Teresa Mallada aceptó no volver optar a la presidencia del partido a pesar de que, insistió, a lo largo de esta legislatura había conseguido forjar «la única alternativa al gobierno de Barbón y con posibilidades reales de llegar al gobierno». Pero en Génova no lo ven así.
De forma insistente en los últimos meses el equipo de Feijoo ha reclamado que haya candidatos capaces de ganar elecciones, y en el caso de Asturias han exigido un doble objetivo: que el nuevo liderazgo cierre heridas en el partido (muchas se acumulan además desde hace décadas con sucesivas escisiones que han fragmentado el conservadurismo asturiano), que sea un candidato de consenso, y que sea capaz de seducir no sólo al votante más fiel al PP sino a los que se haya ido a otras opciones como Foro, Vox o Ciudadanos. Incluso también capaz de pescar en el caladero más centrista del PSOE si se tercia.
Si la división de la derecha política española ha sido un quebradero de cabeza para los dirigentes del PP a nivel nacional, en el caso de Asturias se trata de algo casi endémico y con muchas variantes propias. A la par la expectativa de mejorar y de forma notable los resultados del PP en Asturias en las próximas elecciones autonómicas son muy reales, no sólo por el empuje de la marca nacional, que ha logrado revitalizar entre los ya convencidos el propio Feijoo, sino por el hundimiento total de Ciudadanos y el regreso de sus votantes al Partido Popular.
De hecho no hace tanto de la última crisis naranja en este sentido, con la denuncia pública de dos diputados de Ciudadanos Laura Pérez Macho y Armando Fernández Bartolomé, de que parte del partido (señalando directamente a Ignacio Cuesta) preparaba el desembarco en el PP y que el antiguo secretario de Organización de Ciudadanos, Fran Hervías, había mantenido reuniones en el parlamento asturiano invitado por el PP de Mallada. Arrimadas no respaldó estas denuncias sino a Ignacio Cuesta y Pérez Macho terminó dimitiendo y Fernández Bartolomé fue expulsado recientemente del Ciudadanos. Todo este barullo había dado alas precisamente a Mallada que en varias declaraciones ofrecía el PP como «casa común» del centro derecho y de cualquiera que quisiera hacer oposición al socialismo.
Foro es la escisión más autóctona del PP, fundada en su día por Francisco Álvarez-Cascos, (hoy expulsado de este partido) y que se ha refundado en el presente como opción «autonomista» bajo el mandato de Carmen Moriyón y Adrián Pumares.
Vox es la escisión más fuerte. Si bien se llevó un varapalo en las elecciones andaluzas, que provocaron además una grave crisis interna con la candidata que allí llevaron, Macarena Olona, el grupo de ultraderecha ya gobierna en coalición con el PP en la frontera sur de Asturias, en Castilla y León. El propio Feijoo mantuvo un encuentro con Santiago Abascal en que acercaron posturas en determinados asuntos de política y economía, constataron diferencias sobre posibles pactos con el PNV o el respeto a la diversidad lingüística del país; y en todo caso Abascal quiso dejar claro que serían necesarios para formar gobierno.