Aun así, el Principado está a la cabeza de España en vacunación junto a Galicia y Extremadura. En España la mitad de los niños están desprotegidos
06 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El Ministerio de Sanidad y los Gobiernos autonómicos están ahora focalizados en la administración del segundo refuerzo —la cuarta dosis— de la vacuna contra el covid a los más vulnerables. En cambio, han dejado un poco aparcada la cobertura entre los grupos de menor edad, donde la adherencia se ha reducido de manera significativa, tanto que la Asociación Española de Pediatría no duda en calificar de «fracaso» lo que ha ocurrido con la vacunación infantil. Asturias es la tercera región con más porcentaje de cobertura, tras Galicia y Extremadura.
La protección de los mayores, empezando por los de más de 80 y siguiendo hasta cubrir a todos los de más de 60, responde a las recomendaciones y prioridades fijadas por todos los organismos nacionales e internacionales. Pero estos mismos expertos también inciden en la necesidad de conseguir coberturas amplias en el resto de grupos y aquí hay enormes diferencias entre las comunidades, sin que hasta el momento se hayan desplegado grandes estrategias o campañas informativas para remediarlo.
Las evidencias científicas de que el covid-19 acarrea, por regla general, consecuencias menos graves a las personas más jóvenes ha llevado a un número importante de padres a obviar la vacunación, pasando por alto que en España han muerto, según los datos que publica el Instituto de Salud Carlos III, 12 niños de entre 5 y 9 años y 30 adolescentes y jóvenes de entre 10 y 19 contagiados con el SARS-CoV-2.
Según el último informe del Ministerio de Sanidad, tan solo el 45,6 % de los 3,8 millones de niños de entre 5 y 12 años tienen la pauta completa y únicamente el 55,5 % ha recibido al menos la primera dosis. Asturias está en el 62’9 % de pautas completas (71,5% de primeras dosis) pero Baleares, que es la presenta los peores datos, no llega siquiera al 30 % de los niños protegidos. Las diferencias son abismales y se observa como decenas de miles de niños acudieron a recibir el primer pinchazo pero no el segundo. Asturias es la tercera región con más cobertura, tras Galicia y Extremadura, pese a que casi el 30% de los niños están aún sin vacunar. A la cola se sitúan Murcia, Cataluña y Baleares, con tasas muy inferiores.
Eso no significa que en la mayoría de los casos no lo vayan a hacer, porque algunos todavía no pueden recibir la segunda dosis porque no ha transcurrido el tiempo suficiente o porque se contagiaron entre una inyección y otra.
Queja de los pediatras
Esa labor de animar a la vacunación es en la, según la Asociación Española de Pediatría, han fallado tanto las Administraciones como los propios profesionales. Los pediatras consideran que no han «sabido transmitir a los padres la importancia de inmunizar a los pequeños porque aunque en ellos la enfermedad suela ser leve también hay cuadros graves y fallecimientos». También entienden que «ha sido un fracaso por parte de las autoridades sanitarias que desde que recomendaron la vacunación no han hecho ninguna campaña para hacer hincapié en la importancia» de recibir la pauta completa por interés personal y social.
La reducción de contagios empieza a frenarse con indicadores hospitalarios que invitan al optimismo
Los indicadores que miden la evolución de los contagios de coronavirus entre las personas de 59 o más años en España empiezan a mostrar signos de estancamiento. La reducción acusada que se venía observando en las últimas semanas ahora se percibe mucho más ligera, tanto que la incidencia acumulada a 14 días se situó este pasado viernes en 153,8 casos por cada 100.000 habitantes, es decir ocho décimas peor que el martes. En cambio la incidencia a siete días bajó algo más de tres puntos y apunta a que todavía queda margen para recortar contagios, aunque cada vez menos.
En cualquier caso, los indicadores de asistencia sanitaria, que son los más importantes y homologables con otros momentos de la pandemia invitan al optimismo, a que no debería haber demasiados problemas en el comienzo del otoño a no ser que entre otra variante diferente de las hasta ahora conocidas y que tenga todavía una mayor capacidad infecciosa.
Actualmente, hay 3.023 pacientes ingresados por covid-19 en toda España, frente a los 3.510 del viernes pasado, y 210 en unidades de cuidados intensivos, lo que supone 31 ingresados menos en tan solo siete días. La tasa de ocupación de camas ocupadas por coronavirus se sitúa en el 2,58 por ciento, frente al 3,06% del viernes, y en las ucis en el 2,46 por ciento, en comparación con el 2,91% notificado de hace una semana.
Las muertes son ya 112.804 después de sumar 117 en una semana.