El jurado destaca que la localidad «ha sabido mantener la diversidad productiva en el medio rural» y ha conseguido así fijar población y asegurar el relevo generacional
02 sep 2022 . Actualizado a las 19:58 h.La parroquia de Cadavéu, en el municipio de Valdés, ha sido galardonada este viernes con el Premio al Pueblo Ejemplar de Asturias 2022 por «haber sabido mantener la diversidad productiva en el medio rural» y haber conseguido así fijar población y asegurar el relevo generacional.
«Ser una comunidad viva y organizada», la atención que presta a los vecinos de mayor edad «como valor social» y la «promoción de la cultura propia, siguiendo la estela del padre Galo» también han sido valores destacados por el jurado que ha fallado hoy este premio, que desde 1990 convoca la Fundación Princesa de Asturias.
En esta parroquia nació el padre Galo (1884?1939), religioso conocido por el seudónimo literario de Fernán Coronas y que destacó en la recuperación de la “faliella”, el gallego-asturiano característico de este área. La parroquia de Cadavéu se halla en la rasa marina, dentro del Paisaje Protegido de la Costa Occidental de Asturias, a 18 kilómetros de la capital del concejo, Luarca, y a 80 kilómetros de Oviedo.
Integrada por el núcleo que le da nombre y las aldeas de Villamouros y Ribón, sus 435 vecinos sostienen una escuela rural, abierta desde 1923, pero en verano ve aumentado el número de residentes por ser destino turístico, con la playa de La Ribeirona como paisaje natural destacado. Actualmente, diversos emprendedores dinamizan la economía en la que destaca el negocio maderero, pero también el metal o la construcción, que secundan la tradición agropecuaria y pesquera. Hasta ochenta y nueve hórreos y treinta y cuatro paneras salpican esta localidad costera, conocida también por la multitudinaria fiesta de La Regalina, que acumula ochenta años de historia.
El galardón, que reconoció el año pasado a la localidad de Santa María del Puerto, en Somiedo, lleva asociada la visita en octubre de los reyes de España un día después de la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias en el Teatro Campoamor de Oviedo.
El premio está destinado al pueblo, aldea, núcleo de población, espacio paisajístico o grupo humano que haya destacado de modo notable en la defensa y conservación de su entorno natural, ambiental, de su patrimonio histórico, cultural o artístico, en iniciativas de impulso económico y social o en la realización de obras comunales u otras manifestaciones de solidaridad sobresalientes.
Resto de candidaturas
Las candidaturas que aspiraban al premio eran Ribadesella, la comunidad vecinal de Villanueva de Santo Adriano, Trapa, La Vega y El Carme (Langreo), la comarca del río Sella, la cofradía de pescadores Santa Ana (Llanes), la comunidad vecinal casina, las gentes de la villa de Salas, Villoria (Laviana), Fitoria y la Sociedad Festivo-Cultural San Antonio de Fitoria-Villamejil (Oviedo), Vecinos de Arroes (Villaviciosa), Coaña, un pueblo de biblioteca; la asociación vecinal San Jorge de Santurio (Gijón), Posada (Llanes), Pimiango (Ribadedeva), Valdesoto (Siero), la comunidad vecinal de San Cucufate (Llanera), Suarías (Peñamellera Baja), Llaviana (Gozón), el Mercado Artesano y Ecológico, Coviella (Cangas de Onís), la asociación vecinal Ríu Fontoria (Piloña), Banduxu (Proaza), el Valle del Samuño (Langreo), Coya (Piloña), Cadavéu (Valdés), Pesoz, la Sociedad La Montera (Langreo), Pelluno (Aller) y Cue (Llanes).