Teletrabajo flexible y hasta 30.000 euros sin experiencia: la demanda de expertos en ciberseguridad llega a Asturias
ASTURIAS
«Empresas de todo el mundo están dispuestas a contratar profesionales de cualquier sitio y a pagar bien independientemente de que se encuentre en Suecia o en Asturias», explican en la Escuela de Ingeniería Informática de la Universidad de Oviedo
06 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.«La ciberseguridad es una rama dentro de la informática que tiene un presente y un futuro con unas perspectivas laborales magníficas. Hoy en día podemos hacer muchísimas cosas desde nuestro ordenador o teléfono: consultar nuestra información del banco, hacer la compra, pedir comida y mil cosas más. Eso implica que las empresas están conectadas 24/7 y están expuestas a ataques desde cualquier lugar del mundo», explica el director de la Escuela de Ingeniería Informática de la Universidad de Oviedo, Fernando Álvarez, en la que en el curso 2010-2011 se implantó el grado de Ingeniería Informática del Software, uno de los que más demanda tienen y en el que sus egresados tienen la ciberseguridad como una de las posibles salidas laborales en vista de la masiva demanda de profesionales que cada vez son y serán más necesarios en cualquier tipo de empresa o administración.
«En los últimos años vemos en las noticias de forma continua ataques que sufren las empresas y administraciones de todo tipo. Con la pandemia y con la guerra en Ucrania hemos visto que los ataques se multiplican». Asturias, por ejemplo, es una de las comunidades autónomas más vulnerables a los ciberataques, como aseguraba recientemente, durante la presentación de la cátedra de ciberseguridad de la Universidad de Oviedo, el subdirector del Instituto Nacional de Seguridad (Incibe), Félix Barrio. El dato de los ciberataques registrados en Asturias en 2021 es tremendamente significativo: 200.000. Uno de los más recientes que ha trascendido, por el alcance que tuvo y tiene, fue el sufrido por el Ayuntamiento de Gijón.
El director de la Escuela de Ingeniería Informática explica que el valor de la mayoría de las empresas está en sus sistemas informáticos: «Sin ellos un alto horno no puede funcionar, un banco tampoco, ni tampoco un hospital. Por ello es necesario que las empresas inviertan en seguridad informática, para intentar estar lo mejor protegidas ante los ataques que es seguro que van a llegar. Las empresas están viendo esta necesidad y por eso se han lanzado a buscar profesionales que sean capaces de aumentar su seguridad».
En los dos próximos años se necesitarán más de 80.000 profesionales en España, según el último Análisis y Diagnóstico del Talento en Ciberseguridad en España, un estudio que elaboran el Incibe y el Observatorio Nacional de Tecnología, pero la demanda ya llega de cualquier parte de planeta. Solo en Europa se calcula que se necesitan más de 800.000 expertos en ciberseguridad.
«Empresas de todo el mundo están dispuestas a contratar profesionales de cualquier sitio y están dispuestas a pagar bien por él, independientemente de que se encuentre en Suecia o en Asturias», indica Álvarez, que recuerda que ocurre lo mismo con los profesionales en desarrollo del software: «Todos los dispositivos que usamos a diario llevan software, que es lo que les hace ‘pensar’ y ser inteligentes. Los teléfonos inteligentes, los smartwatch, las smart TV, nuestros coches llevan software, ahora todos tenemos dispositivos estilo Alexa… y por supuesto todas las aplicaciones que llevamos en el móvil y todo lo que usamos en los ordenadores. Cada vez hace falta desarrollar más software y que este sea más inteligente, por lo que la demanda de profesionales capaces de desarrollar software no para de incrementarse».
¿Qué perfiles buscan las empresas?
En el caso del desarrollo de aplicaciones, que cada vez tienen que ser más atractivas y funcionales, así como seguras y que no permitan robar datos, «se necesita que los desarrolladores conozcan e implementen esas medidas de seguridad». Y lo mismo ocurre con los responsables de las infraestructuras y sistemas informáticos, que deben conocer las mejores prácticas de seguridad para evitar ataques y disponer de sistemas de backup que permitan recuperarse de ellos cuando ocurren. Aparte de expertos en ciberseguridad y en desarrollo de software, se buscan directores de tecnología (CTO), desarrolladores en campos específicos (web, videojuegos, móviles, inteligencia artificial), ingenieros de usabilidad o expertos en DevOps, aquitectura Cloud o SRE (Site Reliability Engineering).
«Cada año estamos recibiendo más y más ofertas de empresas que están buscando talento. Este año vamos por unas 400, y tenemos unos 85 estudiantes en el último curso del grado -matiza Álvarez-. Continuamente están visitándonos empresas que buscan talento y quieren ofrecer a nuestros
estudiantes la posibilidad de trabajar con ellos». Ofertas que llegan de empresas de la propia comunidad. «En Asturias hay un gran ecosistema de empresas del sector, y cada vez más. Muchas empresas que ya estaban ubicadas aquí están creciendo y otras que no estaban en Asturias están abriendo oficinas y buscan crecer», indica el director de la escuela.
Pero también llegan de otros lugares de España, de Europa y del resto del mundo. «Desde hace tiempo y, sobre todo desde la pandemia, la posibilidad de teletrabajar ha hecho que cada vez más las empresas busquen talento sin importar dónde está ubicado, eso posibilita que egresados de la Escuela trabajen para empresas de Madrid, Inglaterra o Estados Unidos sin moverse de Asturias, además cobrando los salarios de esos sitios», asegura Álvarez.
¿Qué están ofreciendo las empresas?
Flexibilidad absoluta, por ejemplo con libertad de horarios y teletrabajo, y salarios que pueden llegar a los 30.000 euros para los graduados que no tienen ninguna experiencia laboral. «Cada vez más se tiende a la flexibilidad absoluta, ofreciendo teletrabajo, libertad de horarios, etc. Esto es una de las cosas que más valoran los egresados a la hora de buscar un lugar donde trabajar».
También las condiciones económicas han ido mejorando mucho en los últimos años. «Ahora la competencia no es únicamente entre las empresas de Asturias. Al existir la posibilidad del teletrabajo tienen que competir con empresas de Madrid o Barcelona e incluso del extranjero, lo que ha hecho que se eleven los salarios y, obviamente, según se va ganando experiencia, se ven incrementados rápidamente». Así, un profesional con tan solo cuatro años de experiencia puede optar a salarios por encima de 50.000 euros, «y estas cantidades están subiendo rápidamente».
Debido a esa continua y creciente necesidad de profesionales, la búsqueda de talento español por parte de empresas extranjeras ya no está tan relacionada con el hecho de que en España los salarios sean más bajos que en sus países de origen. «Inicialmente, cuando el teletrabajo no estaba implantado, el motivo para abrir oficinas en España o en Asturias podría ser, en parte, el hecho de que en Asturias se pagaban salarios menores que, por ejemplo, en Madrid o en Londres. Pero la situación está cambiando, ahora mismo las empresas han asumido como filosofía de trabajo normal el que los equipos no estén en la oficina sino que cada uno se encuentra en cualquier lugar del mundo. Hay muchas empresas que han cerrado las oficinas físicas por completo y otras las han hecho mucho más pequeñas haciendo imposible que todos sus empleados fuesen a trabajar in situ», explica Álvarez. De forma paralela, añade, la demanda de profesionales se incrementa «a un ritmo frenético».
¿Cuán exigente es el grado en Ingeniería Informática del Software?
Álvarez reconoce que el grado, como todas las ingenierías, tiene un cierto nivel de exigencia. «Para empezar, actualmente tiene una nota de corte para entrar que está alrededor del 9 y, por tanto, es casi imprescindible presentarse a la parte específica de la EBAU», indica. Además, al ser una titulación con una carga práctica importante, requiere de un trabajo continuado a lo largo de todo el curso: «Hay que tener al día los conocimientos que se imparten en la parte teórica para luego aplicarlos en la arte práctica».
Pero uno de los atractivos de la titulación es precisamente esa importante carga práctica, ya que casi la mitad de las cases se imparten en laboratorios. Además tiene a su favor que es un grado bilingüe, su internacionalización y su orientación tanto a la investigación como al mundo profesional, con prácticas obligatorias en empresas, remuneradas en su mayor parte, en el último año.
«Nuestros graduados están capacitados para liderar equipos de personas en los departamentos de informática, digitalización, automatización y tecnología en todo tipo de empresas: desde servicios de información de administraciones públicas, multinacionales puramente tecnológicas, hasta empresas e industrias más tradicionales, pasando por startups de distinta naturaleza», explica el director de la escuela, que señala que otro destino habitual de los egresados también es la enseñanza de informática en secundaria, bachillerato, ciclos formativos y universidad.
El auge de la ciberseguridad, en Asturias
La escuela, situada en el campus de los Catalanes de Oviedo, también ofrece un máster en Ingeniería Web, que incluye por supuesto conceptos de ciberseguridad, y se está estudiando relanzar otro título propio de máster en Ciberseguridad en Ingeniería del Software orientado a profesionales que quieran reciclarse aprovechando el auge de esta rama de la informática. En los últimos tres cursos, se han graduado una media de 63 estudiantes cada año y, en el caso del máster, 14.
La escuela, que el próximo viernes 9 de junio celebra una jornada de orientación curricular y una feria con una treintena de empresas del sector tecnológico, también colabora con varios centros de Formación Profesional como el CIFP de Avilés, el IES Uni Eibar-Ermua y el IES Zubiri Mantero de Donostia en el proyecto Hackadermia, investigación y formación abierta en ciberseguridad y hacking ético. «Algunos profesores que imparten ciclos formativos de grado superior han salido de nuestra escuela. Actualmente, la demanda es tan grande que todos lo niveles de estudios tienen una empleabilidad cercana al 100%», dice Álvarez, que matiza que evidentemente para determinados puestos es necesaria una formación a nivel universitario o incluso de máster.
No obstante, en Asturias, en este curso comenzaban a impartirse cursos de especialización en Ciberseguridad en Entornos de las Tecnologías de la Información orientados a graduados en Formación Profesional. Además, la Consejería de Ciencia, donde tienen claro que «es el momento de posicionarnos claramente en el sector de la ciberseguridad», está impulsando la creación de un laboratorio de ciberseguridad que, bajo la tutela de la sociedad Gestión de Infraestructuras Públicas de Telecomunicaciones del Principado (GITPA), tendría como objetivo validar y testear diferentes tecnologías como la fibra óptica de alta capacidad, 5G o edge computing aprovechando como «campo de entrenamiento frente a los hackers» los 20 nodos de distribución de fibra óptima que se existen en la comunidad.