Barbón, ante las consecuencias de la guerra en Ucrania: «Vienen meses difíciles»

La Voz REDACCION

ASTURIAS

El presidente del Principado, Adrián Barbón, durante su intervención en el pleno en la Junta General del Principado
El presidente del Principado, Adrián Barbón, durante su intervención en el pleno en la Junta General del Principado J.L. Cereijido | EFE

El presidente asturiano señala al impacto que ya se está viendo en el recibo de la luz y el precio de los combustibles y que sufrirá «especialmente la clase trabajadora»

09 mar 2022 . Actualizado a las 13:51 h.

El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha reconocido este miércoles que se avecinan «meses difíciles» en los que los gobiernos, incluido el asturiano, deberán tener «una visión muy social para atender y apoyar a los colectivos más vulnerables y a las empresas para que puedan salir adelante» en un contexto de fuerte inflación y precios récord de la energía.

Barbón ha asumido esta situación al responder en el pleno de la Junta General del Principado a sendas preguntas formuladas por el PP e IU sobre la guerra en Ucrania y las consecuencias que este conflicto desatado hace dos semanas puede tener en la economía y familias asturianas.

En respuesta a la portavoz popular, Teresa Mallada, el presidente ha asegurado que hay que decir la verdad a los asturianos y transmitirles que es preciso dar «estabilidad, rigor y unidad en la Cámara, y no hacer política barata» en un momento en que no se puede ocultar que la guerra va a tener consecuencias económicas para los bolsillos de todos los europeos.

«Vienen meses difíciles y quien lo oculte está mintiendo», ha reiterado posteriormente a la portavoz de IU, Ángel Vallina, a quien ha advertido de que, aunque «esta guerra en el corazón de Europa nos está afectando, y mucho», en estos momentos las consecuencias económicas «son todavía impredecibles».

No obstante, ha señalado que «van a tener un impacto claro», como se está viendo ya en el recibo de la luz y los precios que están alcanzando los combustibles, y que lo sufrirá «especialmente la clase trabajadora».

Fijación de precios

Para contener los precios energéticos, Barbón ha señalado que es preciso insistir en la modificación del sistema marginalista de fijación de precios para evitar que el gas marque el precio de otras energías más baratas, como la eólica o la solar, o actuar para que el gas salga de ese sistema.

También ha considerado que hay que frenar la especulación creciente en los derechos de emisiones de CO2, que también encarece la energía, y hacer que la UE de una respuesta comunitaria y conjunta al precio del combustible, tras descartar que el encarecimiento esté relacionado con el cierre de las térmicas porque en Alemania el carbón, junto al gas, tiene una fuerte presencia, y los precios incluso superan los de España.

Previamente, Mallada había señalado que es el momento de replantearse el cierre de las térmicas, porque la guerra en Ucrania y los precios energéticos disparatados muestran que la descabonización exprés llevada a cabo por los socialistas fue un error.

Si se reconsidera el cierre de las térmicas y se reconduce la «errada política energética» española, contará con el apoyo del PP, ha señalado la presidenta de los populares asturianos, para quien la guerra en Ucrania «hace que haya que librar otra guerra energética en Europa».

Mallada, que ha pedido a Barbón que deje de perder el tiempo en calificar a Putin, ha acusado a su Gobierno de no haber actuado de forma contundente ni de haber estado a la altura de los cientos de asturianos que se han movilizado y dado muestras de gran solidaridad desde que estalló el conflicto hace dos semanas.

Tras asegurar que la guerra se ha metido también en las casas de los asturianos en forma de precios de la energía, la portavoz de IU ha advertido de que el Gobierno asturiano va a tener que aumentar el apoyo social y económico a los más desfavorecidos porque si la primera víctima va a ser el pueblo ucraniano, la segunda lo serán los trabajadores europeos.

Vallina ha asegurado que las decisiones de la Unión Europea ante este conflicto «no pueden ser más desacertadas, sobre todo la de enviar armas y no política,» y ha incidido en que no se necesitaba una Europa que jalee una guerra en la que Ucrania pone las víctimas civiles.

«Malditas sean las guerras»

Haciendo suyas las palabras del histórico dirigente de IU, Julio Anguita, recordadas hoy por Vallina, el presidente asturiano ha asegurado que él también dice «malditas sean las guerras y los canallas que las hacen porque no solo causan dolor y sufrimiento en Ucrania sino porque va a tener consecuencias en la vida diaria de las clases más vulnerables de Asturias».

Barbón ha asegurado que su Gobierno está «actuando y trabajando de primera mano y sobre el terreno» y ha recordado que en el comité de coordinación para la acogida de refugiados que se celebró la semana pasada, las principales organizaciones que trabajan con ellos, como son Cruz Roja y ACCEM, pidieron que los líderes institucionales no pidan ayuda material, sino económica, porque mucha se queda en tierra de nadie porque no hay forma de transportarla.

Asimismo, Barbón ha admitido que «la ola inflacionista» va a provocar un desajuste de los presupuestos y que habrá que hacer «las adaptaciones necesarias» para «dar respuesta» a la situación. Así contestaba al portavoz de Foro, Adrián Pumares, quien le ha pedido explicaciones sobre las acciones de su Gobierno «para ayudar a las familias y empresas asturianas a hacer frente a la desbocada subida de precios que se está produciendo».

Tras subrayar que «la ola inflacionista» no es un problema exclusivo de Asturias sino que afecta al conjunto de España y de Europa, Barbón ha considerado que la situación exigirá «respuestas a nivel de España y comunitario» y ha subrayado que «la herramienta política» con la que se puede atender a los problemas de los ciudadanos se llama presupuestos, a los que «usted votó en contra», le ha recordado Barbón a Pumares.

Cierre de térmicas

Dicho presupuesto va a quedar «desajustado» por la inflación, ha admitido Barbón, y por ello habrá que hacer las «adaptaciones necesarias» si se quieren aumentar las ayudas a las familias o las empresas porque «vienen tiempos duros a los que las administraciones deberán dar respuesta».

Pumares se ha mostrado de acuerdo en que la inflación no afecta solo a Asturias o a España, pero ha remarcado que «a las economías peor gestionadas le afecta mucho más».

El portavoz de Foro ha advertido de que la situación es «verdaderamente dramática para muchas familias y empresas» sin que vayan a recibir ayudas, y «muchas se van a quedar atrás» ante las perspectivas de la caída del consumo y la inversión.

Tras afirmar que el Gobierno debería de «pedir perdón» por haber promovido el cierre de las centrales térmicas o por el hecho de que aún no se haya puesto en marcha la regasificadora de Gijón, el portavoz de Foro ha remarcado que en estos momentos «necesitamos liderazgo, abandonando el seguidismo político».

Barbón ha rechazado que el aumento de la inflación se deba al cierre de las térmicas, como demuestra que otros países como Alemania están atravesando una situación similar o incluso peor pese a utilizar el carbón como gran fuente de respaldo.

Además, ha subrayado que él no era partidario del cierre de térmicas, pero hubo algunas empresas que optaron por adelantar su clausura en lugar de realizar las inversiones a las que obligaba la normativa europea dentro de un periodo transitorio.

Por otro lado, Barbón ha asegurado que el Gobierno asturiano ha cumplido ya en torno al 40 por ciento de los compromisos adquiridos al inicio de la legislatura y están «iniciados» un 45 por ciento, en un mandato marcado por la pandemia de la covid-19 y la invasión de Ucrania que requiere «estabilidad» y no «división o tacticismo». También ha aceptado la propuesta del grupo parlamentario de Podemos para que Asturias acoja un foro de debate y reflexión sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos en la Agenda 2030, encabezado por la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, informa Efe.