Más que plantaciones, verdaderos laboratorios 'indoor' de marihuana

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Imagen de archivo de la Guardia Civil tras descubrir una plantación de marihuana.
Imagen de archivo de la Guardia Civil tras descubrir una plantación de marihuana. Guardia Civil

Tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil han localizado en viviendas y en naves industriales de la región grandes cultivos de esta droga cuyo destino podía ser el mercado nacional o internacional

14 feb 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La marihuana ha sido la droga más detectada en Asturias en los últimos tres años. Así lo indica el balance realizado desde la Guardia Civil de Asturias, que precisa que la procedencia de la mayoría de las incautaciones es de operaciones en las que se desmantelaron plantaciones, donde en numerosas ocasiones no solo se localizan plantas, si no también cogollos o la droga ya preparada para su distribución. A este respecto, lo que se traslada desde la Unidad de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) de Asturias es que las plantaciones de marihuana que localizan ahora son «de mayor tamaño y más sofisticadas». Así, mientras que antes percibían que no era tan sencillo gestionar una plantación, «en la actualidad el cultivo indoor ha mejorado mucho y utilizan técnicas para tener más plantas, que crezcan más rápido y que sean de mayor calidad», apunta el jefe del Grupo de Estupefacientes. Esto implica que, si antes se localizaban cultivos con un centenar de plantas, los últimos sobre los que ha actuado dicha unidad contenían más de 1.000 plantas, casi siempre ubicadas esas plantaciones en chalés o naves industriales.

La Guardia Civil también dispone de unidades, los denominados EICO (Grupos de Investigación de Compañía), que investigan aquellos delitos contra la salud pública de entidad local, como pueden ser las plantaciones de marihuana que se distribuyen por la zona rural escondidos en otras plantaciones como puede ser, por ejemplo, en plantaciones de maíz. En otras ocasiones, las plantaciones de droga están «en viviendas de zonas más bien aisladas, donde instalan verdaderos laboratorios indoor de marihuana», apuntan fuentes de la Guardia Civil. En estos casos, el delito de cultivo de droga suele llevar aparejado otro delito de defraudación de fluido eléctrico, y es que la cantidad de energía necesaria para la potencia de la iluminación necesaria para activar la fotosíntesis de las plantas es muy elevada, por lo que abonar su importe lo haría poco rentable económicamente.

Operaciones más relevantes

 La Operación «Breda» supuso la localización del mayor alijo de marihuana jamás incautado en Asturias. Casi 3.500 plantas y 170 kilos de cogollos de marihuana fue lo que se requisó en los registros que se llevaron a cabo en Carreño y Langreo en la que fue una de los mayores operativos nacionales contra el tráfico de este tipo de estupefacientes. En ella intervinieron la brigada provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Asturias, junto a Europol, Citco y otras unidades de la Policía Nacional y de la autonómica. En este caso, la operación derivó en la detección de cuatro personas en Asturias y de otros 61 integrantes de la organización, la mayoría de origen chino.

 Otras operaciones ejemplo de lo mencionado fueron la denominada «Bagana», llevada a cabo en Fitoria (Oviedo), en la que la Guardia Civil intervino una plantación Indoor con 300 plantas y 34 kilos de marihuana dispuesta para la venta;  la operación «Moloso», que se saldó con la detención de 7 personas y la investigación de otras dos, así como la intervención de diversas cantidades de cocaína, útiles para su manipulación y venta, una plantación indoor de marihuana y una pistola; o las 1.500 plantas intervenidas en la zona occidental de Asturias en el marco de la operación «Green».

 En la Operación «DeLoto», la Guardia Civil logró desmantelar un laboratorio de marihuana Indoor establecido en el interior de una vivienda unifamiliar de Castrillón. La operación se inició tras tener conocimiento de la existencia de un fuerte olor a marihuana que dimanaba de un chalet ubicado en la zona rural. Las investigaciones permitieron la interceptación de una furgoneta que viajaba con destino Madrid, y en la que se transportaba 9 kilos de cannabis sativa oculta en el interior de fundas de cojines, envasadas al vacío en bolsas de 1,5 kilos, aproximadamente. El conductor de la furgoneta y único detenido era de origen asiático, siendo la primera vez que se detectaba la presencia de un grupo organizado de estas características en Asturias.

 En base a la experiencia policial en investigaciones similares llevadas a cabo por la Guardia Civil en diferentes puntos del territorio español en estos últimos años, el modus operandi seguido por este tipo de organizaciones forma parte de un entramado íntegramente asiático y muy hermético, en raras ocasiones integran a nacionalidades de otros países entre sus miembros, ni efectúan ventas de drogas mediante intermediarios, por lo que se ocupan de todas las fases de cultivo, preparado, envasado y distribución de la misma.

 La marihuana, cultivada en laboratorios indoor situados en lugares aislados, es preparada y envasada para realizar envíos mediante empresas de mensajería desde diversas localidades e incluso desplazándose a diferentes provincias españolas, sirviéndose de los canales empleados para el comercio de mercancías, para evitar así ser detectados y relacionados con su lugar de asentamiento.

 Otro ejemplo fue la Operación Bluesky, llevada a cabo en abril de 2020. Dos personas fueron detenidas al ser sorprendidas descargando unas cajas en una nave del polígono industrial de Pervera-Carreño, cajas que contenían 75,9 kilos de marihuana siendo, en este caso, su procedencia la región de Murcia.