Uno de los mejores bonsáis de España se cuida en Asturias

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

Rubén Ciezar y su mujer, Lorena Vilas, junto al pino silvestre ganador del certamen
Rubén Ciezar y su mujer, Lorena Vilas, junto al pino silvestre ganador del certamen

Rubén Ciezar ganó la reciente convención de árboles enanos con un pino salvaje de 25 años revalorizado, tras el premio, en más de 50.000 euros

07 feb 2022 . Actualizado a las 09:17 h.

Un bonsái asturiano, entre los mejores de España. Se trata de un pino salvaje de 25 años y 45 centímetros de altura, que fue premiado en la reciente III edición de la Convención de Bonsái, celebrada en Aranjuez, en la cual han participado aficionados y profesionales del bonsái, en diferentes categorías. La Unión Española del Bonsái es una asociación que se dedica a promover y difundir todo lo relacionado con el mundo del bonsái, y que organiza una exposición nacional e internacional, que son un punto de encuentro para todos los apasionados de estos ejemplares.

 El bonsái ganador pertenece a Rubén Ciezar Villanueva, que se ha impuesto en el certamen a varios ejemplares procedentes de diferentes países, siendo la segunda vez que este leones afincado en Asturias es premiado.

El bonsái de Rubén Ciezar ha resultado premiado por el jurado, en su mayoría formado por japoneses, con la distinción Premio UBE mejor composición CHUIN (mediano en japonés), categoría en función de su tamaño. Ciezar ha presentado al concurso una composición, en la que también se exponía junto a él, una pequeña planta de hoja caduca. El premio recibido ha revalorizado el valor de este ejemplar, que ahora es de más de 50.000€, pero según ha declarado su propietario no está en venta.

Primer premio del europeo 2020
Primer premio del europeo 2020

Más premios por alguno de sus ejemplares

Está afición ya se ha visto compensada por el reconocimiento en otras ocasiones. En febrero de 2020, Rubén Ciezar, se llevó el primer premio del campeonato nacional con un tejo de 350 años cuidado durante décadas.

Rubén Ciezar tiene esta afición desde que era muy joven con tan solo diez años. Terminó estudiando ingeniería agrónoma, para poder cuidar mejor de sus bonsáis, afición a la que le dedica su tiempo libre. A día de hoy dispone de una colección de más de cien ejemplares, de los que cuida con técnicas milenarias y a los que dedica la mayoría de su tiempo libre. Su sueño es poder, algún día, crear un museo para poder compartir la belleza de éstos árboles enanos.