![el consejero de Industria, Enrique Fernández](https://img.lavdg.com/sc/EgglGAiW61F398hPal-59ej7G7M=/480x/2022/01/26/00121643192941875831416/Foto/efe_20220126_090757426.jpg)
La plantilla de la factoría de Avilés exige la reprobación del consejero a la puertas de la Junta General
26 ene 2022 . Actualizado a las 11:29 h.El Consejero de Industria, Enrique Fernández ha comparecido este miércoles en el Parlamento asturiano en el Pleno monográfico sobre la situación de la planta de Alu Ibérica en Avilés y Gozón y durante algo más de una hora ha explicado de manera somera las gestiones llevadas a cabo por su Ejecutivo que a su juicio echan por tierra las acusaciones de «escapismo o inacción».
«Lamento el relato desenfocado de los hechos que se ha producido y que seguro tendrá en este pleno un nuevo episodio tratando de buscar culpables a conveniencia», ha indicado el consejero que ha pedido a los grupos que no se engañen, porque en esta situación hay un sólo culpable que es «la empresa Alcoa que ha trabajado en la para torpedear la producción de aluminio en España y en Asturias».
Fernández, que ha trasladado su apoyo y solidaridad a los trabajadores y sus familias, se ha comprometido a seguir trabajando en la búsqueda de una salida de tal modo que los trabajadores puedan recibir lo antes posible las indemnizaciones y de este modo tratar de iniciar las labores para recolocación de estos empleos. Así ha manifestado que su Ejecutivo en ningún momento va a renunciar a la posibilidad de que pudiese aparecer un inversor que se hiciese cargo de la platilla actual, cosa que les agradaría pero que ahora mismo se antoja complicada.
Representantes de la plantilla de Alu Ibérica se concentraron ante la sede de la Junta General para exigir a los grupos parlamentarios la reprobación del consejero Enrique Fernández, que comparece en un pleno extraordinario sobre la situación de la planta avilesina y sus trabajadores. El presidente del Comité de Empresa, José Manuel Gómez de la Uz, reprochó al Ejecutivo de Adrián Barbón que hablasen de inversores para la planta de Avilés cuando «no ha sido así. No hay mesas, no hay inversores ni nada que se le parezca».
En este sentido el consejero ha lamentado que se crea que su dimisión o reprobación es la solución al conflicto de la planta y ha añadido que sí se usa la lógica quien debería ser reprobado no es otro que el consejero delegado Alcoa, «pero claro eso no da rédito político».
La larga historia de la empresa
Ha hecho un amplio repaso de la historia de la compañía recordando que fue en 1998 cuando, bajo la presidencia de José María Aznar, la empresa se privatizó y ha incidido en que las dificultades de la planta «no son algo nuevo ni reciente».
También ha vuelto a defender que la llegada del fondo suizo Parter Capital fue «una contingencia más» de las que el actual Gobierno se encontró al inicio de la Legislatura y es a partir de ahí cuando la situación comienza a complicarse aún más, hasta llegar al anuncio de la transmisión de la propiedad al grupo del Grupo Riesgo, «unos inversores que desde el primer día y la primera reunión no ofrecieron garantías de solvencia».
«A seis días de haber llegada a la consejería nada hicimos para intentar parar la venta de Alcoa a Parter, ni nosotros ni nadie, pero a partir de ahí si hemos llevado a cabo numerosas acciones en el ejercicio de nuestras posibilidades», ha defendido el consejero, que ha ido enumerando las reuniones y demás gestiones llevadas a cabo por el Ejecutivo asturiano.
Así, tras defender la acción del Gobierno asturiano, ha lamentado las críticas y teorías que les acusan de «escapismo e inacción. Lo que no hemos hecho ha sido posar y hacernos fotos delante de la planta. Escucharé sus intervenciones para saber que han hecho el resto de los grupos políticos además de cargar contra este Gobierno», ha indicado Fernández, que también ha querido ser muy tajante al negar que haya mentido o engañado a los trabajadores
«Se nos siguen pidiendo certezas sobre los inversores que se supone hay interesados, pero a día de hoy nosotros no podemos tener esas certezas. Se nos piden también intervenciones públicas para las que este Gobierno no tiene competencia y se nos achacan a nosotros consecuencias de acciones en las que nada tenemos que ver», ha indicado.
La situación actual
Ya en lo referido a la situación actual, el consejero ha recordado que a día de hoy hay abiertos cuatro procedimientos judiciales y ha añadido que si se quiere buscar a los verdaderos culpables de la situación de Alcoa ya se está haciendo en sede judicial.
Ha recordado que el Ministerio les ha transmitido la existencia hoy en día de siete posibles inversores que están interesados en los que el denominador común es que llegado el caso asumirían únicamente la planta y las instalaciones, pero no la plantilla.
Además ha indicado que desde el Ministerio les han transmitido la intención de trabajar para la que empresa que se pudiese hacer cargo de la planta tenga preferencia en la contratación de los actuales trabajadores.
Ha explicado además que desde el Gobierno asturiano han añadido varias exigencias políticas como que sea seleccionado el mejor proyecto en términos de empleo y actividad; su disposición a la intervención de la SEPI o que se aceleren al máximo las acciones para la posible llegada a un inversor que haga factible el futuro de la planta. Además también ha relatado las medidas que desde la consejería que preside facilitarían ante la posible llegada de una empresa a las instalaciones de Avilés y Gozón.
Protesta en la tribuna
Algunos trabajadores entraron a la tribuna de asistentes para seguir el pleno junto a varios representantes sindicales durante la comparecencia del consejero. Uno de ellos fue expulsado tras exigir la reprobación de Enrique Fernández diciendo: «¡Reprobación, echa-y-lo de aquí!»
Los que permanecen fuera también han reclamado la dimisión del consejero e incluso del presidente del Principado por la actuación del Ejecutivo autonómico con lemas como «Consejero, dimisión; Barbón, dimisión».
Según José Manuel Gómez de la Uz, tanto el consejero como el presidente y la ministra, Reyes Maroto, dijeron a la plantilla hace seis meses que había inversores ya en ese momento y entendían que «había que esperar al concurso de acreedores» para que alguno se hiciera cargo de la plantilla, pero no ha sido así».
«Lo que hay son posibles compradores cuando nos retiren a todos y quede la carroña; y se hagan cargo de los trozos de las plantas o lo que les interese. No hay ningún inversor como tal para hacerse cargo de la plantilla y un proyecto tangible», ha lamentado.
Para De la Uz, el consejero no ha hecho «nada y no se ha enterado», bien sea «porque no ha requido o porque no sabe», por que ve necesaria su reprobación, añadiendo que «no puede estar en el cargo».
Sobre la posibilidad de que se concreten inversiones para las plantas con nuevas actividades con una recolocación total o parcial de la plantilla, los trabajadores desconocen lo que va a pasar pero sostienen que una vez que los echen «lo demás son fuegos de artificio».
«No llevamos tres años luchando para que venga un concurso de acreedores, nos echen a la calle y se vendan las plantas para hacer yogures. Esa no fue nuestra lucha; eso no es un inversor para nosotros. Que puede pasar luego, claro que puede pasar. Son unas instalaciones golosas y son unos terrenos también golosos. ¿Puede haber alguien que los compre? Seguro. Pero ya no vamos a estar ahí nosotros y ya veremos para qué actividad. Al final, todo esto ha sido un fracaso perpetrado sobre todo por dos administraciones que no han sido fieles ni legales con los trabajadores y trabajadoras», ha remarcado.
Asimismo, reprochan que desde las administraciones hayan «engañado en muchísimas ocasiones» a la plantilla. «Estamos hablando de la gente que avaló la venta a Parter Capital, que está claro que era un fondo sin ninguna capacidad de operar las fábricas», dice De La Uz, criticando que no fueran capaces de darse cuenta «de que estaba perpetrándose por parte de Alcoa la farsa enorme que hicieron con la venta a Parter Capital»; informó Europa Press.