Inquietud entre militantes socialistas por la falta de avances en la oficialidad

ASTURIAS

F. Sotomonte

Grupos y colectivos urgen a retomar el diálogo en enero y advierten de la polarización de las campañas de Vox

12 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Los sectores y militantes que con mayor fuerza apostaron por el respaldo a la oficialidad del asturiano dentro del partido socialista, y que llevaron con éxito sus tesis al anterior congreso de la FSA, se encuentra inquietos ante la aparente, según algunos, pero cierta según otros, parálisis en el proceso de negociación para emprender la reforma del Estatuto de Autonomía que deba ampliar el reconocimiento y protección del asturiano. Hay «malestar», y también preocupación por «generar frustración» si no se dan pasos claros aunque descartaron que traten de formar una corriente interna para presionar en este sentido.

«Hay descontento por lo lento que va esto y parece que es así porque, salvo que haya una negociación súper secreta, lo que se ve ye lo que hay»; en último clavo de optimismo al que agarrarse algunos esperan que las demoras puedan explicarse por la espera a que concluya el actual congreso de la FSA, que ratificará el liderazgo de Adrián Barbón sin rivales y que termina el próximo 19 de diciembre.

En el pleno del debate sobre el estado de la región se marcó un hito crucial cuando el portavoz de Foro, Adrián Pumares, se abrió a respaldar la reforma lo que daría la cifra necesaria de 27 escaños para su aprobación. Pero también planteó todo un abanico de reformas paralelas, algunas en materia fiscal y que son de ámbito presupuestario, además de la exigencia de que la futura Ley de Uso (que será la que despliegue el desarrollo de la oficialidad en cuestiones como la educación o función pública) requiera también una mayoría reforzada de tres quintos de la cámara. PSOE e IU accedieron a esta petición (aunque recalcando que es singular porque en ningún otro territorio se pide una mayoría tan alta para normas similares) y Podemos, quinto partido en liza, la acogió con precaución aunque se abrió a aceptarla tras un informe del catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Oviedo Miguel Presno Linera.

En diversos colectivos asturianistas, y también entre las sensibilidades de este tipo dentro del PSOE, se marca la frontera de enero como la última línea antes de que este debate llegue a convertirse en otra «oportunidad perdida». Lo ha pedido explícitamente Izquierda Unida por boca de su portavoz, Ovidio Zapico, esta misma semana. En un mensaje publicado en su cuenta en Twitter señaló: «Acuerdo sobre el texto y calendario para el proceso. Fue lo que dijimos el 2 de octubre sobre el estatuto y la oficialidá. No hemos conseguido ni lo uno, ni lo otro. Queda una última oportunidad, habilitar en la Junta enero y ponerse al día con los acuerdos y trabajos pendientes». La línea de enero se recalca entre los implicados como imprescindible para que el ritmo de los trabajos en la Junta General sea capaz de llevar al Congreso de los Diputados la reforma para su refrendo en esta legislatura ante la incertidumbre de su composición en la próxima.

Fuera del PSOE los reproches están repartidos pero focalizados en Barbón. Si entre las fuerzas de izquierda se afea a Foro que tratara de mezclar el debate de la oficialidad con el de los impuestos, también se recalca la, en su opinión, pasividad del presidente a la hora de encabezar el debate apoyado en su amplia mayoría parlamentaria, de 20 escaños. Critican que cuando Pumares planteó en el debate sobre el estado de la región sus exigencias, Barbón «lanzara el balón» a Podemos e IU instándoles a trabajar conociendo ya esa propuesta. «Es él (Barbón) el que debe emprender los pasos o el proceso será un centrifugado», aseguran.

Resulta complejo que el debate sobre la reforma del Estatuto se haya superpuesto al de la negociación parlamentaria, constreñida en apenas tres semanas de diciembre, y donde los grupos se miran entre sí con amplios recelos por las posibles alianzas de geometría variable con las que pudiera jugar el presidente. En Podemos se forma manifiesta se aprecia que Barbón prefería apoyarse en Ciudadanos, un partido que de forma declarada se ha opuesto a la oficialidad del asturiano. Foro, en una primera valoración, lamentó que el proyecto de las cuentas autonómicas no recogiera su petición de rebajas fiscales, especialmente para el impuesto de sucesiones, aunque apreció que se incluyera la de lanzar ayudas directas a la natalidad con un cheque bebé de mil euros por hijo para hogares que no superen los 45.000 euros de renta.

En todos partes, en todos los ámbitos, crece la preocupación compartida por el hecho de el debate social se envenene con iniciativas como las vallas de acoso instaladas por Vox. Junto a la autodenominada Plataforma contra la cooficialidad se lanzó primero una emisión de pegatinas acusando a Pumares de traidor con la imagen de su rostro tachado, el mismo mensaje llegó después a vallas en las carreteras y de forma más reciente con una nueva campaña en la que se afirma «los adrianes quieren meterte la llingua» ilustrada con un montaje de Pumares y Barbón besándose.

Si bien en la pasada legislatura, el PP se mostraba sin ambages contrario a la oficialidad, nunca hubo ningún problema para el uso del asturiano en los debates de la Junta General, que solían utilizar de forma muy habitual diputados de Podemos. Pero en el nuevo mandato, desde la entrada de grupo de extrema derecha en el parlamento, sus protestas con constantes si alguien decide utilizarlo, se vetó su uso por parte de la Consejera de Cultura, Berta Piñán, e incluso se llevó la cuestión al Tribunal Constitucional que terminó fallando a favor del uso del asturiano en la Junta.

A la campaña de acoso personal se une que entre los adversos a la oficialidad se sostiene que la reforma traería «imposiciones» para la población y, en concreto, para el acceso a la función pública. Sin embargo, desde el Gobierno asturiano y también desde los grupos que respaldan la oficialidad se asegura que ninguna de estas cuestiones, tampoco el uso como lengua vehicular en la escuela, se encuentra en su agenda y que el Principado desarrollará su propio modelo. Barbón señaló, eso sí, que quiere tomar como referencia para la redacción del articulado el estatuto el de la comunidad vecina de Galicia, donde el PP lejos de criticar la cooficialidad la defiende sin problemas.