Estos son los ocho concejos en los que el Principado quiere implantar el toque de queda y limitar las reuniones
ASTURIAS
El Ejecutivo autonómico pide autorización al TSJA para aplicar las nuevas restricciones
29 jul 2021 . Actualizado a las 14:00 h.El Gobierno asturiano ha pedido hoy autorización al Tribunal Superior de Justicia (TSJA) para aplicar nuevas restricciones en concejos que alcancen valores de riesgo extremo por coronavirus (4+), una medida que de momento afectaría a ocho municipios, entre ellos Gijón y Oviedo, los más poblados de la región, después de que la comunidad haya entrado en nivel de alerta 2.
Esas restricciones, que afectan a derechos fundamentales lo que ha obligado a pedir autorización a los tribunales, se concretan en la limitación de la movilidad nocturna (toque de queda) entre la una y las seis de la madrugada y en la prohibición de encuentros de más 10 personas no convivientes en exteriores, con la excepción de visitas guiadas y otros eventos, y de más de seis en interiores. Las medidas tendrían efecto durante 14 días, computados a partir del día siguiente a la publicación en el Boletín Oficial del Principado (Bopa) del acuerdo del Gobierno en caso de obtener el visto bueno del TSJA, y se aplicarían en los concejos de más de 10.000 habitantes que pasen tres días seguidos con una incidencia acumulada de 350 casos por 100.000 habitantes.
Según los últimos datos de Salud, Oviedo, Gijón, Carreño, Gozón, Laviana, Mieres, Siero y Villaviciosa, que suman más de 631.00 habitantes -el 61% de la población de Asturias- entrarían en el denominado nivel 4+ mientras que otros 14 municipios de menos de diez mil habitantes también cumplirían los requisitos, aunque sus casos se evaluarían de forma individualizada. Los datos que computarán para aplicar estas medidas serán los correspondientes a la jornada de hoy con lo que la evolución de la situación epidemiológica podría determinar que finalmente alguno de ellos no fuese incluido en el 4+ si no superase los umbrales fijados, aunque el consejero de Salud, Pablo Fernández, ha considerado muy improbable esa posibilidad.
Al margen de esta solicitud de autorización a los tribunales, el Gobierno publicará mañana una resolución en la que decreta la entrada de esos municipios en situación de 4+ a partir del próximo lunes para que apliquen una serie de recomendaciones que no afectan a derechos fundamentales y que pasan por reducir la interacción social y aumentar los periodos de confinamiento domiciliario. Entre esas medidas figura la necesidad de que la autoridad sanitaria revise junto a las municipales las autorizaciones concedidas por los ayuntamientos para la celebración de eventos multitudinarios en sus territorios para determinar si siguen siendo válidas ante la nueva situación epidemiológica de los concejos afectados, lo que podría afectar a acontecimientos como la Feria de Muestras de Asturias.
El Gobierno ha tomado esta decisión ante una nueva ola de contagios «explosiva» que ha afectado de forma mayoritaria a personas de entre 15 y 29 años, un grupo de edad en el que la incidencia en las últimas semanas multiplica por cuatro el registrado en las cuatro anteriores. Esta situación ha provocado también un incremento del número de contagios, aunque en menor medida, entre los mayores de 65 años, el grupo de población más vulnerable a la enfermedad, y ha provocado un aumento de la presión hospitalario que, según las previsiones del Ministerio de Sanidad, seguirá creciendo hasta el 15 de agosto para los ingresos en planta y hasta el 18 en las ucis.
En este sentido, ha apuntado que, desde que a comienzos de julio se produjo el aumento de la incidencia derivado de esta quinta ola, su departamento comenzó a habilitar algunas medidas preventivas en los hospitales ante la posibilidad de tener que empezar a suspender intervenciones programadas como está ocurriendo ya en otras comunidades autónomas. «Esa posibilidad existe, pero intentaremos preservar al máximo toda la atención programada posible y, por su puesto, se mantendrá la urgente, oncológica y no oncológica», ha subrayado.
Esta quinta ola, ha apuntado Fernández, se caracteriza además por una mayor dificultad a la hora de conseguir un rastreo «igual de efectivo que hasta ahora» dado que el grupo de edad que más se ha contagiado en esta ocasión tiene una elevada interacción social y una gran movilidad, así como un mayor número de contactos estrechos por su tipo de sociabilización. A esta circunstancia se añade el hecho de que entre los jóvenes de 15 a 29 años se da una mayor frecuencia de casos que presentan síntomas leves o son incluso asintomáticos por lo que su detección «se dificulta», ha apuntado el consejero, informa EFE.