Ignacio Cuesta: «Los cargos de Ciudadanos Asturias me transmiten la decisión firme de seguir en el proyecto»

Ignacio Cuesta ha vivido horas trepidantes por los vaivenes sísmicos que ha sufrido su partido, con duras palabras lanzadas de forma personal contra la presidenta del PP de Asturias, Teresa Mallada, acusándola de emprender una campaña para atraer a afiliados y cargos de Ciudadanos. Cuesta, que une su condición de coordinador regional naranja a la de teniente de alcalde en la capital, sigue manteniendo, sin embargo, contra viento y marea la firmeza que, asegura, sostiene el acuerdo de gobierno en el Ayuntamiento de Oviedo.

-En las últimas horas el tono se ha elevado entre usted y Teresa Mallada, ¿esa tensión tiene repercusiones en su pacto en Oviedo?

-Respecto al PP regional ya he dicho todo lo que tenía que decir y tampoco creo que tenga mucho sentido seguir alimentado esta polémica. Por sus hechos les conoceréis; el tiempo dará o quitará razones. El pacto en Oviedo goza de buena salud, hay una buena sintonía personal y política entre el alcalde y yo y esa es una premisa buena para que continúe el pacto, que es bueno para Oviedo y para los ovetenses.

-Usted llegó a decir que «los comportamientos tramposos se pueden venir en contra tarde o temprano» ¿a qué se refiere? 

-Esos movimientos, que se ponen en marcha de una manera poco leal y decorosa, al final lo que pueden producir es que haya un reafirmamiento de la gente del partido. Es algo que puedo constatar, recibo muchos correos, muchos mensajes de afiliados comprometidos con este proyecto. Esos intentos pueden volverse en contra de el que los lleva a cabo precisamente por eso, porque contribuyen a la reafirmación de los cargos de Ciudadanos en un proyecto que sigo pensando que es más necesario que nunca.

-Desde fuera, al menos, la situación de Ciudadanos parece inestable, hay un goteo de renuncias en diferentes partes de la geografía española ¿tiene la garantía de que no le puede suceder aquí? 

-En la vida muy poco puede darse por cierto pero yo hablo con muchos de ellos y todos me transmiten tranquilidad, confianza y una decisión firme de seguir colaborando con un proyecto que, como digo, es muy importante para romper esta dicotomía tan tremenda, que polariza la sociedad entre izquierdas y derechas, aderezada además por los toques de populismo tan tremendos y que nos han llevado a una situación como la que estamos viviendo. Parece que volvemos a esa España guerracivilista, de bandos enfrentados. Pero hay un proyecto político de centro, moderado, sensato y, sobre todo, útil, que es más necesario hoy que nunca.

-Desde el PSOE ovetense se lanzó una oferta, una mano tendida para una moción de censura en Oviedo.

-Lo he dicho por activa y por pasiva, el pacto en Oviedo goza de buena salud, está funcionando bien. Estamos hablando de dos partidos distintos, con proyectos políticos diferentes y en ocasiones, como en cualquier coalición de gobierno, hay discrepancias pero se resuelven. Como creo que debe hacerse, en el ámbito interno, evitando a los ciudadanos espectáculos como los que vimos con el anterior equipo de gobierno tripartito en la ciudad. Es un acuerdo que está funcionando y que es bueno para Oviedo y para los ovetenses.

-En todos estos pactos, tanto a nivel regional como local, tuvo un peso relevante Fran Hervías, pero ahora se ha ido al PP ¿cómo ha vivido usted eso?

-Indudablemente, Fran ha sido fundamental en el crecimiento y la implantación territorial de este partido y no ocultamos nada si decimos que es un amigo. Pero él ha decidido apostar por esta opción, hacía tiempo que no estaba cómodo con este proyecto y es absolutamente legítimo irse. Ha renunciado, y es importante ponerlo en valor, a su acta de senador y ha decidido apostar por otro proyecto político. Es algo perfectamente legítimo.

-Tras reunión de este lunes en Madrid, recalcó que el liderazgo de Inés Arrimadas salía reforzado pero, ¿puede cambiar eso en el corto plazo, tras elecciones de mayo en Madrid en función de los resultados?

-El liderazgo de Inés Arrimadas no está en cuestión, no he escuchado a un solo cargo o dirigente o afiliado de Ciudadanos que planteara una alternativa. Sí es cierto que se cuestionaron a algunas de las personas que le acompañaban en el comité permanente, creo que hubo una asunción de responsabilidades, algunos decidieron dar un paso atrás y eso ha sido bien percibido en la militancia. Más allá de eso es indudable que ahora hay unos comicios que son muy importantes, que se han planteado en unos términos guerracivilistas, o fascismo o comunismo, y ahí un partido como Ciudadanos tiene un amplio espacio. Un proyecto de moderación, de sensatez, de responsabilidad, de pensar en el interés de los madrileños por encima de cualquier otra consideración. Sin ninguna duda va a recibir un respaldo importante, mucho mayor del que algunos piensan y del que las encuestas ponen de manifiesto.

-Ignacio Aguado ha dicho que volvería a pactar con Ayuso, incluso después de adelanto electoral que le pilló por sorpresa.

-Aguado se ha portado siempre con responsabilidad, mucha más que con la que se ha comportado la presidenta madrileña que ha hecho pagar a los ciudadanos de Madrid los problemas de corrupción del Partido Popular en Murcia. Aguado ha mantenido diferencias con Díaz Ayuso, que son conocidas, en un gobierno de coalición a veces no estás de acuerdo con el socio pero Aguado siempre ha sido leal en ese sentido y ahora toca posicionarse. Si hace escasamente dos años había razones para pactar con el PP, al margen de la irresponsabilidad de su actual presidenta, yo creo que esas razones siguen vigentes. La alternativa es una izquierda comandada por alguien como el exvicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias. La elección no puede generar muchas dudas.

-¿No es tibia la respuesta de Ciudadanos si, al fin y al cabo, están acusando al PP de llevarse diputados tránsfugas para evitar la moción de censura en Murcia?

-La respuesta ha sido dura, pero sabemos diferenciar. Estamos hablando del PP en Murcia, porque en la ejecutiva de Cs hubo compañeros que están gobernando con el PP en otros territorios, en Andalucía o en Castilla y León, o en el propio Madrid en la capital y nos trasladaban algo que es obvio y que yo puedo constatar aquí, que el PP no es igual en todas partes. Estamos hablando de una situación concreta en un territorio específico, por eso la moción de censura se plantea en Murcia y no en otros territorios. Allí sí hay constatación de una corrupción casi sistémica del PP, pero en Murcia, no se pueden trasladar las consecuencias a otros territorios de España que están en circunstancias completamente diferentes.

-¿Cómo es el PP de Asturias? Tuvo palabras duras para ellos hace dos días.

-Lo que dije efectivamente es que el PP de Asturias puede verse tentado a seguir una estrategia que se ha diseñado desde el PP a nivel nacional. No es algo que yo me esté inventando, es algo que ha expresado su propio secretario general. Lo que decimos es que en Asturias puede darse esa circunstancia y por tanto mostramos, como ayer hizo el comité ejecutivo nacional, un rechazo enérgico a que se lleven a cabo esas tácticas que no son leales ni decorosas y que no son dignas.

-En la hipótesis de que llegara a ocurrir algo así en Asturias, que hubiera diputados de Cs en la Junta General que saltaran al PP ¿no se replantearía el acuerdo de gobierno en Oviedo?

-Habría que ver en qué circunstancias se produce eso, yo no tengo ningún indicio que me pueda llevar a pensar que eso suceda en el ámbito regional y mucho menos a que eso pueda tener alguna réplica en Oviedo donde, como digo, hay una buena relación con el PP, hay una magnífica relación entre el alcalde y yo y una coalición de gobierno que funciona bien y eso tiene que estar por encima de cualquier otra consideración.    

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