El menú completo que recomiendan las guisanderas para despedir el año

ASTURIAS

Cinco cocineras asturianas explican sus recetas y aportan trucos para sobrevivir al empacho

31 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Terminamos el año y con él dejamos atrás buenos y malos momentos, todos ellos marcados por la actual pandemia. Como manda la tradición, la mayoría de los asturianos despiden este 2020 rodeados de sus seres queridos y, por supuesto, con una buena comilona. Pero, las propuestas originales y sabrosas para sorprender a los invitados ya se han ido quedando en el tintero a lo largo de las navidades. Frente a ello, las guisanderas de la región recomiendan una serie de platos sencillos y deliciosos, que conforman un menú completo, para despedir esta noche tan especial. Además, nos dejan algunos trucos para sobrevivir al empacho.

Entrante: Aguacates rellenos

María José Miranda, del Llar de Viri (Candamo)

Para cuatro personas se necesitan dos aguacates, un trozo de salmón ahumado picado, 10 colas de langostinos, una lata de caviar de oricios y otra de carne de cangrejo, un huevo cocido, dos pimientos del piquillo y media cebolla picada. Además, se requiere de salsa rosa, que se hace con tres cucharadas de mayonesa y una de tomate, una cucharadita de tabasco y zumo de naranja, así como sal y pimienta al gusto.

Una vez tenemos los ingredientes, vaciamos los aguacates y los machamos con un tenedor. Añadimos los langostinos troceados, el cangrejo, los oricios, la cebolla, el pimiento y el huevo. Hacemos la salsa rosa, lo mezclamos con el aguacate y dejamos un poco para adornar. Rellenamos el aguacate con esta mezcla y ponemos por encima una cucharada de salsa rosa y unos langostinos troceados con unas tiras de pimientos. Para finalizar, espolvoreamos con perejil.

Primer plato: Crema de nécoras o salpicón de bugre con langostinos y pixín.

Annalisa Luso, de Taberna Salcedo (OVIEDO)

Pixabay

La crema de nécoras es un plato estrella de estas fechas navideñas. Para hacer esta receta, para dos personas, primero hay que picar y pochar el ajo, la cebolla y la zanahoria. Al mismo tiempo, hay que dejar preparado el fumet, que se hace con agua, rape, sal, cebolla y laurel. Se echa todo en una cacerola, se deja cocer durante 15 minutos y reservamos.

Una vez hecho el sofrito, a este se le añaden tres nécoras, el pimentón dulce de la Vera y un tomate maduro. Se flambea y se añade un poco de arroz para que la crema coja consistencia. Luego se añade el fumet, que previamente habíamos preparado, y lo dejamos cocer. Una vez lista, la pasamos por la batidora y a continuación la colamos por un colador chino. Si hiciera falta se rectificaría la sal y se herviría. Y ya estaría lista para servir. Además, se le pueden añadir unos curruscos de pan.

La guisandera asturiana también sugiere como plato principal, para cuatro comensales, un salpicón de bugre con langostinos y pixín. Para ello se necesitan: 600 gramos de pixin, un bugre de 1kg, 12 langostinos, cebolla, pimiento rojo, perejil, pimentón, vinagre de vino, aceite de oliva virgen extra, sal y 2 huevos cocidos. Una vez que tenemos los ingredientes, se pican a cuchillo y muy menudas las verduras y las claras del huevo con el perejil. Luego, emulsionamos el vinagre, el aceite, la sal y las yemas y lo vertemos todo a las verduras. Después, cocemos el bugre y los langostinos. Al mismo tiempo, preparamos el pixín. Lo adobamos con pimentón y sal y lo cocemos envuelto en papel film. Una vez completado este paso, troceamos el bugre, los langostinos y el pixín. Lo mezclamos todo con la vinagreta, rectificamos de sal y lo servimos frío.

Segundo plato: Merluza al ajillo o pitu caleya

Mayte Álvarez Arias, de Casa Lula (Tineo)

La guisandera apuesta por este plato «sencillo de hacer y digestivo». Para ello, se necesitan más de cuatro kilos de merluza del pincho. Se desloma y se parten las raciones en 300 gramos. La marcamos sobre la plancha vuelta y vuelta. Al mismo tiempo, se ponchan unas patatas panaderas. A continuación, ponemos en la bandeja del horno las patatas, encima la merluza con la piel hacia abajo y se le echa por encima un sofrito de ajo, aceite, guindilla y vino blanco. Lo dejamos diez minutos y ya estaría listo para servir.

Pili Ramos Rodríguez, de Sidrería Los Pomares (Gijón)

«En estas fechas es muy típico el pitu de caleya», asegura Ramos. Para preparar este plato, primero hay que trocear el pitu y dorarlo muy bien en aceite. A continuación, se reserva y con ese mismo aceite se fríe ajo, bastante cebolla, puerro, zanahoria, pimiento verde y rojo. Todo muy picado. Una vez pochada la verdura, esta se reserva. Se junta en la misma cacerola el pitu, unas gotas de coñac y agua y se deja cocer a fuego lento durante tres horas aproximadamente. Luego, lo sacas y lo echas al sofrito para que concentre durante dos horas a fuego lento, también.  Para finalizar, se le puede echar guindilla para quitar el dulzor de la cebolla y para que pique.

Postre: Tarta de avellana.

Ángela Pérez García, de Casa Emburria (Tineo)

A parte de las uvas, cualquier comida de celebración lleva consigo un postre. La guisandera apuesta por esta sencilla receta que «está al alcance de todos». Se necesitan: 10 huevos, 400 gr. de avellana molina, 400gr. de azúcar y ralladura de limón. Una vez tenemos los ingredientes, separamos las yemas de las claras y las batimos a punto de nieve. En un bol aparte hacemos lo mismo con las claras. Lo juntamos y añadimos la avellana y la ralladura de limón. Revolvemos con movimientos envolventes, sin batir, y lo vaciamos en un molde. Lo metemos al horno durante 40 minutos a 180º. Se hace la prueba de la aguja, que nos indica si ya está lista si al pinchar la aguja esta sale limpia. A continuación, la decoramos con nata y avellanas y se puede acompañar en el plato con un trozo de helado.

Consejos para aliviar la pesadez estomacal 

El empacho, también, forma parte de las tradiciones de las comidas navideñas. Por eso, las guisanderas nos dan un par de consejos para dar un respiro y conseguir mejorar esa sensación de pesadez y congestión. «Entre plato y plato lo mejor es tomarte un sorbete o cortante de limón con un poco de ginebra o champán. Es muy fácil de hacer, trituras el hielo, echas un chorrín de limón y otro de cava. Rallas un poco de limón por encima y listo. De esta manera, te hace bajar la comida», asegura María José Miranda.

Por su parte, Pili Ramos considera que la solución está en eliminar los entrantes. «No se acaba el mundo en una noche. Con un buen primer plato y un segundo ya es bastante. Hay que comer con moderación. Para rematar la comida se puede comer un poco de fruta. Y a medida que pase la noche ya puedes ir comiendo los dulces», sentencia.