Sinn Féin, el famoso partido independentista irlandés, significa «nosotros mismos» en gaélico. Hay pocas comparaciones posibles en el ámbito ideologico entre este grupo y el diputado de Foro en el Congreso Isidro Martínez Oblanca, pero la traducción nominal define a la perfección su actuación en las cortes. Totalmente a su bola, y sin tener comunicación alguna con la dirección del partido, el diputado casquista se ha ido posicionando en distintos debates al margen de su formación en algunas ocasiones de forma estrambótica. La última de ellas en la sesión de este jueves, en la que Oblanca sumó su voto a los de Vox para quedarse como los únicos que se pronunciaban en contra de prorrogar hasta el 9 de mayo de 2021 el estado de alarma decretado por el Gobierno para hacer frente a la segunda ola del coronavirus.
La distancia entre Oblanca y Foro ya es casi total aunque no se ha llegado a la ruptura o a iniciar un procedimiento de expulsión. En todo caso y desde hace meses (desde que Foro rompiera del todo con su fundador Francisco Álvarez-Cascos con quien mantiene un pleito en los tribunal acusándole de pasar gastos personales a las cuentas del partido), Oblanca vota por su cuenta y son varias las ocasiones en las que lo hace al margen de su formación, o sin consultarla, en asuntos tan delicados como su oposición a la Ley de Eutanasia.
Tan es así que este mismo jueves, la Comisión Directiva de Foro exigió al diputado una explicación por haber votado en contra de la prórroga del estado de alarma. El partido afirma que Oblanca «no ha trasladado ni comunicado el voto de una cuestión tan relevante» y además ha requerido «públicamente al diputado Isidro Martínez Oblanca para que acuda la próxima reunión de la Comisión directiva, habida cuenta de que continúa impugnando sus convocatorias pese a las ratificaciones judiciales ya recaídas sobre la validez de las mismas».
En las propuestas de resolución que se llevarán este viernes a la Junta General del Principado, el diputado de Foro y secretario general de la formación, Adrián Pumares, llevará a una iniciativa en contra del decreto que permite contratar a médicos sin haber pasado el MIR. Fue una propuesta que Oblanca votó dando su respaldo al partido socialista. La medida desperto la indignación de los facultativos que ya han protagonizado una huelga por ello. (Por cierto que en el debate de orientación y al hilo de esta cuestión, aunque la medida fue aprobada por el Ejecutivo socialista, el presidente Adrián Barbón aseguró que en Asturias no se aplicaría).
Los choques han llevado incluso a la publicación de una carta abierta por parte de la presidenta de Foro, Carmen Moriyón en la que le reprocha «preguntarte por la representación que ostentas en el Congreso de los Diputados, actuando en nombre de un partido a cuyas Comisiones Directivas no asistes y cuyas directrices no tienes a bien ni consultar ni acatar».
Oblanca se encuentra alineado con el fundador de Foro, Francisco Álvarez-Cascos, que mantiene una guerra abierta con la dirección actual, presidida por Carmen Moriyón, y que mantiene al grupo dividido. Desde esa quiebra (que ha afectado también al grupo en el parlamento asturiano con cada uno de sus dos diputados partidario de una facción), Oblanca ha cortado la comunicación con la dirección en Asturias e incluso ha creado, con los fondos del grupo mixto al que pertenece, una página web para difundir sus iniciativas al margen de la oficial de Foro.