A pesar de la beligerancia de ambos grupos para el uso de la llingua en la cámara, han llevado escritos en la variedad de gallego asturiano
16 sep 2020 . Actualizado a las 10:54 h.En declaraciones públicas, y en su actividad parlamentaria desde el inicio de la legislatura, tanto el Partido Popular como Ciudadanos en Asturias han sido dos de los grupos más beligerantes contra el uso de la lengua asturiana en la Junta General. Fue especialmente sonada la polémica por la negativa a permitir que la consejera de Cultura, Berta Piñán, se expresara en asturiano ante la cámara hasta el punto de que llegara a plantearse la posibilidad de estudiar solicitar un traductor simultáneo y que se saldó con una reforma del reglamento para garantizar que cualquier persona pudiera dirigirse en llingua al hemiciclo. Sin embargo, y a pesar de estos posicionamientos, lo cierto es que ambos grupos han llevado al parlamento esta semana dos escritos en la variedad de gallego asturiano, en dos enmiendas presentadas a una iniciativa de Podemos Asturies.
Los dos textos están firmados por las portavoces parlamentarias de los grupos, Teresa Mallada en el caso del PP, y Susana Fernández en el de Ciudadanos tras haber relevado semanas atrás a Laura Pérez Macho. El objeto de debate es una proposición no de ley de Podemos Asturies sobre el modelo de gestión y reconocimiento del Museo Etnográfico de Grandas de Salime.
Los naranjas reclaman cambiar el punto quinto para «Apostar pol desenvolvemento del Museo Etnográfico de Grandas de Salime como úa institución científica, garantizando a disponibilidá dos recursos humanos, técnicos, materiales y económicos necesarios pra fer del museo un centro de referencia pral estudio del patrimonio material y inmaterial del occidente d'Asturias y un vector de medría cultural, económica y social».
Por su parte, los populares, piden reformar el punto «terceiro» para «asegurar que se manteña el legao de Pepe el Ferreiro, aumentando a inversión pública neste museo pral ano 2021, y anos sucesivos, establecendo un plan d’inversióis plurianual, de tal xeito que se garanticen as condicióis indispensables pra desenvolver el trabayo científico necesario da institución, y se manteñan úas condicióis de trabayo pra os trabayadores y trabayadoras del museo que yes deixe seguir fendo el sou llabor cua dedicación actual».
Lo cierto es que si el PP se opone de forma intensa al uso del asturiano en el parlamento, hasta el punto de que en la pasada legislatura su anterior presidenta Mercedes Fernández se vanaglorió de que había vetado su uso hasta conseguir que sólo se usar el castellano y además ha llevado a los tribunales, con éxito. varias iniciativas municipales de normalización del uso de la llingua en distintos concejos, el uso de la variante de gallego asturiano no provoca tanto reparos. En noviembre del año pasado el diputado del PP, Álvaro Queipo, usó la fala en una intervención a cuenta una iniciativa en la que defendía el mismo trato para la denominaciones «Ría del Eo» y «Ría de Ribadeo» sin quejas de ningún diputado salvo los de Vox.