La plataforma Swimmy ofrece la opción de disfrutar de este servicio
21 ago 2020 . Actualizado a las 08:54 h.Las piscinas se han convertido prácticamente en un artículo de lujo en el verano del coronavirus. Las limitaciones de acceso a las instalaciones públicas, los controles de aforo en las playas y los cambios en las vacaciones -viajes por el interior del país en lugar de salidas al extranjero- han provocado que cada uno se las haya ingeniado como ha podido para refrescarse. Nada más terminar el confinamiento, las piscinas se agotaron en las tiendas y las redes sociales se llenaron de imágenes de artilugios caseros que intentaban imitar estas construcciones. Ahora, la novedad es el Airbnb de las piscinas: la plataforma Swimmy, que ya ofrece la posibilidad de alquilar piscinas privadas en Asturias.
Por el momento, la plataforma solo ofrece una piscina en alquiler en Asturias. Concretamente, en el concejo de Aller. Está «a 30 minutos de Oviedo», según puede leerse en el anuncio. La propietaria destaca que se trata de una instalación «con vistas a las montañas asturianas?,? limpia,? cubierta con una cúpula que conserva el calor (se abren las ventanas)».
También dispone de un pequeño jardín para tomar el sol?,? con barbacoa?,? horno de leña y mesa merendero grande y techada. Hay 2 tumbonas y 1 hamaca; los horarios son: mañanas de 11:00 a 15:00 y tardes de 16:00 a 20:00 y los sábados y domingos solo se aceptan grupos con un mínimo de seis personas. El precio, 12 euros por persona para cada uno de los turnos.
Por los comentarios que han dejado los usuarios que ya han alquilado las instalaciones, su experiencia ha sido satisfactoria y son varios los que aseguran que repetirán.
Negocio en alza
Swimmy empezó en Francia hace tres años y se instaló en España el verano pasado. Entre los dos países suman más de 3.000 piscinas y 100.000 usuarios. Según la plataforma ambos países son los que mayor número de piscinas concentran de toda Europa.
Indican que «la demanda se ha cuadriplicado este año debido a las circunstancias». Entre los usuarios destacan que, además de parejas o pequeños grupos, empiezan a crecer las familias o amigos que quieren pasar tiempo juntos «pero también despedidas de soltero y hasta bodas». Ahora el interés de Swimmy pasa por introducirse en el mercado americano, «con más de 11 millones de piscinas privadas».