El comité de empresa pide la intervención del Estado. «La carga de producción es mínima», resalta José Manuel Gómez de la Uz
29 may 2020 . Actualizado a las 08:52 h.El devenir de los acontecimientos en la empresa Alu Ibérica (antigua Alcoa) tras la adquisición de la misma por parte de Grupo Industrial Riesgo está sumiendo en el «desánimo total» a la plantilla de la factoría avilesina que no ve un proyecto de futuro para la fábrica. Desde el comité de empresa más bien se considera la operación «una estafa» o una «venta fraudulenta» en la que «el Gobierno estatal tuvo que ver» y, por tanto, con la que los trabajadores se sienten engañados. Así, reclaman al ejecutivo de Pedro Sánchez y a la ministra Reyes Maroto que se involucren e intervengan las plantas de Avilés y A Coruña «para que se arregle esta situación», manifiesta el presidente del comité, José Manuel Gómez de la Uz.
El mismo asegura que el desconocimiento que los 280 trabajadores tienen de la circunstancia es tal que «nos podemos esperar cualquier cosa», desde el cierre de un día para otro de la factoría hasta «que un día nos levantemos y seamos otros». Asegura que la situación es «bastante insostenible» en la planta en tanto que «no entra materia prima» y que la carga de trabajo se limita a la fundición, por lo que «la carga de producción es mínima» y una parte de la plantilla está sin carga de trabajo.
Para el presidente del comité, José Manuel Gómez de la Uz, lo que se ha producido en la operación es «una estafa monumental» en la que la plantilla es la gran perjudicada después de la lucha que llevaron a cabo por mantener la actividad de la empresa cuando la pretensión de Alcoa era cerrar. «Los trabajadores decidimos no cobrar indemnizaciones y buscar la actividad para las factorías, lo cual pensábamos que se estaba llevando bien a cabo, tanto por el vendedor, que fue Alcoa, como por el Gobierno de España, que lo estaba avalando», señala De la Uz, que a la vista de los acontecimientos asegura que lo que hizo Alcoa buscar «simple y exclusivamente un socio inversor-liquidador» para que la empresa aguantara dos años «pero no para buscarle un futuro».
El representante de los trabajadores de Alu Ibérica considera que «todo esto ha roto» y que a la plantilla se la está dejando en «una indefensión total». «Por lo tanto, nosotros, ahora mismo, lo único que pedimos, exigimos al Gobierno que, ya que la ha liado el Gobierno que la ministra Reyes Maroto ha sido partícipe de que esta gente esté aquí, pues que actúe y que a través de la SEPI intervenga las plantas y que se busque una solución para que, de verdad, en un tiempo medio tengamos un inversor de verdad con garantías», reivindica De la Uz, que no oculta que a los trabajadores «nos han quitado la ilusión».
Además, el presidente del comité de empresa de Alu Ibérica se queja de la falta de información que están sufriendo de lo que está pasando y desconfía de la campaña de comunicación que está haciendo el Grupo Industrial Riesgo, una campaña que califica de «poco creíble» si llevaba desde el mes de septiembre negociando con Parter Capital. Y es que en las últimas horas la compañía ha apuntado que tiene dudas sobre la valoración real de las plantas de Avilés y A Coruña denunciando «prácticas contables cuestionables».
Pese a todo, y teniendo en cuenta la situación del estado de alarma en el que aún se encuentra Asturias por la crisis sanitaria del COVID-19, José Manuel Gómez de la Uz ha descartado llevar a cabo movilizaciones como las que están llevando a cabo los trabajadores de la planta de A Coruña, que en la mañana de este jueves salían a la calle para reclamar que se garanticen sus empleos. Lo hicieron con una marcha con sus coches partiendo desde la planta en la que trabajan y circulando por la principal avenida de Arteixo para llegar a la subdelegación del Gobierno. El presidente del comité de la factoría avilesina aboga por «ver los hechos como se dan».
IU pide al Gobierno que garantice el futuro de Alu Ibérica
A la vista de los acontecimientos, Izquierda Unida de Asturias ha registrado una Proposición no de Ley (PNL) «instando al Gobierno de Asturias a emplazar al Central para que adopte cualquier medida a su alcance para garantizar el futuro de la planta de Alcoa en Avilés». La portavoz de la formación, Ángela Vallina, y el también diputado Ovidio Zapico, se reunieron este jueves con el comité de empresa a quienes trasladaron la iniciativa que incluye también «la gestión directa de las factorías por parte del Estado hasta que se logre una solución que asegure el cumplimiento de los imprimidos suscritos en su día entre la empresa, y su plantilla con el aval del Ministerio de Industria».
Ovidio Zapico manifestó su preocupación ante la situación de incertidumbre por la que atraviesa la compañía y exigió «responsabilidad» al Ministerio de Industria como garante de los acuerdos suscritos. «Hemos visto como durante todos estos meses desde que se produjo la venta de Alcoa el verano pasado a este nuevo grupo inversor, no se ha materializado nada de lo que en aquel momento se había acordado; no se ha materializado aquel plan de futuro que los trabajadores habían consensuado y como de nuevo resurgen, ante una supuesta nueva venta, muchísimas Incertidumbres ante el futuro de esta actividad», señalaba el diputado regional.