Asturias ya sabe las cuatro categorías para la desescalada

La Voz

ASTURIAS

El consejero de Salud, Pablo Fernández Muñiz.
El consejero de Salud, Pablo Fernández Muñiz.

El desconfinamiento podrá tener grados asimétricos pero criterios compartidos según se fijó en el Consejo Interterritorial de Sanidad

24 abr 2020 . Actualizado a las 21:33 h.

La desescalada, el desconfinamiento de la cuarentena frente a la epidemia de coronavirus podrá tener grados distintos en cada uno de los territorios pero todos ellos deberán guiarse por criterios comunes y compartidos. Los trabajos para fijar esos requisitos comenzaron esta tarde tras la reunión del Consejo Interterritorial de Sanidad que celebraron telemáticamente los responsables autonómicos y el Ministro de Sanidad, Salvador Illa. En la cita también participó la vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera.

El consejero de Salud asturiano, Pablo Fernández Muñiz, señaló que el Ejecutivo central había ofrecido a las comunidades una guía para comenzar los trabajos que deberá organizarse sobre cuatro categorías. «Una es la capacidad del sistema de salud para poder atender adecuadamente a todas las personas, otro es el seguimiento de la epidemia, la vigilancia epidemiológica; otro tiene relación con las contenciones de las posibles fuentes de contagio que puedan surgir y que puedan ser origen probable de un repunte si no se realizan esas contenciones adecuadas; y otra que tiene que ver con las medidas de protección colectiva».

El consejero recalcó que con esos requisitos se establecerá un plan para la desescalada y abrir así un periodo de transición «que será asimétrico», es decir que «no tienen que entrar todas las medidas a la vez en todas las provincias de España, pero sí todas tienen que entrar en base a unos indicadores objetivos que todas las comunidades compartamos». El propósito es unificar los criterios para la salida de la cuarentena y de manera que cada territorio no puedan fijar unos distintos pero sí que habrá grados diferentes en virtud de la situación de cada uno de ellos.

A lo largo de la mañana se informó de que la concreción de estas medidas vendría establecida por una serie de mediciones en las que Asturias aparecía entre el grupo de comunidades más aventajadas. Por un lado y respecto a la capacidad de atención sanitaria, el Principado cuenta con un amplio porcentaje de camas UCIs libres, el 65%. Asturias también está entre los territorios en los que durante al menos dos semanas la tasa de contagios se encuentra más contenida aunque todavía no llega, por muy poco, a la tasa de incidencia considerada óptima, la de  2 casos nuevos por cada 100.000 habitantes.

Todas las medidas se desplegarán en un clima de máxima prudencia. Por la mañana, el propio consejero asturiano advertía que a día de hoy por muy bien que se hagan las cosas la probabilidad de que haya un repunte es «altísima».

Desescalada asimétrica

Asturias no habló de peticiones concretas pero, según recogió la agencia EFE, otras comunidades plantearon sus propuestas al Ministerio. Buscando un equilibrio, Gobiernos autonómicos y municipales preparan ya sus propios planes de desescalada con la mirada puesta en mayo o incluso en la próxima semana, como es el caso de Canarias, la comunidad con menor incidencia de la pandemia, que propone que se permitan salidas por turnos y edades, se abran comercios con controles de acceso y se pueda hacer deporte al aire libre en horarios restringidos.

Canarias y el resto de comunidades han expuesto sus estrategias este viernes en una reunión con el ministro de Sanidad, Salvador Illa, responsable en último término de dar el visto bueno a esas medidas y al que Gobiernos como el vasco y el catalán han reclamado mayor autonomía en este proceso, que se espera que sea gradual, asimétrico y lento.

Esa asimetría se daría incluso dentro de los propios límites territoriales de las autonomías, como propone la Xunta de Galicia, con una división «por zonas y subzonas», habida cuenta de la notable diferencia entre la situación del mundo rural y la de las ciudades. Cantabria, Murcia, Aragón o Extremadura también se han pronunciado en ese sentido.

En Madrid, la Comunidad más golpeada por el virus, se ha sugerido que puedan pasear las embarazadas o personas que por sus circunstancias lo necesiten; y el ayuntamiento de la capital proyecta ampliar las terrazas de los bares, reducir aforos e instalar mamparas, para recuperar cuanto antes la actividad de la hostelería, uno de los sectores más afectados por la crisis sanitaria.

Andalucía plantea la apertura progresiva y con limitaciones de cara al verano de restaurantes, hoteles y playas -Marbella y Mijas quieren reabrirlas desde el domingo para los paseos de los niños-, y ha propuesto encabezar la desescalada en municipios y comarcas sin casos, en provincias como Almería y Huelva, contemplando también la vuelta a las clases a mediados de mayo. Almuñécar (Granada) se ha ofrecido como destino turístico «piloto».

Más cautela muestran otras administraciones, como la de Castilla y León, que pide calma para desescalar hasta que se acabe de controlar la epidemia, o Castilla-La Mancha, que confía en que el proceso se fundamente en criterios sanitarios y el desconfinamiento no se convierta en una suerte de reinos de taifas.

La señal que marcaría el principio del fin del confinamiento era la salida de los niños, que finalmente se producirá este domingo. Los menores de 14 años podrán salir, siempre acompañados de un adulto, a partir de entonces diariamente, entre las 9 de la mañana y las 9 de la noche y podrán moverse y jugar, manteniendo las correspondientes distancias, en el espacio de un kilómetro alrededor de su domicilio, sin entrar en los parques infantiles.