La fábrica naviega de Ence, casi en la frontera con Galicia, contempla en su plan estratégico para 2019-2023 el proyecto para producir pasta "dissolving" destinada a elaborar fibras para ropa y otros usos
02 dic 2019 . Actualizado a las 12:05 h.Frente a nuevas necesidades surgen alternativas. A mediados de noviembre la fábrica de Ence en Navia, en el Occidente asturiano, a unos treinta kilómetros de Ribadeo, retomó su actividad habitual, la producción de pasta de celulosa y la generación de energía renovable tras concluir una parada técnica para implantar el proyecto de mejora de eficiencia y aumento de capacidad denominado «Navia 80». El objetivo: mejorar procesos industriales de la planta tras invertir unos 115 millones, de los que unos 35 fueron para mejoras medioambientales. Desde la compañía, el primer productor europeo de celulosa de eucalipto, sostienen que esta inversión permitirá mejorar la eficiencia al optimizar procesos y eliminar los «cuellos de botella» que existían en la instalación, que genera en torno a 415 empleos directos y ronda los 3.000 si se suman los indirectos e inducidos.
Este proyecto contempla una mejora en casi todos los procesos de la biofábrica que destina la pasta de celulosa en su mayor parte al mercado internacional (un 80% se exporta a través del puerto ribadense): Alemania es el principal destinatario, seguido de Francia, Austria, Italia, Polonia, Reino Unido, Eslovenia y los Países Bajos, principalmente, según confirman desde la compañía, que explora nuevos campos en busca de alternativas para cubrir necesidades actuales, como es el caso de la línea de producción de pasta "dissolving", destinada, entre otros usos, a la fabricación de fibras para uso textil. Este proyecto se encuentra en fase de tramitación y definición de los trabajos, y se proyecta dentro del Plan Estratégico para el período 2019-2023. Por ahora, según la empresa, no hay fecha definitiva para su entrada en producción.
¿Qué es la pasta "dissolving"?
"La pasta "dissolving" se utiliza como materia prima para la elaboración de viscosa o rayón, que es una fibra muy versátil procedente de la celulosa que puede imitar el tacto de la seda, la lana, el algodón o el lino. Se trata de una fibra de origen natural llamada a sustituir a las fibras de origen sintético, derivadas de petróleo, en múltiples usos, sobre todo el textil. Muchas firmas de ropa ya la están utilizando en sus creaciones", indican desde el departamento de Comunicación de Ence, destacando también que se estima que la demanda crecerá de manera importante en los próximos años en el mercado internacional "ante la imposibilidad de producir más algodón por la limitación de espacio y el rechazo a los productos derivados del plástico. Se trata de una alternativa procedente de una materia prima renovable local, que sigue los postulados de la bioeconomía y es ejemplo de la economía circular".
Se trata de una alternativa procedente de una materia prima renovable local, que sigue los postulados de la bioeconomía y es ejemplo de la economía circular
La materia prima que Ence Navia necesitará para cubrir su producción actual y para el nuevo proyecto procederá de masas de eucalipto situadas en el entorno de la fábrica naviega, tanto en Asturias (solo de la variedad glóbulus) como en Galicia (glóbulus y nitens). Explican que el proceso de fabricación de la pasta "dissolving" guarda semejanza con el de la pasta de celulosa que se produce actualmente, "aunque con ciertas especificaciones en varios puntos del proceso que suponen una mayor pureza, en cuanto a fibras de celulosa, en el producto final". Ence se encargaría de acometer el primer paso del proceso, convirtiendo la madera de eucalipto en la referida pasta, materia que sería posteriormente procesada por la industria textil para la fabricación de prendas, entre otros usos.
Ampliación y mejoras
En lo que concierne a la ampliación, desde Ence destacan la mejora de prácticamente la totalidad de los procesos, desde las etapas en el proceso de celulosa (cocción, lavado o secado) hasta la captación de agua, el proceso de depuración del efluente o la mejora de las calderas de generación de energía renovable. "La inversión supuso la modernización de una gran parte de los equipos, lo que permite a la planta ser la más eficiente en materia energética y más limpia desde el punto medioambiental", explican las mismas fuentes. En cuanto a mejoras medioambientales, destacan la reducción del consumo de agua, con la puesta en marcha de tecnologías más eficientes; la optimización de la caldera de recuperación parar mejorar el filtrado de partículas y reducir las emisiones; la eficiencia energética y el control de gases, y la mejora de la calidad del efluente, "con Navia80 se moderniza la estación depuradora de aguas residuales industriales de Ence Navia, construida y puesta en marcha en el año 2013. El afán de la compañía es la mejora continua y por ello se ha vuelto a diseñar y ejecutar una nueva inversión para garantizar la mejor calidad en el efluente de la planta. Esta mejora implica la implantación de un nuevo tratamiento primario, mediante un sistema de flotación por aire disuelto (DAF). Se trata de un sistema especialmente diseñado para el tratamiento de aguas de la industria papelera y que cuenta con numerosas referencias en todo el mundo. Además, el proyecto contempla la ampliación de la capacidad del tratamiento biológico", señalan desde Ence.
Tras la parada técnica realizada recientemente en Navia, Ence está en condiciones de fabricar 80.000 toneladas más de celulosa al año, lo que elevará su capacidad total hasta las 620.000 toneladas anuales.