La discípula aventajada de Severo Ochoa fue una de las pioneras en la investigación bioquímica en España
07 nov 2019 . Actualizado a las 16:58 h.La científica asturiana Margarita Sala ha fallecido esta mañana en Madrid tras sufrir una parada cardiaca. Las redes se han llenado en apenas unos minutos de mensajes de despedida y de sorpresa ante su repentina muerta. Entre ellas, la exministra Cristina Garmedia, que la considera su maestra.
Entre sus logros destaca un descubrimiento vinculado a la biotecnología y patentado por el CSIC que permite amplificar el ADN de manera sencilla, rápida y fiable y que es últil en medicina forense y en oncología. Salas se convirtió en una científica destacada cuando nadie pensaba que la mujer valía para la investigación. Lo contaba ella misma en una entrevista reciente, concedida a La Voz. Se convirtió, por tanto, en el referente para miles de jóvenes estudiantes que han querido seguir el camino que les dictaba su vocación.
Hace apenas mes y medio había sido distinguida en Viena con el premio Inventor Europeo 2019 al conjunto de su carrera, por la Oficina Europea de Patentes, debido a su papel pionero en la investigación genética. Salas también había ganado el premio Popular de la gala de los inventores europeos, elegido por el público entre los 15 finalistas a través de un sistema de votación en internet durante las semanas previas a la ceremonia.
Margarita Salas Falgueras estaba apunto de cumplir 80 años. La discípula aventajada de Severo Ochoa había nacido en Canero, Valdés, el 30 de noviembre de 1939. Esta bioquímica se licencióe en la Universidad Complutense de Madrid. Después trabajó con Severo Ochoa en los Estados Unidos. Era la actual presidenta del Patronato de la Fundación Severo Ochoa, y seguía como profesora vinculada"Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa de Madrid. Era académica de la Real Academia Española desde 2003. En 2016 se convirtió en la primera mujer en recibir la Medalla Echegaray, otorgada por la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales.
El curriculum de Salas es muy extenso. Fue nombrada Doctora Honoris Causa por la Universidad de Oviedo en 1996 y entre sus numerosas distinciones cuenta con la Medalla de Asturias de 1997. Nunca ha dejado de trabajar. Cuenta con más de 350 publicaciones en revistas o libros internacionales y unas diez en medios nacionales. Posee, además, ocho patentes.