La plantilla recibió la solidaridad de los socialistas
04 oct 2019 . Actualizado a las 22:30 h.La marea naranja de Vesuvius llegó hasta el Corredoria Arena. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, comenzaba su carrera preelectoral y la plantilla de la factoría de Langreo no podía perder la oportunidad de recabar de primera mano su apoyo. Así, los primeros en recibir a Pedro Sánchez fue precisamente un grupo de trabajadores de Vesuvius, con sus hijos y ataviados con sus reconocibles camisetas. Llevaban una en la mano. Esa era la destinada a Sánchez. Habló en su nombre José Enrique Ruiz García, quien reclamó al presidente que les ayude a mantener abierta la fábrica y a conservar sus puestos de trabajo. «Estoy en ello», esa fue su concisa respuesta. Después posó con ellos.
Ya en el estrado, hizo referencia a su lucha y se comprometió a trabajar por el empleo digno y por el sector industrial Ambas premisas son aplicables a Vesuvius. Adrián Barbón también se ha presentado como su firme defensor. Trasladó la solidaridad de la FSA para con los trabajadores y sus familias, lo que encedió los ánimos del Corredoria Arena, llena de más de 1.800 convencidos.
La marea naranja se ha granjeado la simpatía de la sociedad asturiana. Mientras esperaban la llegada del presidente, en la puerta del auditorio, recibían palabras de ánimo, palmadas en la espalda y miradas cómplice de simpatizantes y votantes socialistas que comparten sus miedos y sus esperanzas.