La compañía experimenta este proyecto en Pumardongo, en el concejo de Mieres. Ha invertido 90.000 euros
04 oct 2019 . Actualizado a las 20:49 h.Evitar las nubes de polvo y la contaminación ambiental en el entorno de las escombreras mineras. Esa es la iniciativa que ha adoptado Hunosa y que ya está probando en Pumardongo, Mieres. La compañía explica que se trata de un «innovador plan de control y mejora medioambiental» en el que ha invertido 90.000 euros en los tres últimos meses. Ha diseñado un programa de actuación vinculado a las predicciones meteorológicas, que anticipa las necesidades de cada momento y, por tanto, las acciones a acometer en el entorno para prevenir situaciones como las que se vivieron, por ejemplo, durante los últimos temporales de viento que vivió Asturias.
Además del control de los cambios meteorológicos, Hunosa mantiene un plan de riego continuo con camiones cuba en las instalaciones, tanto en las zonas de vertido como en los viales de circulación, que se adapta, con los refuerzos necesarios, a las necesidades que anticipan las predicciones. El riego se somete a una supervisión y vigilancia continua mediante aplicaciones web, para adaptarlo a las necesidades de cada momento, anteponiéndose en lo posible a los temporales.
Hunosa ha llevado a cabo más medidas preventivas. Ha extendido una capa compactada de estéril de mina, con un espesor de 20 centímetros, sobre la plataforma actual de la escombrera, para evitar la generación de finos de polvo e impedir la creación y avance de remolinos de viento. Durante los dos últimos meses, la hullera ha extraído y transportado hasta la cota superior de la escombrera un total de 28.350 metros cúbicos de estéril de mina que se encontraba en otros depósitos.
Además, se han adoptado medidas adicionales, analizando la posible utilización de productos supresores de polvo que son vertidos desde los camiones cuba en forma de aditivo durante el riego. También dentro de las labores preventivas, se ha implantado un plan periódico de desbroces, tala y limpieza en los accesos, pistas, cunetas y taludes, con la finalidad de mantener limpia la instalación tanto para evitar la generación y propagación del polvo como para prevenir posibles incendios.
Para completar las acciones, Hunosa mantiene un plan de mejora medioambiental continua en Pumardongo que incluye pruebas de fertilización sobre distintos materiales mediante ensayos de hidrosiembra, que permitirán optimizar los trabajos de rehabilitación y revegetación de la superficie de la escombrera y evitar así, con el crecimiento de vegetación, la generación de polvo y corrientes de remolinos.