La estrategia de la Universidad impulsa el grado abierto formado con asignaturas de cualquier carrera
ASTURIAS
![selectividad, pau.La Universidad de Oviedo organiza la EBAU en Asturias](https://img.lavdg.com/sc/XOGaUtVUMQRK7SWFAKAEV58B0Uc=/480x/2019/06/05/00121559747359389748777/Foto/uniovi.jpg)
La comisión de titulaciones ya cuenta con un borrador que presentará «en breve». Criminología y Ciencia e Ingeniería de Datos serán los primeros en implantarse. En plena tormenta por Bellas Artes, la institución reclama sus tiempos
11 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.En plena tormenta mediática y localista por la implantación del grado de Bellas Artes, el tiempo parece discurrir a otro ritmo en la Universidad. Nadie se decanta por ningún concejo y tampoco se hablar de la urgencia de este grado. La institución ya tiene experiencia. Lleva más de un año sometida a la misma presión por el título de Deportes y Actividad Física y sigue sin deshojar la margarita. Lo aclara el propio rector, Santiago García Granda: «Es una decisión que conlleva mucho trabajo y necesita de un análisis estratégico y global de la Universidad, desde la propia Universidad. Y luego un procedimiento y unos trámites que tampoco hay que olvidar». En eso están inmersos.
La comisión estratégica de estudio de titulaciones ya ha parido un borrador, es decir, ya existe un plan estratégico que define qué titulaciones superiores son interesantes para Asturias, tanto por la demanda como por los recursos disponibles. Incluye un análisis pormenorizado de las cinco ramas del conocimiento: Arte y Humanidades, Ciencias, Ciencias Sociales y Jurídicas, Ciencias de la Salud e Ingeniería y Arquitectura. Han trascendido alguno de sus contenidos. Incorpora aportaciones novedosas, como por ejemplo la puesta en marcha de un grado y un máster abiertos en la Universidad asturiana. ¿Qué son los grados abiertos? Es un tipo de formación que permite a los estudiantes escoger libremente asignaturas de diferentes carreras, normalmente, durante el primer y segundo año de carrera para después decidirse por una especialidad. Esto permite que el alumno que tiene dudas a la hora de decantarse entre varias titulaciones puede conocer aspectos básicos de esas disciplinas durante los primeros cursos y luego seguir el itinerario que más le ha convencido. En España, ya existen experiencias de este tipo, como en la Pompeu Fabra.
Ese borrador contiene un plan estratégico a medio y largo plazo, que será dinámico, tendrá su memoria económica y se analizará con el Gobierno del Principado de Asturias en la comisión paritaria que se ha establecido y que está en funcionamiento de hace año más de un año. En ese organismo será donde se acuerden los planes de implantación a corto plazo, ha adelantado García Granda. Antes el proyecto se someterá a la comunidad universitaria. Aunque todavía no existe una fecha concreta para su puesta de largo, el rector reconoce que será «en breve».
No obstante, al margen de la polémica de Deportes y Bellas Artes, con numerosas novias sobre el mapa, hay algunas decisiones más claras. Es inminente la puesta en marcha de dos grados distintos el de Ciencia e Ingeniería de Datos, y el de Criminología. La Facultades y los departamentos también están trabajando en varios dobles grados, sin olvidar nuevos máster y más títulos propios. La perspectiva es mucho más amplia.
El proceso burocrático actual deja claro que la potestad para decidir todo lo que tenga que ver con los títulos es de la propia Universidad. El primero organismo que tiene que aprobar ese proyecto es el Consejo de Gobierno de la institución. La propuesta debe pasar después a la ANECA, Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA), un organismo que depende del de Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Si supera este trámite, entonces llega al Gobierno del Principado, para su visto bueno definitivo. El rector recuerda todo este procedimiento cuando alguien le pregunta por esa disputa de títulos a la que se han lanzado, en mayor o menor medida, Oviedo, Gijón, Avilés y Mieres. La lucha no solo se libra entre ayuntamientos sino también entre partidos políticos dentro de una misma corporación, lo que complica entender la fotografía en toda su dimensión.