La presidenta de la patronal, Ana López-Cancia, afirma que en su opinión es incluso mayor que entre asalariados
07 ago 2019 . Actualizado a las 14:01 h.La presidenta de la Asociación Empresa Mujer Asturias (ASEM), Ana López-Cancio, ha advertido este miércoles en Gijón de que las mujeres que son empresarias también sufren la brecha salarial, al ganar menos que sus homólogos hombres.
Una circunstancia que ha vinculado a que la mujer tiende a valorar menos su trabajo y a ponerle precio por debajo de lo que lo haría un hombre. En este sentido, ha abogado por combatir la brecha salarial. Y aunque ha reconocido que no hay ningún estudio oficial, ha opinado que esta brecha es incluso mayor que entre las mujeres y hombres asalariados.
Así lo ha manifestado, junto a la presidenta de BPW, Silvia Vigatá, y la directora del Instituto Asturiano de la Mujer, Almudena Cueto, antes de participar en la XVI Jornada de Empresarias y Profesionales-ASEM, en el marco de la 63 Feria Internacional de Muestras de Asturias que se celebra en el recinto ferial gijonés Luis Adaro.
Por otro lado, ha apuntado que las empresas asturianas han mantenido durante estos años de crisis su porcentaje en el PIB, a lo que ha pedido que «no se nos deje de lado» y que se entienda cuál es su papel.
Ha defendido, en esta línea, que las mujeres empresarias tengan la misma representatividad que los hombres. «No nos achanta nada, lucharemos lo que tengamos que luchar», ha asegurado López-Cancio.
Vigatá, por su lado, ha anunciado que la federación que representa ha sido elegida por la ONU para ser «la voz de las mujeres españolas», al pasar a tener estatuto especial consultivo. Un hecho que ha considerado que es «un gran reconocimiento» por tener palabra directa con Naciones Unidas.
Unido a ello, ha hablado de la «revolución femenina». «Es momento de que rompamos todos los estereotipos», ha apuntado, al tiempo que ha animado a las mujeres a buscar su lugar. Para ella, el siglo XXI es el momento de las mujeres. Sobre la brecha salarial, ha visto importante el asociacionismo de cara a ser consciente del valor de su trabajo.
Cueto, en su caso, ha opinado que la falta de valoración social y de reconocimiento de las propias mujeres contribuye a esa brecha salarial. «Muchas veces no nos atrevemos a poner precio en las facturas», ha apuntado, al tiempo que ha indicado que eso se traduce en desigualdades en los salarios.
Ha defendido, asimismo, que las mujeres son capaces de hacer lo mismo que los hombres pero hace falta que la sociedad valore la economía liderada por estas. Se ha preguntado, en este sentido, si es más importante para la sociedad una empresa tecnológica a una de cuidados.