El candidato socialista comienza hoy la ronda de contactos con los partidos
02 jul 2019 . Actualizado a las 12:07 h.Adrián Barbón comienza hoy la cuenta atrás que le llevará previsiblemente el día 20 de julio a comprometer su cargo en la Junta. La ronda de contactos con los grupos políticos arranca hoy con los encuentros con PP, Ciudadanos y Podemos. Desechado cualquier tipo de acuerdo con los populares, el candidato socialista cotejará los puntos en común de su ideario cara a cara con los diputados naranjas y morados, que podrían ser claves. Ambas fuerzas han tendido la mano a un posible acuerdo de investidura aunque las condiciones de Ciudadanos (que Barbón reniegue de Pedro Sánchez) se antojan irreales y la relación con Podemos amenaza con prolongar la borrasca que presidió la anterior legislatura. Barbón también ha dejado claro cómo será el día a día con Vox: ni siquiera les ha invitado a la ronda.
La FSA ha dejado en las últimas semanas y también durante la campaña electoral pistas sobre cuál sería su estrategia de pactos. Barbón siempre se ha mirado hacia la izquierda para otear su futuro. Con IU ya ha habido acuerdos en la Mesa de la Junta pero con Podemos la última negociación no dio sus frutos y se saldó con el partido naranja fuera de ese organismo. Ambas fuerzas se han culpado de la incapacidad de diálogo pero hoy tienen una nueva oportunidad. Hay que recordar que en Asturias, los diputados no pueden votar en contra de un candidato, lo que facilita notablemente la elección final.
Lorena Gil llevará ante Barbón una serie de puntos de acuerdo. Propondrá una rebaja general de sueldo de los diputados (no cobrar más de 2.000 euros), medidas en materia laboral e industrial (deslocalizaciones), avances en derechos sociales, sanidad o educación, eliminación del peaje del Huerna o mejora de las Cercanías. Daniel Ripa sostiene que el PSOE apuesta por una investidura en minoría pero que acuden a la cita con los brazos abiertos. Barbón y Gil cotejarán los puntos en común de sus programas en una negociación que corre paralela en el tiempo a la de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
Mientras Teresa Mallada ya anunció que el PP no presentará candidatura y que será la jefa de la oposición, Ciudadanos ha propuesto un acuerdo de estabilidad parlamentaria, aunque sus condiciones leoninas y el peso de la fallida negociación con los socialistas en Oviedo son dos serios obstáculos. Los diputados del partido de Albert Rivera mantienen que el PP es su socio preferente pero han exigido a Barbón que reniegue de Pedro Sánchez y de sus políticas de pactos con «populistas y herederos de ETA».
Barbón ya anunció en junio que la negociación en el Ayuntamiento de Oviedo iba a marcar la relación con C’s en Asturias. «Lo que pase en Oviedo influirá en la negociación autonómica», dijo. El pacto de los naranjas con el PP en la capital augura que la suma de votos para la investidura es muy remota. «Nosotros no estamos con populismos ni extremismos», afirmó Laura Pérez Macho, la portavoz de C’s. Sus cinco votos podrían facilitar la investidura de Barbón pero parece muy difícil que el acuerdo cuaje y más con la dimisión de Juan Vázquez, que siempre fue proclive a alcanzar pactos con los socialistas.
El miércoles los socialistas mantendrán encuentros con IU y y Foro en una ronda en la que, al igual que ocurrió con las negociaciones celebradas para conformar la Mesa de la Junta, el PSOE ha excluido a Vox, toda una declaración de principios. Los socialistas ya han logrado acuerdos (una tradición en Asturias) con la coalición de izquierdas en la constitución de los ayuntamientos y en la Mesa de la Junta, y es previsible que Barbón consiga el voto afirmativo de los diputados de IU. Esos mismos parlamentarios compartirán finalmente grupo mixto con Foro y Vox.