Los médicos alertan del riesgo de colapso por la nueva receta de ibuprofeno y paracetamol

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Ibuprofeno y paracetamol
Ibuprofeno y paracetamol

El Sindicato Médico advierte de que se producirá un aumento de las peticiones de consulta que sobrecargará el sistema. Explica que hay presentaciones de estos medicamentos con dosis inferiores del compuesto que se podrán seguir comprando sin prescripción

12 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Comprar ibuprofeno de 600, paracetamol de un gramo, Omeprazol o algunos antihistamínicos en cualquier farmacia sin receta médica era hasta ahora una práctica habitual. Sin embargo, lo de hacer la vista gorda en los dispensarios cuando solicitamos cualquiera de estos productos sin prescripción médica ha llegado a su fin. Si bien la Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos ya obliga desde 2015 a vender determinados fármacos con receta para reducir la automedicación y poner coto al caos farmacológico de nuestro país, lo cierto es que la cosa se ha tornado seria al ponerse en marcha el Sistema Español de Verificación del Medicamento, un mecanismo del estado para cumplir con la Directiva antifalsificación de la Unión Europea.

El caso es que la necesidad de disponer de una receta para comprar determinadas presentaciones de medicamentos tan populares como el paracetamol o el ibuprofeno conlleva un «riesgo de colapso en Atención Primaria» del que ya advierte el Sindicato Médico. El responsable de Atención Primaria en el Simpa, Carlos Fernández Moro, señala que el número de consultas irá en aumento por la gente que acuda a recetar y que eso sobrecargará el sistema y acrecentará las listas de espera. «Esta medida repercutirá en Atención Primaria, en donde los médicos cada vez tendrán más gente en las consultas para cosas banales», manifiesta el mismo, que apostilla que «para los médicos es una faena gordísima».

Dosis inferiores, pero suficientes

Según explica, la ciudadanía desconoce por el momento que en las farmacias sí les venderán sin receta esos medicamentos pero en presentaciones de menos dosis. Así, el ibuprofeno de 400 miligramos o el paracetamol de 650 o 500 miligramos «podrán comprarlo sin problema», informa Fernández Moro, que añade que «para muchas patologías esas dosis son suficientes». Su preocupación en este sentido es que se produzca una mala automedicación si la persona decide duplicar la dosis y toma un exceso de estos medicamentos. En este sentido, confía en que «los farmacéuticos tienen la preparación suficiente» para asesorar al cliente ante la compra de estos fármacos.

Desde el Simpa se muestran convencidos de que «se va a producir un aumento de las consultas evidente» porque se trata de medicamentos que «son baratos» y que son productos de referencia para la ciudadanía difíciles de sustituir por otros. Así, ponen como ejemplo que el Nolotil es un medicamento que sufre desabastecimiento, además de haberse dado casos de efectos secundarios; o que la Aspirina también podría ser restringida.