La empresa ha advertido de que no trasladará su fábrica de Pontevedra a otra ubicación por no ser «viable económicamente»
16 may 2019 . Actualizado a las 20:33 h.La empresa Ence Energía y Celulosa ha advertido de que no trasladará su fábrica de Pontevedra a otra ubicación en Galicia cuando termine su concesión, otorgada por el Gobierno de Mariano Rajoy hasta 2073 y que se encuentra en litigio judicial. La compañía, a través de un comunicado, ha señalado que «no existen» en Galicia localizaciones «alternativas» para su actividad y ha defendido además que ese hipotético traslado «no sería viable económicamente».
El delegado de Ence en Galicia, Antonio Casal, ha reiterado que «no es posible» construir una nueva fábrica que cumpla con los «requisitos de rentabilidad mínima» que exigiría su plan de viabilidad, informa Efe. Casal ha explicado que el sector de la celulosa en el que trabaja la compañía es «altamente competitivo», por lo que la fábrica «necesita tener unos costes que aseguren su supervivencia» y las condiciones para ello, ha añadido, «no se dan en Galicia». Ence señala que puede operar en este mercado con una planta ya existente y con las inversiones necesarias para mantener su competitividad y su comportamiento ambiental, pero la construcción de una nueva fábrica supondría un gasto de 700 millones de euros «que no se pueden rentabilizar».
«La madera en Sudamérica crece el doble de rápido y cuesta un tercio de lo que en Galicia y la mano de obra, una cuarta parte», ha subrayado el delegado de Ence, que reitera que «no hay una alternativa viable» para trasladar su fábrica en Galicia. El cierre de la planta de Pontevedra y ante las «limitaciones» de la fábrica en Navia (Asturias), según Ence, provocará la pérdida de empleo para más de 5.100 familias en Galicia y supondrá una «dramática» caída del precio de la madera en el sector forestal gallego, «llevando a la ruina» a miles de productores y causando el «abandono» del monte.