El alcalde de Proaza contradice la primera versión del accidente en la Senda del Oso

Carmen Liedo

ASTURIAS

Lugar en el que cedió la barandilla de la Senda del Oso y el ciclista fallecido cayó sobre la carretera
Lugar en el que cedió la barandilla de la Senda del Oso y el ciclista fallecido cayó sobre la carretera La Voz del Trubia

Un ciclista falleció en la popular vía verde

13 may 2019 . Actualizado a las 16:30 h.

El alcalde de Proaza, Ramón Fernández, ha explicado este lunes que el tramo de la Senda del Osos en el que se produjo el accidente del ciclista vallisoletano estaba señalizada con una cinta de peligro y que, por tanto, la caída no se pudo producir como consecuencia del mal estado de la valla «porque no la había». Según ha afirmado el regidor, en la zona había un poste al cual estaba amarrada la cinta de peligro por estar en obras después del deterioro que sufrió el tramo por la inclemencias meteorológicas del invierno, sobre todo, por los argayos que generó la nevada del pasado octubre. «El accidente se produjo en un zona en obras, que estaba señalizada con un cinta de peligro porque no había valla. Había un poste al que estaba amarrada la cinta», ha manifestado a La Voz de Asturias el alcalde que, en primer lugar, ha lamentado el fallecimiento de una persona y trasladado el pésame a sus familiares.

Fernández ha relatado que el tramo está en obras y señalizado con una cinta desde que la barandilla desapareciera como consecuencia de los argayos que se produjeron el pasado otoño, en concreto, cuando la gran nevada de octubre. «Cuando se retiraron los argayos se puso la cinta advirtiendo del peligro y se estaba viendo la forma de reponer la valla y el firma», ha dicho el regidor, insistiendo en que «en ningún caso fue culpa de la valla porque no la había», reconoce con pesar por la desgraciada circunstancia.

Asegura que los cuatro ayuntamientos que conforman la Mancomunidad del Valle del Oso (Proaza, Teverga, Quirós y Santo Adriano), de la que depende la senda, aunque el ente supramunicipal está en fase de disolución, tratan de reparar «todo lo que se puede». Sin embargo, no obvia que son administraciones «con recursos escasos» para las dimensiones de una infraestructura que, además, tiene sus riesgos porque «es una senda de montaña que está expuesta a desprendimientos y, de vez en cuando, hay tramos en los que caen piedras», advierte.

«Es una senda que requiere muchos recursos y no disponemos de ellos», manifiesta Ramón Fernández, que añade que se hicieron esfuerzos para ir abriendo tramos cuando quedaron afectados por la climatología y que en ello participó mucha gente de la zona, aunque admite que todavía quedaron cosas por hacer que van subsanando «según podemos». Según dice, actualmente estaba previsto iniciar la reposición de parte del vallado con material que ya esta comprado, aunque el alcalde del Proaza considera que «no va a alcanzar para todo».

En su opinión, el de ayer fue «un mal día» por el accidente mortal que tuvo lugar en la Senda del Oso a su paso por Proaza, en el que dice que se producen la mayoría de percances porque «es el concejo de los cuatro que la componen que más kilómetros de senda tiene con diferencia».