«IU tiene que mantener su identidad, propuestas y seriedad al margen de Podemos»

J. C. Gea

ASTURIAS

La eurodiputada de IU Ángela Vallina.La eurodiputada de IU Ángela Vallina
La eurodiputada de IU Ángela Vallina

Ángela Vallina, candidata de IU a la presidencia del Principado, apuesta por la identidad de IU, la unidad interna y el respeto a los militantes para encarar la campaña a las próximas autonómicas

11 mar 2019 . Actualizado a las 20:50 h.

A falta de conocer el voto por correo, Ángela Vallina es ya la candidata de IU a la presidencia del Principado de Asturias. La eurodiputada y exalcaldesa de Castrillón se impuso en las primarias de la federación asturiana a las candidaturas del coordinador regional, Ramón Argüelles, y de Carmen Conde, y afronta una campaña compleja dentro y fuera de la coalición. Vallina desmenuza sus posiciones y sus respuestas a los diferentes retos que se abren en ambos frentes, delimitados por factores como la posición de Argüelles -en fase «de reflexión» tras su derrota-, la profunda discrepancia entre IU-Asturias y la dirección federal a cuenta de la confluencia Unidos Podemos y la reciente y definitiva marcha de Gaspar Llamazares al proyecto Actúa. De entrada, la receta de Vallina es la defensa a ultranza de la identidad de IU, la disposición al diálogo después de las elecciones y el deslinde de la condición de candidato de Argüelles de su condición de coordinador, cuya posición no cuestiona la candidatura ganadora.

-Con independencia de todo ello, ¿cuestiona el resultado el liderazgo del coordinado o tiene consecuencias internas de algún otro tipo?

-Argüelles es coordinador, tiene un papel en la organización, decidió presentarse a las primarias, y cuando uno hace eso -él igual que yo o que cualquiera-, tiene que asumir que puedes ganar y que puedes perder. A partir de ahí, una cosa es la candidatura y otra la coordinación. Yo no sé muy bien lo que va a hacer. Nosotros no le pedimos la dimisión, ni muchísimo menos: esto eran unas primarias para elegir candidato o candidata para Asturias, y la responsabilidad del coordinador es dirigir la organización.

-Algo doblemente necesario en un periodo que es ya de hecho de campaña...

-Los demás partidos tienen su candidato y ya están en campaña. Nosotros también lo estamos ya. Es el momento de dejar lo interno, mirar por Asturias y mirar hacia fuera, que para eso es para lo que sirve un partido político: para solucionar problemas, para plantear propuestas y soluciones. Eso es lo que tenemos que hacer.

-Lo que sucede es que fuera hay dos cuestiones que afectan, y mucho, dentro. Primero, la discrepancia con la dirección federal de cara a las confluencias con Podemos. La militancia asturiana ha reiterado su negativa. ¿Y si la dirección, que tiene esa prerrogativa, decide desoírlo?

-Ese es el dilema que tenemos dentro y al que nos ha llevado toda esta política de alianza interna con Podemos. Yo no entiendo que entre la militancia de Asturias, como sucedió ayer también en Madrid con votos presenciales, salga el 'no' y que sin embargo se siga hacia delante. Aquí es peor todavía, porque la militancia ha dicho 'no' a la confluencia con Podemos, y sin embargo la dirección había pactado un candidato por Asturias a esa confluencia. Si la militancia ha dicho 'no', tiene que responder la dirección de Asturias, no los que nos presentamos a las primarias para una candidatura a las regionales. Es una contradicción. Me gustaría empezar la casa por los cimientos. Es decir: pacto 'sí' o 'no'; confluencia con Podemos 'sí' o 'no', y a partir de ahí hablamos. Pero si la militancia, repetidamente en Asturias, ha votado 'no', ¿cómo es que ponemos al mismo tiempo dos candidatos para confluir en esa línea? Ahora que la militancia ha dicho 'no', ¿qué vamos a hacer? Si haces una consulta a la militancia, tienes que respetar lo que sale de esa consulta. Si no, ¿para qué la haces? 

-Apela a la flexibilidad que la dirección federal ha mostrado con otras federaciones.

-Es el ejemplo de Joan Josep Nuet en Cataluña. La dirección está creando un nuevo sujeto político e irá en confluencia con ERC, un partido que respeto profundamente, pero que está a favor de la independencia, cuando IU nunca ha sido independentista sino federalista. Y no hay ningún problema ni la dirección federal se manifiesta en contra de ello. Entonces, ¿qué pasa? ¿Que hay un tratamiento distinto para unas federaciones y otras? Y por otra parte, acabamos de ver hoy en prensa que [Alberto] Garzón dice que garantiza el apoyo a Podemos hasta después de las elecciones generales. ¿Está obligando un mes después a ir en confluencias las autonómicas? ¿Cómo explicas que un mes antes vayas en confluencia con Podemos a las generales y un mes después… qué pasa? ¿Se está obligando a las federaciones a ir en confluencia con Podemos? No entiendo nada. Aquí el problema lo tiene la dirección federal, y es la que tiene que aclararse.

-¿Se deduce entonces que el respeto a los militantes asturianos es una cuestión de voluntad política por parte de Garzón y la dirección federal?

-Claro. No puede ser que eso no se respete. Un partido no puede funcionar así.

-Seguimos hacia algo que no 'fuera' hace un momento, pero ahora lo es. Gaspar Llamazares y Actúa. Aquí no hay todavía posturas definidas desde la militancia. ¿Están las heridas demasiado tiernas para plantear ciertas confluencias?

-Pues no lo sé, porque, francamente, estuvimos envueltos en las primarias hasta anteayer. Desde luego, lo que siempre dijimos en esta candidatura es que no nos vamos a negar a sentarnos a hablar con nadie. A mí me han dicho que soy contraria a las confluencias, pero hay que recordar que nosotros vamos en una confluencia con Izquierda Asturiana. Lo que estamos diciendo es 'no' a ir en una confluencia con Podemos porque hemos visto los resultados, que son los que son.

-¿Cuáles?

-Perdimos el diputado por Asturias, nos hicieron ir el número 3 cuando IU era la fuerza mayoritaria en Asturias frente a Podemos. Perdimos nuestro representante a nivel nacional y después nunca volvimos a ver a estos dos diputados que salieron y nunca se volvieron a reunir con IU para consensuar políticas o defender tal o cual cosa. Al contrario: defendieron políticas que no son las que defiende IU, como la descarbonización exprés. Aquí hay que hacer una reflexión. Nosotros en Asturias somos partido independiente; valoraremos, nos sentaremos a ver cómo va esto después de estar concentrados en las primarias. Pero esto que está pasando lo entiende muy poca gente.

-Si no se entiende dentro, mucho menos, es de suponer, en el 'fuera' que al final cuenta, la sociedad, el elector. ¿Hasta el punto de poder suponer costes en términos de votantes? ¿Se están creando despistes o rechazos?

-Para empezar, IU de Asturias es la segunda federación más importante de IU después de Andalucía. En términos de poblacion-voto, es la primera. Si no tienes en cuenta a tus federaciones y lo que te está diciendo su militancia, esto no es democrático. Cuando Garzón se presentó a la coordinación, se nos dijo que esto iba a ser una democracia de las bases hacia arriba, y estamos viendo que es todo lo contrario y que no se respeta lo que vota la militancia. A partir de ahí, la gente que es tu votante y se siente huérfana te lo está diciendo en la calle: «Si volvéis con Podemos, no tendréis el voto; si volvéis como lo que sois, tendréis el voto». Uno puede sentarse después de las elecciones a hablar sobre programas y propuestas de gobierno allí donde haya posibilidades de quitarles gobiernos a la derecha, y máxime con la derecha que tenemos ahora y la que nos está cayendo. Por supuesto que sí. Pero yo no tengo que renunciar a mi mochila ni a mi ideologia ni a mi partido de siempre para obtener ¿qué? Quiero recordar que la última vez que IU se presentó como IU, con Cayo Lara, teníamos 11 diputados nacionales. ¿Qué tenemos ahora? ¿Dónde estamos visibles? La prensa ni siquiera habla ya de Unidos Podemos, sino de Podemos. No: tenemos que seguir nuestra identidad, nuestras propuestas, incluso diré que con nuestra seriedad, porque eso te lo dicen de todos los partidos, compartas o no compartas ideología: que eres gente seria, que cierra un acuerda sobre un programa o lo que sea y eso va adelante. Yo tampoco comparto la política-espectáculo ni creo que la política se haga en Twitter. Y, máxime en estos momentos con la ola de la derecha y la extrema derecha. Es necesaria una izquierda que sea tal, orgullosa de serlo y que tenga la iniciativa de proponer.

-Hablando de propuestas: ¿Cómo se plasmará esa identidad de IU en su programa? ¿Dónde va a cargar las tintas?

-Ahora que es ya el momento de empezar a hablar de propuestas, hay temas que de entrada nos diferencian absolutamente de Podemos: la descarbonización, cómo hacerla, cómo hacer esa transición. Asturias no es la Costa del Sol, no puede vivir de playa y turismo. Y si nosotros no hacemos las cosas bien, va a significar el cierre de esta región. Asturias siempre fue industrial y tenemos que seguir apostando por eso, porque no es incompatible con el medio ambiente. Lo que tienes que hacer es tomar medidas y hacer cumplir la ley. Yo fui ponente en el Parlamento sobre el papel de las regiones y las ciudades en cuestiones de medio ambiente, y hay muchas cosas en este asunto que se pueden tratar desde el punto de vista de las regiones. Alemania no va a hacer la descarbonización exprés como quiere el Gobierno de España. Va a cerrar minas dentro de cinco años… y menudo son los alemanes para planificar esa transición. Ahora mismo hay una plataforma de regiones en descarbonización, hay muchos miles de millones para buscar alternativas para esa pérdida de puestos de trabajo y las demás consecuencias. Tenemos que estar en todo eso. La cuestión es: ahora mismo, ¿por qué futuro apuesta Asturias? Porque algo tendremos que ofrecer a la ciudadanía.

-Imagino que, como candidata, hará valer su condición de actual europarlamentaria, su perspectiva europea.

-Sí, claro. Cuando sales, tienes otra perspectiva, y lo mismo que criticas a la UE por otras cosas, estoy viendo que Asturias está perdiendo muchos trenes en esto y eso no puede ser. No podemos estar centrados en nuestro ombligo para buscar el futuro de Asturias; tenemos que ver lo que nos rodea y qué podemos aprovechar.

-Respecto a las listas, su candidatura ha hecho un llamamiento a la unidad. ¿Han mostrado disponibilidad las otras sensibilidades?

-Aquí se creó una confusión por parte de alguna candidatura al decir «si yo gano, voy a integrar». A ver: la integración teníamos que haberla hecho de entrada, pero algunas personas no quisieron. Nuestra candidatura ya es de integración, no estábamos todos en la misma sensibilidad cuando se eligió coordinador o en otras cosas, pero logramos poner en común lo que tenemos en común como compañeros que pertenecen a la misma fuerza, dejando diferencias aparte. Hubo una parte que no lo hizo así. Creo que es el momento de dejar de hablar de nuestras diferencias, de cerrar filas y de empezar a trabajar para la sociedad, que es lo que se espera de un partido politico. Estamos todos un poco hartos de ver las peleas de unos con otros. Nunca he salido a la prensa criticado nada de IU, a ningún compañero o ninguna decisión porque creo que los problemas se hablan dentro, y que nosotros estamos para dar soluciones. Apelo a eso. Tuvimos que llegar a unas primarias. Vale. Ahora miremos hacia delante y empecemos a trabajar por la sociedad.

-¿Qué perfiles ve más deseables para la lista que la secunde?

-Eso lo decide la militancia. Una vez que se presentaron las listas, la gente votó cada candidatura, pero luego podía cambiar el orden y colocaba a las personas de la lista que habías votado. La integación va a venir ahora, dependiendo los puntos que se les asignen. Si al final, al abrir el voto por correo, es nuestra lista, se irán colocando ahí en el orden que le corresponda. Por lo tanto va a haber una lista de integración que puede llevar gente de las tres candidaturas dependiendo de la militancia. Es la militancia la que ha votado la integración y la que va a hacer la lista de consenso. Es lo que ha decidido la militancia y lo que yo voy a asumir.