La alta velocidad a Galicia recibió tres veces más inversión que Asturias en el último lustro

Luis Ordóñez
L. Ordóñez REDACCIÓN

ASTURIAS

La ministra de Fomento, Ana Pastor, durante una visita las obras de construcción de la Variante ferroviaria de Pajares.La ministra de Fomento, Ana Pastor, durante una visita las obras de construcción de la Variante ferroviaria de Pajares
La ministra de Fomento, Ana Pastor, durante una visita las obras de construcción de la Variante ferroviaria de Pajares Ministerio de Fomento

El Tribunal de Cuentas señala en su informe que las obras de alta velocidad para la Variante de Pajares apenas llegaron al 6% del total frente al 22% de la comunidad vecina

08 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Por diversas razones, por cuestiones técnicas, por imprevistos geológicos, por cambios en el diseño de las vías, por decisiones de gobiernos de distinto color sobre si serviría para mercancías y pasajeros o sólo para estos últimos, la fecha final de la apertura definitiva y cierta de los túneles de la Variante de Pajares se han ido demorando a lo largo de la última década (en su visita más reciente a Asturias, el ministro de Fomento, José Luis Ábalos señaló que la primera circulación en pruebas podría llegar en 2020). La obra de los túneles es de una magnitud muy relevante, un hito de la ingeniería que, lógicamente, ha requerido una importantísima inversión. Pero al menos en el periodo de los años 2013 a 2017 el balance de los destinado desde el Estado al impulso de las líneas de alta velocidad revela que la apuesta ha sido mucho más intensa en unos territorios que  en otros. 

Así lo revela el informe de fiscalización del Tribunal de Cuentas que, en su apartado dedicado a las obras de ADIF en alta velocidad, señala de manera muy clara que en ese periodo, buena parte del mandato de Mariano Rajoy como presidente, las obras del AVE a Galicia acapararon casi la cuarta parte de la inversión, en un porcentaje sin parangón con el destinado a ninguna otra comunidad. En concreto, y según la tabla que recoge el informe, las inversiones de ADIF en líneas de Alta Velocidad consignadas para la Variante de Pajares fueron de algo más de 70 millones en 2013, 201 en 2014, 142 en 2015, casi 60 en 2016 y más de 89 en 2017; en total una cifra que supera los 563 millones para todo el lustro y que en términos porcentales representa el 6,86% de la inversión de ADIF. 

Sin embargo para ese mismo periodo entre 2013 y 2017, la línea de alta velocidad a Galicia (señalada en el tramo Olmedo-Lubian-Orense) recibió el 22,09% de las inversiones de ADIF; cerca de la cuarta parte del conjunto de todo el estado, con un total de 1.813.638; es decir tres veces más que la línea asturiana en el mismo periodo de tiempo. Ninguna otra línea de alta velocidad para cualquier otro territorio del país recibió un impulso de esa magnitud por parte de ADIF, aunque todas las inversiones sumadas del Corredor Meditarráneo, en Levante, Murcia, Andalucía, y de Cataluña hasta la conexión con Francia, todas ellas rozan el 19%. El resto, al igual que la línea asturiana, han acumulado a lo largo del lustro del que se ocupa el Tribunal de Cuentas, porcentajes de inversión entre algo más del 1% y el 8%. El pasado mes de octubre, Ábalos señaló que espera que las obras del AVE a Galicia terminaran de completarse en 2019 (ciudades como Vigo ya han iniciado la construcción de su estación) y que en algún momento del año siguiente comience la circulación en pruebas de los trenes.

En Asturias, en teoría debería verse al primer tren llegar por esas mismas fechas, aunque sólo hasta Pola de Lena. El AVE asturiano ha sufrido además diversos avatares por una discusión reiterada y en bucle sobre el tipo de vías. Con casi todo dispuesto a comienzos de esta legislatura para que ambos túneles usaran ancho ibérico, en la negociación de los presupuestos generales del añi 2017, el voto de Foro resultaba imprescindible y arrancó a Rajoy el compromiso de modificar el diseño para cambiarlas a ancho internacional. Esta medida despertó una gran polémica entre el resto de fuerzas políticas y agentes sociales de Asturias que reiteraron que este cambio no permitiría el paso de mercancías, que limitaría el uso a pasajeros, con el consecuente perjuicio para el desarrollo económico e industrial.

Finalmente, tras la moción de censura y el cambio de Gobierno, Ábalos llegó a Asturias a mediados de noviembre y avanzó que daría marcha atrás a los planes de Foro. Habrá ancho ibérico en uno de los túneles (con lo que las mercancías no tendrán que pasar por la obsoleta rampa de Pajares que fue construida en el siglo XIX) y en el otro se instalará un triple hilo que permitirá la adaptación a los vehículos que precisan ancho internacional.