![Cajas de sidra](https://img.lavdg.com/sc/7QclNcrvWdiyqA5CZi8i7OTSnzA=/480x/2018/09/23/00121537696109674803704/Foto/h1.jpg)
La consejería plantea el debate de que que las administraciones dejen de financiar este tipo de eventos para frenar el incremento en el consumo de alcohol. Las ingestas de riesgo se disparan el fin de semana
21 nov 2018 . Actualizado a las 12:27 h.Cuatro vasos de vino diarios si eres hombre y dos si eres mujer. Dos cubatas diarios si eres hombre o uno si eres mujer. Esos son patrones de riesgo en el consumo de alcohol. La cantidad se mide de acuerdo a lo que se conoce como UBE (Unidad de Bebida Estandar) y se suma en función de los gramos de alcohol puro de cada producto. Lo cierto es que en Asturias la ingesta de bebidas alcohólicas continúa creciendo y parece que las leyes no han hecho mucho para frenarlo. La tolerancia se vuelve incluso más laxa los fines de semana. Un 43% de los asturianos reconoce que bebe lo suficiente sábados y domingos como para considerarse que tiene una conducta de riesgo crónico. La Consejería de Sanidad del Principado, consciente de la gravedad del problema, busca alternativas para invertir la tendencia. Una de las que ha apuntado el director general de Salud Pública. Antonio Molejón, es que las administraciones públicas dejen de financiar eventos en los que el centro sea precisamente la bebida. Molejón ha dado dos ejemplos muy típicos en la región, los festivales de sidra y cerveza.
Molejón ha realizado estas declaraciones en la presentación de la cuarta Encuesta de Salud para Asturias, con datos correspondientes al año 2013. Molejón ha sido contundente. Hay datos que preocupan y dos de los principales están relacionados con malos hábitos: el tabaco y el alcohol. Los asturianos fuman y beben más que en el año 2012, fecha en la que se realizó la última encuesta, y fuman y beben más que la media en España. Eso condicionará el futuro de la salud de los asturianos. En el caso del alcohol, hay un elemento de inquietud añadido: la tolerancia social. «Tanto la población como las instituciones no tiene percepción del riesgo. Ese ve mucho en los actos lúdicos asociados al alcohol», ha explicado Molejón. De ahí que pretenda que «más pronto que tarde» las instituciones reflexionen.
Los ejemplos se multiplican en el calendario festivo asturiano. En los últimos años, en pleno otoño, se han multiplicado los Oktoberfest. Hay certámenes en Puerto de Vega, La Corredoria, Pola de Siero, Avilés, Langreo o Gijón. También están proliferando otro tipo de degustaciones vinculadas al boom de las cervezas artesanas, como las de Pola de Siero, Langreo, Tolivia, Laviana y Oviedo.Un ejemplo mucho más típico de la cultura asturiana son los festivales de la sidra. Los dos más populares, por multitudinarios, suelen ser los de Nava y Gijón, ambos en verano. Pero existe una gran multitud, sobre todo, en el área central de Villaviciosa a Langreo o Mieres.
Cifras para reflexionar
El repaso que la Encuesta de Salud realiza a este capítulo es exhaustivo. Seis de cada diez asturianos reconocen haber tomado alcohol en el último año. El 47% lo ha hecho en el último mes. Una buena parte se identifica como «consumidor habitual». La edad es un factor determinante. Esta investigación reconoce que la frecuencia es inversa a la edad. No obstante, cada vez existe mayor precocidad. «Las personas jóvenes tienen un consumo habitual en edades más tempranas que las generaciones anteriores», detalla. La media actual está situada en los 16 años aunque, en teoría, hasta los 18 la compra no es legal.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), recuerda esta encuesta, considera que existen riestos diferenciales entre ambos sexos debido a la capacidad metabólica del hígado. Esa explicación es necesaria para explica cómo cuantifica la ingesta excesiva y para señalar a qué porcentaje de la población afecta. El consumo crónico grave diario atrapa al 5,4% de los asturianos. En números redondos, casi 55.000. La proporción es ligeramente superior en hombres que en mujeres. Los fines de semana los porcentajes se disparan. El umbral es del 43%. Curiosamente, el dato es superior en mujeres que en hombres. Una mujer que beba más de dos copas cada día del fin de semana está en riesgo. Lo mismo si toma dos chupitos pequeños de licor o dos aperitivos. Con la sidra tienen más margen. Podrían beber hasta una botella escanciada en seis culetes. Ese sería el límite.
Otra cosa, con un peligro extra, es el consumo intensivo. De manera coloquial se les denomina atracones o binge drinking. Consiste en tomar muchas bebidas alcohólicas en un corto periodo de tiempo. La encuesta también da cantidades de referencia. En hombres pueden ser más de seis copas de vino en menos de cuatro horas en hombres o cinco en mujeres. Reconoce que ha tenido este tipo de comportamiento de manera intensiva el 3,3% de los asturianos, aunque es mucho más frecuente en varones. Pero el 50% de los asturianos que son consumidores habituales reconoce que ha tenido más de un atracón alguna vez en la vida.
Sea cual sea el tipo de relación con el alcohol, solo cuatro de cada diez bebedores recuerda haber recibido consejo de su médico, diciéndole que es perjudicial para la salud.